Yo soy de Sevilla, he visto muchos canis y también la amistad entre algunos de ellos (sin nunca sumergirme en los oscuros mundos en los que si se sumerge la película).
Debo decir que me encanta la recreación que se hace de los barrios marginales de Sevilla y de los canis. Cómo hablan, se expresan y se mueven. Su vida en familia y su forma de demostrar cariño. De verdad creo que está hecho de forma magistral.

No se, imagino que Jennifer López será muy odiada por muchos cinéfilos, y McConaughey ya prefiero ni imaginarlo, pero lo cierto y verdad es que está convencional comedia romántica no es tan mala.
Es una película que puede visionarse sin sufrir, lo cual no es poco. También es verdad que, al menos desde mi punta de vista, pocos estilos tienen la facilidad de llegar al 5 como la comedia romántica y que, esta solo tiene ese mismo 5, no es capaz de ascender ni un peldañito.
Aún así, se merece el 5 y, por tanto, no es tan mala.

Y es que teniendo de vecino al imponente Jackson, está la cosa delicada para vivir allí.
Una pareja va a parar a vivir a la urbanización donde vive un policia interpretado por Jackson. El chico es blanco y ella es negra, y parece ser ese uno de los motivos por los que Jackson se decide a hacer la vida imposible a la pareja. Cualquier forma y cualquier via es adecuada para ello, Jackson va odiando con mayor vehemencia a la pareja mientras el film avanza, haciendo cosas cada vez menos sensatas.
Tal como dicen en algunas críticas, el combate mental es interesante durante toda la película, pero a ésta le falta algo para terminar de absorber. Aún así, está aprobada con toda merecimiento. Un 5 alto.

Por cierto, pedazo de interpretación de Samuel L. Jackson, uno de los mejores actores de la historia del cine.

Muy a lo titanic se nos presenta esta película, que no es más que un relato de una magnífica historia de amor a principios - mediados del siglo XX.
Noa es un chaval humilde que vive en un pueblo en el que un determinado verano conoce a una hermosa chica, Allie. En el pueblo viven un maravilloso amor de verano, que ellos pretenden que sea para toda la vida; sin embargo, los padres de la adinerada Allie no ven con buenos ojos que la relación vaya más allá del amor de verano debido a las enormes diferencias sociales existentes entre ambos.
Tras el verano, Noa le escribe una carta cada día del año a Allie, pero debido a su madre no llega a leer ninguna. El sigue con su vida y ella continua estudiando y se convierte en una buena enfermera.
Allie, tras muchos años, conoce a un chico de buena familia, el cuál le pide matrimonio. Pero ella, algo estresada, viaja al pueblo a ver a Noa una última vez, y allí se reenamora de él.
Esta es la historia que, con mucho detalle, cuenta un mayor y enfermo Noa a Allie (quién padece alzheimer).

En plena edad del hielo, los tigres quieren vengarse de los humanos acabando con un nuevo hijo nacido en la tribu asentado cerca de ellos. Una noche van y lo intentan raptar, aunque no lo consiguen debido a que la madre consigue protegerlo; sin embargo, el crío se pierde y es encontrado por un mamut llamado Manfre y un perezoso llamado Sip, ambos son un equipo de lo más curioso (aunque el mamut niega la existencia de dicho equipo). Un tigre va a intentar robarles el crío y llevarlo con los demás tigres, pero viendo la imposibilidad de robarlo sin que el mamut le diera para el pelo, decide guiarles por un camino donde esperan más tigres, creyendo Manfre y Sip que eran guiados hacia los humanos para entregar el crío.
El tigre coge cariño a nuestro perezoso y nuestro mamut, y decide traicionar a los demás tigres, siendo el final feliz.

Rocky Balboa es el final de esta sensacional saga. Por fin un final a la altura (y no Rocky 5). Rocky Balboa es la vida de Rocky una vez muerta su adorada y adorable mujer Adrian. Rocky regenta un restaurante que lleva el nombre de su mujer, allí se pasa gran parte del día contándole viejas historias boxísticas a los clientes, que escuchan fascinados.
Rocky invita todos los días a comer a su ex rival Spider. Un buen día, tomando una cerveza, se encuentra con una chiquilla a la que aconsejó en su día, Mary, y se hacen buenos amigos. Mary es la que hace de Adrian (superentrecomillado) en la película, haciéndole ver a Rocky que "un boxeador, boxea", entendiendo así la filosofía de vida del gran Balboa.
El boxeo está devaluado y eso hace posible que, en un combate de exhibición, se midan el campeón mundial (Maxon Dixon) y la vieja leyenda Rocky Balboa.
Este hecho no le gusta al hijo de Rocky, quien no ha heredado la personalidad del púgil, y no hace las cosas tal como Rocky le enseñó. Incluso se atreve a insinuarle a su padre que es muy difícil vivir con su alargada sombra. Rocky le responde con un discurso enorme en el que le dice que no ponga de excusa a los demás para justificar el fracaso personal, que "si crees que lo vales, sal y consigue lo que mereces".
El hijo de Rocky reacciona y apoya a su padre en su andadura hacia el cuadrilátero.

