El tesoro (TV) (2008)

Lo que podría haber sido: una comedia negra al más puro estilo Tarantino.

Lo que es: un guión aunque imaginativo, cogido con pinzas. Una banda sonora que no encaja (y lo digo muy en serio, un trombón, un tambor de semana santa y un clarinete haciendo ruidos cutres sin sentido), un reparto que funcionaría por Antonio de la Torre, pero todo cae en saco roto con dos adolescentes sosos, que no vocalizan y desde luego, no son actores. Y a alto nivel técnico, sorprendente tratándose de una tv movie.

En resumem: podría haber sido bastante interesante, pero se fue al traste por un guión con fisuras, una banda sonora pésima y un reparto que no compensa lo malo.

A pesar de su evidente contexto dramático, la película se mueve en todo momento en el tono de la comedia negra. La deliciosa actuación de Antonio de la Torre hace que olvidemos que se trate de una película con pocos medios, tal es el magnetismo que desprende este actor. Su manera de mentir, muy al estilo del personaje de Fermín de la serie 'La Que Se Avecina' le otorga todo el encanto que un personaje de estas características pueda suscitar. Los diálogos también son muy acertados; eso unido a la manera con la que Antonio lleva a cabo su labor interpretativa diría que es una de las claves por las que esta película funciona tan bien.

El resto no se queda atrás. Véase al gran Antonio Durán 'Morris', un actor con el que se acostumbra a contar para roles de reparto, lo impresionante que está aquí. Hace de delincuente de poca monta, con todas las caracterísitcas que a un personaje así se le podría atribuir, esto es mal carácter, cambios de humor así como tendencias hacia la extorsión e inclinación por la violencia, pero la intención de la película siempre pasa por deslizar algo de comicidad en la brusca y amenazadora atmósfera que rodea a ese personaje. Hay veces en las que resulta hasta ¿entrañable? Sí, y muy divertido. La escena en la que insta a Fran (Xúlio Abonjo) a comerse la tortilla en lo que habla con él diría que es un homenaje a la secuencia de 'Uno de los nuestros', cuando De Niro y Liotta están sentados en un restaurante y el último comprende que le va a traicionar. El color de los asientos (rojo) y hasta la disposición en el restaurante es idéntica a la del comentado filme. Hasta están sentados en los mismos sitios, Morris (igual que DeNiro) en el lado izquierdo y el chico (como Liotta), en el derecho. Otro paralelismo es que el desfavorecido sabe que tiene problemas y que el poderoso va a ir a por él sin necesidad de que lo diga explícitamente, es una sensación que el increpado es capaz de masticar en el ambiente. Como no, la comicidad contenida preside la escena.