Mohawk (2017)

Bien, hay que reconocer que Tomahawk desprende desde el principio un cierto tufillo a presupuesto ajustadísimo y tirando a precario, un guion que no es nada del otro mundo y toda una serie de escenas o resolución de situaciones que chirrían muchísimo o que no se las cree ni la madre del director.

Pero funciona.

No sé cuál es el motivo: si el frondoso bosque en el que tiene lugar toda la película y que casi se convierte en un protagonista más; si la absoluta falta de pretensiones, que es muy de agradecer; la actriz protagonista, que tiene carisma y tirón; o quizá esa atmósfera surrealista, psicodélica y algo pasada de roscas, en el marco de una situación muy concreta dentro de la guerra de la independencia estadounidense.

Sí, es innegable que todo huele a producto de serie B. Pero a pesar de ver una y otra vez a los mismos (pocos) personajes, contemplar una y otra vez la estupidez de sus decisiones, y ver cómo la historia se desarrolla hacia lo previsible y lo trivial, Mohawk tiene algo.

Puede ser una excelente ocasión para echar una canita al aire con algo distinto pero que sin duda contiene certeras dosis de talento hipnótico.

No puedo decir mucho sobre este intento de film, es cutre en todos los aspectos, malas actuaciones, una trama que no atrapa, personajes sin carisma ni interés.

Las críticas de los “expertos” me engañaron y me hicieron picar, espero que no hagan lo mismo con nadie mas.