Animación amorosa, de indudable raíz pictórica (romántica e impresionista), en la Rusia clásica de la literatura más lírica y pasional.
Jovenzuelo idealista y recién salido del cascarón de la infancia se divide para amar a dos bellas mujeres; la misteriosa femme fatale de las gafas secretas y la analfabeta de corazón puro que es su criada.
Somero (es mediometraje) ejercicio de estilo preñado de imaginación y vértigo que resulta un pueril relato tan entusiasta y naíf y delicado y bonito como superficial y solo correcto narrativamente.
Se aprecian el buen gusto, la sensibilidad y el trabajo concienzudo, pero no es la gran cosa; demasiado corto y atropellado y desencadenado como para que las maravillas febriles de esa tierna edad adolescente se concreten poco más allá de un esbozo hermoso.
Arte poético que trata de atrapar una fugacidad vulnerable con la mirada infantil de un cuadro abierto, en movimiento, voraz y enroscado.