Cashback (2006)

Hay películas que destacan por la historia que cuentan y sin embargo hay otras que lo hacen por como la cuentan. Y este es el caso en que nos encontramos.

Esta es una película de personajes, mas que de actores, donde el espectador viaja a través de los ojos del protagonista de forma íntima con sus pensamientos y su visión del mundo.
La composición escénica y el estilo narrativo, nos transporta de manera perfectamente fluida y magistral entre pensamientos, recuerdos y situaciones presentes.

Los monólogos y diálogos son sencillos pero ciertamente profundos.

En general, estamos frente a una comedia de gran factura, que nos demuestra que en ciertas ocasiones es mas importante el modo en que se cuentan las historias, que las historias mismas. Y que una comedia no necesita ni de histriones ni de enrevesadas tramas para hacernos pasar un buen rato.

Por estas y por otras razones la dedico un estupendo 9

Me he llevado una grata sorpresa con "Cashback". Este film inglés de director e intérpretes desconocidos tiene su origen en un cortometraje, de mismo nombre que el film, rodado dos años antes por el propio Ellis con la interpretación de los mismos actores. De un cortometraje de 18 minutos, se ha realizado una película de una hora y media. Lo lógico hubiera sido un desastre de film, pero en ocasiones las historias se pueden alargar, y Ellis ha sabido trasladar su corto a un formato más largo.

"Casback" narra el trasncurrir de Ben Willis (Sean Biggerstaff) un estudiante de Bellas Artes, en el turno de noche de un supermercado. Ben acaba de romper con su novia y sufre de insomnio, por ese motivo ha decidido ocupar sus noche trabajando en el súper. Allí conoce a la cajera Sharon con la que entabla una buena amistad. Entre conversaciónes y bromas con los otros empleados, Ben congela el tiempo y desnuda a las clientas para dibujarlas.

La película pasa entre bromas y momentos dramáticos. El comienzo del film es muy bueno, toma un tono serio, pero poco a poco la película tiende a lo cómico. En su conjunto es una buena mezcla, aunque en ocasiones abusa de frases manidas y petulantes. Tal vez ese sea el gran fallo de la película, gran parte de la historia nos es contada con una voz en off del protagonista en la que nos cuenta sus pensamientos y nos recuerda parte de su infancia. Los flashbacks me parecen correctos, pero utiliza cantidad de frases rebuscadas, típicas de poeta quinceañero.

El film, técnicamente es muy bueno, muy buena cámara y una gran fotografía. Los actores también me han parecido buenos. Sean Biggerstaff ha estado perfecto, igual que Sharon (Emilia Fox). Los amigos un tanto exagerados, pero ellos eran los encargados de la parte cómica, así que nada que achacarles. Buena película (6.5), una grata sorpresa.