Es, sin duda, la peor entrega de la saga. No me atrevo a suspenderla porque opino que sería desmerecer en exceso a una serie de películas buenísimas. Además, considerada individualmente, se acerca al 5 (aunque no llega), y es por ello que le doy esa nota.
Rocky está retirado y con problemas cerebrales, debido a las enormes pálizas que se ha llevado a lo largo de su carrera. Para colmo, vuelven a la ruina, debido a una mala gestión del contable de la familia Balboa.
Balboa pasa a la acción intentando ser el manager de Tommy ametralladora Gun, una joven promesa del boxeo mundial, pero Gun le deja de lado en los momentos importantes, aunque a pesar de ello Rocky no le guarda rencor.
Entre medias está la carga emocional de la cinta, la menor de todas con diferencia, en la que se ve a un Rocky tan animado de poder llevar a su pupilo a la cima, que se olvida de su familia.
Gun llega a ser campeón del mundo sin tan siquiera nombrar a Rocky. Es más, lo que quiere hacer es retarle, pero lo único que consigue es una pelea callejera contra él, perdiéndola por KO.

El megacampeón Rocky vive tranquilo junto a su familia, con el enorme orgullo de saber que es un increible campeón y que es reconocido por ello. No le hace falta más.
Sin embargo, a su inseparable amigo (ahora) Apollo, le entra el gusanillo de volver al cuadrilátero en una exhibición contra un joven ruso en plena guerra fría.
Resulta que el joven ruso es una inmensa fuerza sobrehumana que no solo derrota a Apollo, sino que lo mata en el combate.
Rocky trata de vengar a su amigo en un combate que se disputará en Rusia, contra alguien físicamente superior, más joven y en terreno hostil. Rocky quiere vengar la muerte de Apollo, pero no parece la mejor forma de hacerlo, puesto que tiene los visos de perder.
La carga emocional viene del lado de Duke (entrenador de Apollo que ahora lo hace con Rocky), con Poli "tu eres todo corazón, Rocky" y de Adrian, como siempre.
La carga política se da en el resto de la película, es un claro USA vs URSS, en cuanto a educación, tácticas de entrenamiento y, en general, maneras de hacer las cosas.

Si bien la carga emocional de la película disminuye en esta tercera entrega, el entretenimiento puro sube de manera exponencial. Es una película hecha para la taquilla, está claro, pero no olvidemos que el director es nuevamente Stallone (que, a mi juicio, es una persona con mucho criterio), por lo que sabrá encargarse de todo lo que rodea a Rocky.
Rocky éstá en la cima del boxeo, es el hijo predilecto de Filadelfia, ha defendido el título en 10 ocasiones derrotando a sus rivales con facilidad y le hacen estatuas en su propia ciudad. Es el aclamado Rocky Balboa.
Sin embargo, aparece Clubber Lang, un boxeador con una pegada brutal que amenaza el trono de Rocky. Rocky decide retirarse, pero Clubber hace que Rocky se enfade y quiere una última pelea contra el, y ahí está la carga emocional de la película.
Rocky se ha rodeado de pocas personas, pero son personas que le quieren y que cuidan por el, como Mick y Adrian. Mick es consciente de que Rocky no tiene el hambre que tenía como cuando se enfrentó a Apollo, y Adrían considera que le ha llegado el momento de la retirada (aunque luego Adrian tiene un papel importantísimo). Así pues, las cosas se presumían muy mal contra Clubber en el último combate de Rocky, y así fue, Clubber venció a Rocky y le quitó dos cosas de un plumazo, el título de campeón mundial y la vida de Mick, quién muere de un ataque al corazón provocado por un encontronazo con Clubber Lang.
Rocky se retira habiendo perdido y sin Mick, sin saber porque Mick había concertado enfrentamientos sencillos para Rocky y porque nadie le había dicho lo que sucedía. ¿Acaso el ya no era lo suficientemente bueno?
En estas entra en acción Apollo Creed, quien a cambio de "un favor" propone a Rocky ser entrenado por el para machacar a Clubber. Rocky accede, pero algo ha cambiado en el, algo que no le permite dar el máximo. Es su orgullo boxístico. En la charla en la playa que mantienen Adrian y Rocky, Adrian da una lección a Rocky y le ayuda a superar su miedo, el miedo al no saber que pasará. "¿y si pierdo?...pues pierdes!!" No importaba ganar o no, importaba no dejarse nada dentro, no vivir con la terrible carga de que hubiera pasado sin haberlo intentado.

