Crítica de Dailo_Caravian
Dailo_Caravian
Madrid, España
El cielo sobre Berlín (1987)
- Wim Wenders
- Bruno Ganz, Peter Falk, Solveig Dommartin ...
Donde la lógica no llega, los códigos deben reinventarse.
27 de agosto de 20083 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Lírica para un cielo que amamanta a un niño enfermo.
La consecuencia profunda de la injusticia, la corrupción, la separación.
La búsqueda de la pureza, esparcida... cavar hondo para poder vislumbrarla.
¿Se puede buscar desde lo no tangible, se puede divagar acaso, está permitido ese lujo después de ése Día Después concreto? El cielo sobre Berlín se mueve en ese eterno Día Después en el que el ser humano admitió su derrota... y continuó aislándose. ¿se puede obtener la redención?
...¿el perdón?
Nunca el ser humano me pareció tan elevado en el fango, tan completamente representado.
Es necesario descontextualizar El cielo sobre Berlín de cualquier forma narrativa, de cualquier bello o feo paisaje. Incluso en este aspecto la fotografía se realiza sobre lo invisible, en este caso sobre el pesar profundo que no se ve, donde de nuevo Wenders pretende captar, hilar fino, para finalmente regalarnos una poesía que puede decir tanto...
...puede decir mucho. Aunque finalmente pueda ser una película lenta, que desafíe la paciencia más lógica. Pero es que Wenders ahí precisamente no quiere llegar. Tampoco pretende la disculpa. Está en su derecho de buscar y mostrar el vértigo sobre el que se mueve. En este sentido pocos cineastas han sido tan generosos.
La consecuencia profunda de la injusticia, la corrupción, la separación.
La búsqueda de la pureza, esparcida... cavar hondo para poder vislumbrarla.
¿Se puede buscar desde lo no tangible, se puede divagar acaso, está permitido ese lujo después de ése Día Después concreto? El cielo sobre Berlín se mueve en ese eterno Día Después en el que el ser humano admitió su derrota... y continuó aislándose. ¿se puede obtener la redención?
...¿el perdón?
Nunca el ser humano me pareció tan elevado en el fango, tan completamente representado.
Es necesario descontextualizar El cielo sobre Berlín de cualquier forma narrativa, de cualquier bello o feo paisaje. Incluso en este aspecto la fotografía se realiza sobre lo invisible, en este caso sobre el pesar profundo que no se ve, donde de nuevo Wenders pretende captar, hilar fino, para finalmente regalarnos una poesía que puede decir tanto...
...puede decir mucho. Aunque finalmente pueda ser una película lenta, que desafíe la paciencia más lógica. Pero es que Wenders ahí precisamente no quiere llegar. Tampoco pretende la disculpa. Está en su derecho de buscar y mostrar el vértigo sobre el que se mueve. En este sentido pocos cineastas han sido tan generosos.