Quatermass 2 (1957)

Secuela feliz de una primera entrega descomunal. Imposible compararla con su antecesora, presenta diferencias de trama, no de género, que la hacen única junto con la anterior. Es cierto que en muchos aspectos la función investigativa se adentra en el policial para luego salir indemne e ingresar dentro de la ciencia ficción, aunque en lo personal considero que la primera de Quatermass tenía grandes dosis de cine de terror, algo no tan evidente en esta secuela.

En principio, rescatar que la invasión alienígena en este caso es mucho más espectacular y caótica. Las escenas de acción aquí abundan mientras que en la primera versión todo se iba dando más...paso a paso, metódica y gradualmente. Tiene sabor a final definitivo, algo que rápidamente podemos refutar viendo la cantidad de secuelas posteriores. Pero prefiero quedarme con Quatermass 2 y no con el vaciamiento de una idea sólo potable para fines comerciales.

Quatermass deja de ser un mero científico: se ha transformado en un héroe con todas las letras. La cantidad de acciones del personaje se multiplican dándole una identidad mucho más amplia. Por otro lado, el guión peca de ser un poco más inocente, ciertas escenas con ingenuas y presentan vueltas de tuerca forzadas.

Más ampulosa, pero al mismo tiempo un hilo conductor esperable en relación a la primera entrega, Quatermass 2 resulta, en última instancia, un moño perfecto para el regalo final que les brindaremos a nuestros hijos en algún futuro. Cuando ellos mismos exploren en el pasado del cine y descubran que, en los albores, ya estaba todo más o menos inventado.

Que nadie lo dude, la aparición del primer Quatermass fue un bombazo, de manera que la Hammer, que digo yo que para eso era una productora, aprovechó la onda expansiva del fenómeno para colocar dos años después en el mercado una segunda parte. La línea es la misma, creo que esta segunda parte mantiene el nivel y no es del todo justo decir que está por debajo. De hecho, hay más usuarios que creen que es incluso mejor que la primera y original película, lo cual no es poca cosa teniendo en cuenta que la base de la ciencia-ficción que se despliega es idéntica. Lo que cambia, lo que la hace más interesante, es que hay más acción, el viejo perro Quatermass se mete en el ojo del huracán con las previsibles consecuencias que ello conlleva, que es salir indemne de todo tiroteo, salvar todo obstáculo que se le presente y acabar la peli con un halo de infalibilidad que le permita protagonizar nuevas hazañas.

A mí me gusta tanto como para otorgarle seis estrellitas en la escala FA porque me ha entretenido una barbaridad y porque su falta de verosimilitud, la innata al género y la concreta aquí, me ha resultado muy agradable. ¿Una película puede ser tierna?; qué cosas se me ocurren, el caso es que teniendo en cuenta que son los años 50 y que he llegado a ver muchas castañas de serie B de la época, este Quatermass me parece muy meritorio. De acuerdo, quizás no sea del todo una película 'tierna', me viene a la mente la imagen de esos godzilas del final saliendo de sus cúpulas y para el espectador de la época sería de todo menos tierno. Esta película si la hubieran visto mis padres en esa época hubieran flipado, así que confieso que no puedo dejar de pensar en su contexto. Y qué leches, vista hoy me ha hecho pasar un muy buen rato.