Al turrón -- el firmante de Kickass (versión cinematográfica) se lanza a caraperro con una suerte de mix entre TRAS EL CORAZÓN VERDE, MEMORIA LETAL y sus propios largos de espiás jacarandosos.

Y el resultado es... meeeeh. Primero, porque el humor no cuadra (le falta algo de la mala hostia kingsmaniana) y luego - caray - porque el número de giros sorpresivos alcanza un nivel de dislate importante. Tampoco ayudan unos villanos desaprovechados (Cranston, gente - why?) amén de que las intersecciones realidad ficción entorpecen más que ayudan, el abusivo CGI parece revelar ciarta vaguería generalizada de puesta en escena y se echa de menos la mala leche de Vaughn durante parte del metraje.

En fin. Otra vez será -

¿Es éste cineasta un "pony que solamente saba hacer un único truco"? Habrá que ver.

Al grano - parece ser que el proyecto empezó como una serie de cortometrajes de arquitectura nipona encargados a Wenders, quien decidió volverlos un largo.

Y SE NOTA.

Porque no hay movimientos en la trama. Que sí, personaje feliz. Pero no sabemos nada de él. No hay tensión dramática y tampoco conflicto. Vamos, que a mí, como occidental, me pierden. Porque un film carente de drama como éste está repleto de redundancias, escapismos oniricos, conducciones por la ciudad acompañadas de buenas canciones y pulsos dramáticos calaramente obviables. Vamos, que hay una versión de 85 minutos de éste largo esocnidda en su interior que sería sensiblemente superior.

Una pérdida de tiempo muy bonita y muy calmante.

Mejor vean Godzilla Minus One. Consejo de amigo.

Es una pena que el film no se ponga serio, porque su planteamiento con engaños digitales tiene interés.

Pero no - las hostias finas sathiamas empiezan pronto. Y también otra cosa:

El film juega a un altius, citius, sillius bien pronto. Donde otros largos se quedarían en un aceptable punto casi de serie B, aquí la cosa se va de rosca y se mete en terrenos de macarrismo considerable (vaya pitas me llevan algunos villanos, señora) que nos mete a nivel FBI, CIA, P.O.T.U.S. y similares.

O sea: una apuesta por el dependole algo repetitiva y chorra, pero harto bienvenida a veces por su morro, su pitorro general y su falta de limitaciones o realismo.

Una chorrada simpática.

Al grano: la peli está bien -- hay algo agradable en ella. Casi sedante. Desde sus conlfictos humanos de aceptable intensidad a su música folk que adorna la banda sonora.

Y luego, el cast es impecable. Primeramemnte, porque sus personajes están muy bien escritos. Hay drama y comedia. Pero sin exceso. Y sí - el resultado le deja a uno bien - confortable y con sensación de gusto.

Si acaso, una pega: el film se alarga un tanto -- die minutos menos hubieran ayudado, caray.

Emoecemos con una cosa -- tal vez la película se ha overhypeado. Es ESTUPENDA, pero no tal vez una obra maestra, como tanto se ha dicho. Por otro lado, el elemento melodramático ralentiza un segundo acto en el que el bicharraco aparece con cuentagotas.

Dicho esto: el largo es IMPONENTE Y FUNCIONA. Aparte del tema digital (con un presupuesto que hace que el último film de JA Bayona (ambientado en unas montañas y los restos de un avión destrozado) parezca enorme, amigos. Aparte de eso, el Gojira de éste film es el más cabrón jamás visto - la monstruosidad atómica que fue en su primer largometraje. El horror postnuclear con patas. Algunas de sus apariciones, además, son memorables - y su primer uso al aire libre de su aliento destructivo es casi sobrecogedor.

Pero bueno -- como más de uno ha mencionado ya, el elemento humano FUNCIONA (algo que ni las versiones estadounidenses han logrado hasta poniendo a Bryan Cranston), lo cual es un mérito en sí mismo.

También es de reseñar (en lo que a mi respecta) cierto elemento casi hollywoodiense en su escritura, poco anglosajón y muy occidental (arcos dramáticos evidentes, chuladas varias, motivos recurrentes narrativos, plantings de elementos ingenioso, una progresión clara de la historia, temas expuestos con claridad que un no japonés entenderá sin problema alguno), que hacen el film altamnete accesible.

Y paa terminar, unas notas más observadas -- se homenajea a Spielberg en alguna escena y hay un punto zimmeriano en su banda sonora. Yamazki aprecia el blockbuster made in USA (lo cual no soprenderá a los que vieron en su momento The Returner).

En fin. Hollywood - id contratando a éste hombre pero ya, caray.

Si hay una cosa imperdonable en el film de Zack es lo poco que mueve sentimientos.

