La esclava del desierto (1947)

Amigos lectores de esta crítica. La película que nos ocupa es una simple película exótica, cargada de toques de humor y de diálogos a veces geniales y otras veces infantiles, con correrías por el desierto y también por las playas de Trípoli, aunque nada esta rodado en aquellos lares.
El protagonista, George Brent, es un cínico caradura muy adecuado a su papel, acompañado por una maciza Yvonne De Carlo, también muy adecuada.
El film está muy bien interpretado de forma jocosa y el espectador asiste a la trama con un benévolo interés. El metraje muy adecuado y el guion simple, sin pretensiones y bien estructurado.
Resumiendo: Recomendable para 80 minutos de sana diversión.
Aviso, la sinopsis de Filmaffinity no es del todo correcta.

Una película que cuenta en su reparto con Yvonne De Carlo, George Brent, Broderick Crawford, Albert Dekker y Andy Devine y la promesa de aventuras exóticas en Trípoli, de entrada se presume cuando menos más que interesante. Por desgracia, el verdadero protagonista de la historia es un camello, de nombre Humpy, que pone su presencia y su lamentable voz en off para narrar una historia tan rutinaria como poco estimulante pese a contar con la belleza de Yvonne De Carlo en un papel exótico con baile incluido.
El film no encuentra en ningún momento el tono necesario para contar la historia yendo a caballo (mejor dicho camello) entre el cine de aventuras exóticas y la parodia bufa de marcado acento infantil. Una pena.