Starship Troopers: Invasión (2012)

Lo primero, agradecer a Shinji Aramaki que no haya hecho otra película que envíe todavía más abismo a la saga Starship Troopers. Starship Troopers 2 y 3 fueron películas mediocres que prácticamente valían sólo para reirse de ellas (más la segunda que la tercera, eso sí).

Esta invasión es una muy digna película, y aunque descontentará a unos cuantos seguidores de la película original a mí me ha gustado y mucho. Puede que parezca todo el rato el trailer de un videojuego, pero al final acabas por verla como una producción mucho más grande de lo que es. Porque ver a Carl, Rico y Carmen de nuevo juntos no deja de ser un punto a su favor, por muy distintos que se muestren en esta película de animación. Puede que no te gusten los robots mecha que salen, pero échale las culpas al programa marauder de la tercera entrega y no a la debilidad que tienen los japoneses por meter robots en todas partes.

Pero no todo es tan bueno como parece, porque la primera media hora o cuarenta minutos (quitando el principio) son para bostezar todo el rato. Un aburrimiento que se olvida cuando se llega a la segunda parte de la película donde todo se vuelve más frenético y con un ritmo mucho más atrayente para el espectador al que va dirigida la película. Unos cuantos bichos y no demasiadas bizarreces nuevas como ocurría en las entregas directas para DVD.

Por pedir más, a Starship Troopers: Invasión le sobran naves y le faltan planetas. Se echan de menos esas excursiones a los planetas dominados por los bichos y uno acaba un poco cansado de ver tantos hierrajos de la nave todo el rato. Además, Shinji Aramaki juega con fuego y acaba quemándose un poco, ya que deja entrever la posibilidad de una cruel batalla en el planeta Tierra para finalmente desechar la posibilidad. Hubiera sido curioso ver a los bichos pasear por las ciudades.

Starship Troopers: Invasión hace justo lo que debe, olvidarse de la mediocridad de las secuelas y tomar de referencia la primera parte. Le falta el espíritu de sátira y de crítica en general, e incluso sentido del humor, pero ya nos reímos demasiado en la segunda y tercera parte.

En su día comenté que si Paul Verhoeven se hubiera tomado 100% en serio “Starship troopers” y no se hubiera dejado comer por los complejos de hacer una película de marcianos, habría logrado una obra maestra, una película de referencia. Menos icónica que “Star Wars”, pero igual de imaginativa y más “accesible” (en el sentido de que es más fácil ponernos en la piel de un marine espacial que en la de un jedi o un wookie). Mantengo mi afirmación, igual que mantengo que le sobran muchas parodias, críticas encubiertas y alivios cómicos… y del mismo modo que reconozco que aunque el espíritu perdura, lo últimos avances tecnológicos han hecho mella y cada vez que la echan en la tele (y, por supuesto, dedico un rato a los momentos míticos) la notod más desgastada, menos fresca… un poco como ver los episodios originales de “Star treck”, que nunca dejarán de ser míticos, pero las historias y las estéticas van adquiriendo un punto de estrafalario.

Precisamente por eso, esta “Starship troopers: invasion” me parece tan interesante. “Invasion” es una curiosa propuesta que mezcla lo mejor de su película fuente: lo “real” de una historia de guerra galáctica que nos podría llegar a pasar (con la pizca de imaginación que necesita siempre la ciencia-ficción) con las ventajas de la animación por ordenador que permite crear los mundos de ficción hiper-reales y mega-tecnológicos que necesita la ambientación de una película como ésta y que fue una de las causas de los fracasos de las dos secuelas previas, lastradas por una pobreza de medios que no estaba compensada por el talento de Verhoeven o creatividad de guión.

Aunque no me terminen de convencer las películas de animación (muchas veces me parecen un atajo, una forma fácil de contar una historia sin las penurias de dirigir actores, crear escenarios, buscar exteriores) en este caso el uso de la digitalización me parece plenamente justificado. No va a pasar el tiempo por esta obra, aunque hay que reconocer que la historia, reducida a un entorno limitado al interior de una nave espacial, se queda pequeña en comparación con la grandiosidad de las invasiones planetarias… me gusta pensar que en el futuro habrá más entregas (la puerta ha quedado abierta) en la que se saque todo el partido a la tecnología (ha quedado patente que es posible) y veamos batallas multitudinarias dentro del mismo marco de guerra humano-insectos que tan enganchado me tiene. Ya puestos a pedir, que la historia no parezca un refrito-fusión de “Alien” y “Alien II”, que margen tienen.

Simple, pero espectacular y sin fisuras. Que sigan por este camino.