El documental lleva mucha paja, dura 1:40 y a la escalada del Capitán en solo integral le dedica 13 minutos, en los cuáles además se intercalan escenas de los que están con las cámaras y los que esperan abajo. También la novia del intrépido Alex Honnold chupa mucha cámara, y desde luego no es por su nivel como escaladora.

En cualquier caso, a la increíble hazaña realizada por el que actualmente es el rey mundial del solo integral, no se le puede dar otra calificación que no sea el 10. Tampoco es que tenga mucha competencia para ser el número uno porque solo hay 3 personas en todo el mundo que escalen en la modalidad de solo integral. A partir del minuto 1:19 comienza a escalar y la verdad es que da miedo verlo, incluso a los grandes escaladores que están abajo les da miedo, y no es para menos. Es una de las cosas más impresionantes que se pueden ver hoy día. Pongamos una comparación:
Allá por los años 80, los hermanos Gallego, que eran expertos escaladores, realizaron una hazaña que tuvo gran seguimiento en los medios de comunicación españoles. La hazaña fue escalar el Capitán, invirtiendo 5 días en la ascensión, durante la cual dormían en una tienda de campaña colgante, y en todo momento iban asegurados con cuerdas. Pero en este documental vemos como Honnold escala el Capitán en menos de 4 horas y sin usar ninguna cuerda ni ningún tipo de material, absolutamente nada que no sean sus manos y pies y la bolsita de magnesio. Bueno, también lleva camiseta, zapatillas pies de gato y pantalón, y supongo que también calzoncillos. Nada de arnés, cuerdas ni ningún accesorio de los tropecientos que llevan los escaladores. Por lo cual, el mínimo fallo durante estas casi 4 horas supone la muerte, ya que la pared tiene 1 km de altura y si se resbala o no se sujeta bien cae a plomo sin remedio.

Bodriamen. Una chica que pilota un pedazo de coche deportivo como para correr las 24 horas de Le Mans es incapaz de dejar atrás a un camión vulgar y corriente en una carretera de semi-montaña. El camión tiene más aceleración, más velocidad punta y más velocidad cuesta arriba que el bólido. Vamos, como si el bólido lo hubiese hecho la escudería Mac Laren para Fernando Alonso.

Esta peli es tan mala que ya no me acuerdo de casi nada y eso que la vi ayer. Esto debe ser por algún mecanismo de defensa que tiene la mente o la personalidad, que hace que olvides las cosas inútiles y así dejas sitio en la memoria para otras cosas. La verdad es que sólo recuerdo que cuando la estaba viendo me sentía indignado porque era como una tomadura de pelo, con un guión para retrasados y una gente que hacen como si fueran actores.

Sólo recuerdo una escena porque fue como el chiste de que van dos corriendo por el desierto, uno cargado con un armario sobre la espalda y otro con un yunque bajo el brazo. Y paso a zona spoiler.

Una mujer joven directora y guionista, una mujer joven protagonista y que además lleva ese horrible pelo típico de las feminazis, pues nada, vamos a darle el premio y todo lo que haga falta. ¿Que la película es un truño? Bueno, eso es lo de menos, si es un producto donde las mujeres controlan el cotarro y además una tiene el pelo de feminazi, el resto no importa. ¿Que la adolescente que está al final del bachillerato (17-18 años) aparenta veintitantos (24 tacos tiene la moza) y por su edad real le pega más el papel de profesora? Da igual, es una mujer que lleva el pelo de feminazi y solo por eso puede tener los años que le de la gana y ser nominada al oscar aunque sea una caracartón que lo mismo le daría que le tocase la lotería o que la pillase un tren, siempre con la misma expresión. Y paso a spoiler.

Peli chabacana y burda, más que una peli de amor es de sangre y violencia. El malo es demasiado malo y el bueno (el sireno) produce sobre todo compasión el 99% del tiempo. Lo poco bueno que tiene la peli es la actuación de la protagonista Sally Hawkins, merecedora de optar al oscar. También es buena aunque menos la actuación de Michael Shannon que no está nominado pero lo merece más que Richard Jenkins que si lo está.
En fin, que si no la ves no te pierdes nada.