Y es que hay mucha space opera por ahi fallida, cutre, torpe, hortera o macarra (en los setenta y ochenta, a rebufo de la saga lucasiana - surgieron como champiñones, señora). Pero la mayoría de ellas tienen descaro, Guasa. Despiporre o un elemento juguetón. Pero la pieza de Snyder no lo tiene -- es seria, sombría, autoimportante (lo cual revela una falta de objetividad por parte del cineasta y sus dos coguionistas a la hora de atacar un material con grifos alados o mujeres araña vengativas) y oscura.

Por otro lado, hay pegas de otra índole - un estilo visual lleno de momentos pensados para el tráiler que se cargan el flujo de la acción, un diseño de producción heterogéneo que se contraduce (el villano que interpreta Skrein viste como un mando comunista, pero sus tropas parecen marines del siglo XXI) y una narrativa morosa.

Porque -- COÑO: Parece que al personal se le esté olvidando lo que es un largometraje clásico. Entiendo que apetece hacer franquicia, pero -- AY -- todo queda esclavizado a una narrativa más parecido a la de un episodio de una serie para plataformas -- verbigracia: ésta primera entrega. Esencialmente, es un piloto --

-- de DOS HORAS Y CUARTO DE DURACIÓN.

Aparte de eso está el dibujo inexistente de personajes (casi todos son una panda de estoicos de aúpa), diálogos que los explican todo (se nos olvida el famoso "show, don´t tell", gente.

Y seguidamente está la falta de originalidad general del material- aquí está Dune, Yamato, Star Wars, mucho anime, LOS SIETE MAGNÍFICOS DEL ESPACIO (a paladas), Krull y mi tía Enriqueta.

Resumiendo -- un film olvidable. Snyder y sus ideas propias. No hay manera.

No funcionó con sus chavalas bailarinas oníricas guerreras ni funciona aqui.

Y ha estallado del artefacto promocional -- la campaña por un largo en el que se apuesta como al Gran Esperazan Blanca del Año para ganar premios fílmicos de todo tipo -- preferiblemente en Hollywood.

Y el largo, una vez visto es -- solvente. Buenos actores. Ritmo acertado. Pero nada espectacular. Si quierten sobrecogerse o llorar, vayan a otra parte -- el tono de aquí es tal vez en exceso cuidadoso. Quién sabe. Al menos para un servidor.

La puesta en escena, por otro lado, no es brillante -- mucho primer plano cerrado o bien planos aéreos. Aseado. Eficiente. Bien hecho -- pero no espectacular.

Supongo que tal vez la realidad fuerza la narrativa y su enfoque. O tal vez Bayona no sea un genio por mucho que se hable bien de él. Anyway. Es un largo que se deja ver -- pero no una pieza mayor de ninguna clase.

No para mi.

Habemus Gozdilla yanqui, series VOD y extensiones varias de Kong Sull Island.

Y la serie es -- qué sé yo. Mucho misterio lindelofiano (traducción: vea usted episodios sin saber qué caray pasa y espere a que la cosa se aclare en algún momento). Todo puntuado con apariciones MUY esporádicas de los bichos en cuestión -- y claro -- el resto es un tema conspiranoico cuyas personajes jóvenes no están escritos con mucho gancho. Aquí al único que se le ve suelto es al legendario Kurt Russell, que está muy entrenado en estas lideas desde hace eones.

Porque, pese a que el material escrito que meneja no es bueno, el tío lo compensa con carisma desbordante.

El resto -- lo dicho: poca memorabilidad personajil, misterio y bichejo que aparece a ratos.

Esperemos que mejore, porque, la verdad --

La verdad es que el film de Scott es algo regular, pero no tanto como lo que se está diciendo en algunas partes. Vamos, que no es un abosluto deastre, caray.

Pero es un largo con problemas - el resumen de la vida de Napoleón a un Greatest Hits hace que el filme pase por encima de algunos elementos con un tejido narrativo conectivo tal vez insuficiente (nota aparte - parece ser que el montaje extendido que se verá en VO D de éste film estará cerca de las cinco horas, lo cual tiene sentido).

Por otro lado, la relación entre Napoleón y Josefina es tonalmente extraña (ora patética y cornuda, ora seria y grave). Y claro - al ser el supuesto núcleo emocional del film, la cosa se tambalea tremendamente y no sabe un que pensar.

Y luego están las batallas. Scott delivers, amigos. Me fascina que un cineasta de su edad se casque batallas de tal magnitud así como quien no quiere la cosa. La experiencia y el dominio de Ridley se notan obviamente. Esto es material de gran pantalla. Eso que se llama épico. Pero épico de verdad.

