arrow

Estación Unión (1950)

Estación Unión
80 min.
6,6
347
Votar
Plugin no soportado
Añadir a listas
Tráiler (INGLÉS)
Sinopsis
A Joyce Willecombe le inspiran desconfianza dos hombres que viajan con ella en el tren; llama entonces a Calhoun (Holden), el jefe de policía de la Estación Unión. Aunque éste, al principio, se muestra escéptico, todo parece indicar que los sospechosos están implicados en un caso de secuestro, razón por la cual Calhoun pide ayuda al inspector de policía Donnelly, pero los secuestradores son muy escurridizos. (FILMAFFINITY)
Género
Cine negro Drama Crimen Policíaco Secuestros / Desapariciones
Dirección
Reparto
Año / País:
/ Estados Unidos Estados Unidos
Título original:
Union Station
Duración
80 min.
Guion
Música
Fotografía
Compañías
Links
8
Recuerdos de adolescencia
Cine negro policiaco servido con fluidez y eficacia narrativa por el realizador nacido en Polonia y establecido en Hollywood, Rudolph Maté. El guión, denso y acertadamente abreviado, es de Sydney Boehm. Desarrolla un argumento de Thomas Walsh (“Nightmare in Manhattan”, 1949). Se rueda en interiores de la estación central de L.A. (Union Station), en escenarios exteriores de L.A., en la 3ª Avenida de Manhattan (NYC) y en los estudios de la Paramount (Hollywood). Producido por Jules Schermer (“El hombre de Colorado”) para la Paramount, se proyecta por primera vez en público el 4-X-1950 (NYC).

Los personajes centrales son el teniente de la policía de los ferrocarriles de CA, William Calhoun (Holden), con sede de Union Station; una muchacha ciega por causas sobrevenidas en la adolescencia, llamada Lorna Murchison (Roberts), hija del próspero empresario Henry Murchison (Hayes); el inspector de policía Donnelly (Fitzgerald) y Joyce Willecombe (Olson), amiga de Lorna y secretaria de su padre. La caracterización de los personajes se presenta definida en base a un conjunto de rasgos básicos, elegidos con coherencia, que componen una galería de figuras contundentes y precisas, fácilmente identificables por el público.

El policía Calhoun es inteligente, riguroso, experto y tiene cualidades de líder, pero a la vez es desconfiado, presumido, escéptico, resabiado y quisquilloso (le irrita que le llamen Willy). Está tan acostumbrado a tratar con grandes y pequeños delincuentes, que piensa que todos sus interlocutores son mentirosos y delincuentes. Joyce es temperamental, la dominan las emociones, es intuitiva y honrada, carece de dobleces y es sincera más allá de su voluntad. A la vez, es pundonorosa y la suficientemente fuerte para defenderse de las pullas que le echa con cinismo y cierta agresividad el teniente Calhoun. Los dos desarrollan una sorda y divertida lucha de sexos en la que Joyce nunca queda desairada. Donnelly es un viejo zorro de la policía, que sabe más por experiencia y los instintos que le ha dado la naturaleza, que por lo que establecen los manuales convencionales de investigación policial.

La acción mantiene una intensidad elevada y absorbente a lo largo de todo el metraje hasta que éste alcanza el clímax de una secuencia final memorable, empeñada curiosamente en demostrar que el lugar de los hechos, pese a las apariencias, es limitado, reducido y está dispuesto en forma circular (tras una larga carrera, los personajes se encuentran en el mismo lugar de salida).

…/
[Leer más +]
29 de 29 usuarios han encontrado esta crítica útil
8
El Secuestro
El mismo año que dirigiera “D.O.A.”, Rudolph Maté se encargó de este noir para la Paramount. El talentoso director de origen polaco rueda un “police procedural” lleno de violencia, de comportamientos ruines, ambiguos y en donde, nuevamente, la línea entre el bien y el mal vuelve a quedar bastante borrosa. La acción se sitúa en una estación de tren; en ella, se desarrollará el secuestro de Lorna Murchison, una joven ciega e hija del millonario Henry Murchinson. La aparición en escena del teniente de policía de la estación William Calhourn (William Holden) y del inspector Donnelly (Fitzgerald) dará comienzo a la resolución del caso.

El misterio que envuelve al secuestro es bastante convencional, lo cual no oculta los innumerables aspectos de calidad que ofrece el film. Para comenzar podemos hablar del ritmo que Maté imprime a la historia. La cadencia es rápida, sin descanso: se desarrollan las escenas de acción, precedidas de persecuciones, seguimientos, interrogatorios…los diálogos son pocos, las palabras, las precisas. Con esto, y junto con un breve metraje, el director mantiene en continuo suspense a un espectador al que no se le está permitido ni un segundo de distracción.

La fotografía de Daniel L. Fapp aparece en las escenas más importantes, como en el desenlace o en el interrogatorio en las vías del tren a uno de los secuestradores, oscureciendo no solo la pantalla, sino también la moral de alguno de los personajes. Por otra parte, tiene el gran acierto de captar magníficamente el ambiente de la estación; el ajetreo sin cesar de pasajeros, yendo y viniendo, la presencia en segundo término de las conversaciones, de los murmullos, del altavoz de información o de los trenes entrando y saliendo, permiten vivir prácticamente in situ toda la acción, en una puesta en escena ejemplar y que es, sin duda, lo mejor de la película.

El trasfondo pederasta y los poderosos instintos asesinos del cabecilla del secuestro, el comportamiento un tanto ambiguo de la policía o el impactante final a lo “The Third Man”, completan un film que merece la pena ser visitado por su ritmo y por su solvencia, y que disfrutarán especialmente los amantes del noir policial.
[Leer más +]
14 de 14 usuarios han encontrado esta crítica útil
Más información sobre Estación Unión
Fichas más visitadas