No sé si Buster Keaton llegó a conocer esta película pero desde luego el tramo final de "Siete ocasiones", del citado cineasta yanqui, y el argumento de este corto de Chomón son idénticos. Ciertamente, viendo esta cinta de 1904 (año posterior a las producciones de Porter "Asalto y robo de un tren" y "Vida de un bombero estadounidense", y anterior a "La cleptómana", del mismo realizador), podemos comprobar hasta qué punto el aragonés (del que tampoco sé si conocía estas obras) estaba asimilando a un ritmo bastante parejo al de Edwin S. Porter las posibilidades narrativas del arte cinematográfico y la potencialidad en el desarrollo del montaje del recurso de la persecución, colocando así a Chomón y al cine español por ende en un puesto de vanguardia en la construcción del lenguaje del séptimo arte. No en vano, Chomón se convertiría en uno de los grandes del cine europeo poco después y esta cinta deja claro por qué: a pesar de la sencillez del argumento (característica común a todas las películas de esa década), desarrolla una historia divertida basada en una persecución que, si bien al principio tiene algún bajón rítmico, no deja de estar hilada con una perfección digna de un maestro del montaje y del rodaje y que supondría el antecedente (a veces parece que calcado) de la hilarante persecución del título de Keaton más arriba citado. En fin, un joyita bien interesante.