En fin. ¿Cuál es el resumen? Irregularidad general. Pero se ve con gusto en un cine.

La trama y los giros nunca han sido puntos fuertes de Rodríguez, un cineasta que gusta de cierto punto de serie B y un enfoque tan laxo como dejado en lo visual (a veces demasiado).ç

Y aquí -- tres partes de lo mismo. Y ojo que el cast está bien - Fichtner hace de villano sin despeinarse, Braga está sólida y a Affleck se le nota el dominio carismático post-Batman.

Pero claro - entre que la cosa sin créditos dura menos de noventa minutos (sí, haría falta más trama aquí, gente) y que el material tira a menudo de tropos sobados (amén de momentos Inception evidentes), no funciona. También hay conveniencias narrativas y giros locos apenas pensados, que se desmoronan en cuanto se analicen con un mínimo de profundidad. Aparte de la falta de finura habitual en el cineasta de Austin.

Peliculas de madres corajes... series de GEOS fachas... largos de ligoteo con tipa chalada que quieren ser casi Before Sunsrise... un seven carpetovetónico con un mataviejas veraniego... un largo sobre los papeles de Bárcenas...

De verdad. No puedo con Sorogoyen.

Y aquí -- sí --- vale: muy europeo (la parta gabacha), muy solow burn (ya nos ha quedado claro que te va el rollo setentero, Rodrigo) - y buenos actores. Pero la cosa va lenta como chorro de melaza (vi esto en un cine de auteur con público de avanzada edad y hasta a ellos se les alargaba la cosa).

Y luego está un salto temporal del film, que pasa a una suerte de capítulo diferente y se carga la tensión, llevando a un tercer acto ten petulalnte como desinflado.

¿Un buen film? Puede. En lo que a mí respecta, Sorogoyen está sobrevalorado por la gente más elevada del ramo como si el tío fuera la Gran Esperanza Patria del cine de qualité nacional.

Pos fale. Pos malegro.

Es decir -- hay varias cosas sobre el film que hablan en éste aspecto:

a) una sintaxis visual limitada (basada en primeros planos y estatismo absoluto) a la que se suma una absoluta falta de banda sonora.

a) su duración (69 minutos si quitas créditos)

c) Su enfoque -- esencialmente, lo que vemos es un redundante toma y daca de interrogatorio (con una progresión dramática de intensidad casi nula). Movimiento, imagen -- escasos y casi nulos.

Así que uno se pregunta - ¿por qué no hacer una obra de teatro indie con éste material? Porque, cinematográficamente hablando, aquí hay MUY POCO CINE.

Y si - el tema de la pieza se las trae. El cast está bien. La historia no se atasca.

Pero esto es teatro, damas y caballeros.

No es para mí.

Se ha armado la de Dios hace unos meses con el estreno de un film que trata un tema de todo menos polémico. Quiero decir - ¿salvar a niños de grupos de abuso sexual? Cualquier persona con un mínimo de fibra moral convendrá que la intención del film, denunciar dicho tema, es altamente defendible.

Y luego está el desarollo - correcto, con un ritmo aceptable, buenos exteriores, un tono que evita cualquier violencia o elemento horroroso sexual (lo cual hace el film digerible por audiencias convencionales) y claridad narrativa. Pero también hay cierta obviedad, un desarrollo algo previsible y una importante falta de ambición.

Vamos, que lo encomiable de su meta no está a la altura de su calidad fílmica.

Bueno, habemus más Poirot. Y en este caso --

Branagh se pone James Wan.

No conozco el libro que adaptan, pero que me aspen si estaba lleno de jumpscares de peli de Jason Blum. Y sí: entiendo que el director saber que esto va a multicines. Así que -- se convierte el clásico whudunit en una scary movie. Pues -- en lo que a mí respecta... no funciona. Queda tosco y pedestre, con relámpagos varios, ruidos súbitos y ángulos deformantes muy James Wan (de veras).

Y luego están ciertas pegas a la moda (el casting de Yeoh como inglesa blanca obvia), amén de una BSO cargante y una historia -- que seguramente no es de las mejores de Miss Christie.

En fin. Es corta y se deja ver, pero las dos entregas anteriores son mejores, caray.

La verdad es que resulta deprimente ver en lo que se ha convertido lo que otrora era una de las sagas CINEMATOGRÁFICAS más grandes de Hollywood...

Material televisivo. Para plataformas y caro. Pero televisivo.

Y es que, más allá del perro verde que es la adulta y trabajada ANDOR, aquí hay poca tela que cortar, gente -- cameros varios, mucho momento más propio de un fanfilm (mogollón de espadas láser y cosas molonas actioner, among other things) e intentos de ampliar el lore de manera no lucasiana que realmente aportan poco o incluso no encajan con la saga galáctica que creó el barbudo visionario nacido en Modesto (esas ballenas, madre...).

