El ejecutor (1970)

Película menor que poco aporta al cine de espias y al thriller de acción a no ser su trazas de melodrama romántico (había que usar el encanto de Joan Collins como perdición de los hombres). Deudora de la exitosa "A quemarropa" (montaje asincrónico, narración no lineal, etc..) y dirigida por el discreto Wanamaker con apagada inspiración pero innegable oficio gracias a lo cual no aburre pese a lo lioso (algo unido al género por otra parte) de la trama y lo empalagoso de la estética. Bien interpretada, sobre todo por los notables secundarios, con buenos momentos y en general disfrutable.