La misma sangre (2019)

Estamos en presencia de un film que intenta ser un thriller , con muchas ambiciones desde el comienzo pero con el transcurso de la historia se queda en un drama familiar. Le falta algo, puede ser ritmo, puede ser mas adrenalina, no estamos en presencia de una mala película al contrario, pero carece del efecto sorpresa , tal vez la duración del largometraje le juegue en contra. Las actuaciones son brillantes, tanto la del experimentado Oscar Martínez, interpretando a un perdedor de la vida como la de Dolores Fonzi, haciendo una madre y esposa ejemplar. Mas allá de mi calificación la recomiendo, no es brillante, pero la salvan sus actuaciones tan bien logradas.

El título de mi crítica solo tendrá sentido para quien la vea.

Me ha gustado, me entretuvo. El cine argentino actual sabe conducirse; moviéndose por caminos elegantes, sencillos y bien construidos. Aporta elementos narrativos que en otros proyectos de otras cinematografías, se han perdido. Es una suerte que la industria del país no haya permitido sofocarse imitando formas y maneras que se traducen en clones simétricos, tan conocidos y resueltamente artificiosos.