Y lo de aquí -- corregido y aumentado: se toma la serie Rebels (que yo y muchos otros no hemos visto) y se coge material de cartoon dominical para pasarlo a acción real intentando darle un barniz de estoicismo repleto de grávitas (spoiler: no lo logran -- sus sosas actrices no venden el material adecuadamente) repleto de cansino empoderamiento a la moda (eh, The Force is Female, supongo --) y revuelto con cansinos McGuffins de diverso pelaje y mandangas por el estilo.

Lo siento. Disnet se ha cargado Star Wars, gente. Que la dejen en paz de una vez.

Me explico -- en parte, casi por su enfoque, se parece a una action movie que podría tal vez hacer alguena como Van Damme: villanos nada especiales, una progresión algo previsible --

Sin embargo, hay también cierta sabiduría aquí. El film no se apresura y swe toma sus tiempos en las cosas. Tiene la tranquilidad paciente de su maduro protagonista. El trabajo visual de Fuqua es bastante clásico en gran parte del metraje (planos que duran más que el stacatto netflixiano que se ve hoy en día), uso sabio de bonitos escenarios naturales y tiempo dedicado a personajes.

Vamos, que lo que de base huele a Serie B, pasa a ser más tranquilo, reposado y maduro de lo que uno tal vez esperaría en un largo actual de Hollywood actual.

Y eso ya es aalgo, gente.

Mira que la serie empiez bien: héroes con sueños pagan precios sexuales por entrar en la Fábrica de Sueños. Los gente pudiente de la Ciudad de Ángeles, la perversión es rampante y hay que -literalmente- prostituirse para conseguir en la otrora llamada Hollywoodland lo que ansías.

Pero claro - al poco, la serie deviene en un cuentecito con mundos alternativos en el que personas no blancas, mujeres y tíos LGTBI luchan por lo su sitio, lográndolo hace setenta años.

Y a mí me pierden -- encaja todo mucho en el Hollywood actual de Barbie, el The Force is Female, al METOO y cosasas por el estilo. Dicho esto - lo que defiende la serie lo hace de manera menos tóxica que muchas ficciones actuales (aqui la gente no s mala por ser blanca, hetero, etc.) pero vaya -- Murphy coge lo que parece una historia de perversión old school y la vuelve un juguete woke a la moda. Qué pena.

Mira que la idea de base es buena o interesante.

Pero claro: el biopic del famoso creador de deportivos, con sus 95 minutos, se queda cojo y parece pasar por unas boyas preestablecidas por este tipo de filmes. Por otro lado, la realización es anodina y el drama parece un poco de sobremesa a ratos. Una pena. A ver que hace Michael Mann con la vida de Enzo Ferrari...

Al turrón -- noventa minutos escasos de una historia que posiblemente daría mejor para un mediometraje creada por otro auteur evidentemente pagado de sí mismo (el hecho de que el prota de su historia sea un cineasta da pistas creativamente onanistas de esto) que no se plantea si su film aporta realmente algo o puede interesar.

why? Thanks for asking -- hay más pistas, gente: desde el formato de pantalla cuadrado a la moda (qué hartazgo, copón -- pasando por un protagonista no empatizable (es caprichoso, dependiente y tóxico; una suerte de adulto que enfoca las cosas como un niño a menudo), pasando por un sexo bastante explícito que en absoluto resulta epatante (cosas así se llevan viendo en cinematografías del viejo continente desde hace EONES). Y luego, a título personal, decir que estoy HARTO de cine hecho por cineastas desconectados de la realidad de la calle que escriben personajes cuyas vidas orbitan alrededor de óperas, vinos caras y gente privilegiada que no ha de preocuparse por lo monetario EN ABSOLUTO).

Vamos - que ni peli rompedora, ni obra maestra ni nada. Es irregular, la verdad.

Empecemos por lo obvio: servidor no es fan en general del cine de terror. Más aún del moderno, a menudo lleno de pijadas y vicios narrativo-visuales de todo pelaje.

Y sí - aquí hay algunos. Tampoco la idea de base es una locura de originalidad. Pero --

Se nota que esto no es un film de Hollywood. Juega a un reposo y un tempo más pausados. Sus actores están realmente bien. Y el tono de la pieza a veces es más metafísico y menos aterrador de lo que uno esperaría. Menos... tópico, sin duda. ¿Hace esto que el film sea memorable?

No para mí. Pero, teniendo en cuenta que es una ópera prima con una idea central no rompedora, es muy de apreciar la manera en la que se ha enfocado todo esto. I