El púgil de Filadelfia nos asombra nuevamente en esta segunda entrega de la saga, dónde consigue muchas cosas importantes en su vida y fracasa en otras muchas.
Rocky posee cierta fama tras haber plantado cara a Creed en su primer enfrentamiento, tiene dinero para comprarse una casa, un coche y ciertos lujos (aunque luego tendrá que prescidir de alguno de ellos por su situación económica).
Por tanto, hablamos de un Rocky que firma autógrafos que vuelve (forzado) a su realidad, al barrio de donde proviene. Su retirada del boxeo debido a la enorme páliza que le dio Apollo le hacen ganarse el apodo de Rocky gallina y el no puede vivir así. Intenta salir adelante haciendo ciertos trabajos y con Adrian trabajando nuevamente en la pajarería, pero Rocky quiere boxear, quiere la revancha con Apollo.
Entre medias, Rocky se casa con Adrian, pidiéndole matrimonio en el zoológico nevado (un clásico esa escena). A Adrian no le gusta la idea de que Rocky combata de nuevo, y no cede, y eso hace que Rocky, a pesar de haber tomado la decisión de combatir, no esté con sus sentidos puestos en ese desafío.
Tras unos meses, la pareja felizmente casada tiene un niño (no sin complicaciones), y es en ese momento cuando Adrian se da cuenta de lo importante que es para Rocky el boxeo, y le incita a pelear contra Apollo.
El entrenamiento de Rocky es memorable, incluyendo un cambio en su técnica de boxeo (para intentar lograr asestar duros golpes con la derecha, no solo con su mano zurda).

Rocky es un boxeador de 30 años, con talento desaprovechado, al que nadie presta demasiada atención. Es una buena persona (aunque se dedique a extorsionar personas para que paguen a su buen amigo Tony Gacho), intenta dar buenos consejos a la gente y está totalmente enamorado de la chica de la pajarería. Esa chica no es otra que Adrian, cuyo hermano y amigo de Rocky es Poli, quien opina que su hermana es una frígida y que nunca cambiará.
Por otro lado, está Apollo Creed, el campeón del mundo de los pesos pesados, que prepara un combate por todo lo alto para defender su título, pero que se queda sin rival. Surge la posibilidad para Rocky, debido exclusivamente a la fortuna de la vida, de pelear contra el campeón del mundo.
Por último, está Mick, el regente y gerente de un cutre gimnasio del barrio de Rocky. Mick creía en las posibilidades de Rocky hace unos años, pero ya no, le tiene en el olvido y procura entrenar a jóvenes talentos con proyección.
Creo que ésta presentación se queda muy corta, ya que la saga Rocky es de esas que cuida los detalles (si, si, los cuida, y de que forma). No podemos olvidarnos de Spider, de la pequeña Mary, del congelador de carne y de otras muchas cosas que acontecen en la película y que le dan un sabor a drama maravilloso.
En esta primera entrega de Rocky, se sientan las bases del comportamiento de sus protagonistas durante el resto de la saga, es increíble. Poli y su pesadez, Apollo y su admiración por el potro, Adrian y su eterno amor por Rocky, Rocky y su orgullo boxístico, Mick y Rocky.
La historia de amor de Adrian y Rocky es de las mejores de la historia del cine y, sobre todo, la historia de superación del potro italiano, es antológica.
Por cierto, por si fuera poco, la banda sonora es esa que a todos nos motiva (aunque sea para ir a correr al parque), con la que soñamos con ser los mejores.
Esta película (considerando globalmente las 6) es sencillamente una historia brutal y apasionante.

Está claro que no te lo vas a pasar mal viendo una película de este tipo, podrás sentir cierta atracción por algún super héroe o no, pero no va a ser un mal rato.
En esta película se cumple justo lo que he dicho anteriormente, pasé un rato decentito y no le cogí ningún tipo de apego a ninguno de los superhéroes que componen el cuarteto.

En este caso María (interpretada por Mandy Moore), es una bella adolescente un poco "rara", con aficiones extrañas para el joven José (interpretado por Shane West).
El joven José es un atractivo y popular chico en su instituto, pero una serie de actos peligrosos (estuvo a punto de matar a un "amigo" suyo) llevan su vida hacia otro camino.

Años después harían una estupenda película de humor llamada no es otra estúpida película americana, en la que se basan casi por completo en esta película.
Kirsten Dunst es la clave de la cinta, nos pone a todos muchísimo, y eso es así. Lo demás, son tonterías que te hacen pasar el rato, pero que no recordarás para siempre.
Sin embargo, solo por tener esa pizca de entretenimiento (eso sí, sin sustancia alguna) se merece el 5.

Sólo viendo como empieza la película, cualquiera diría que estamos ante uno de esos grandísimos espectáculos que el cine nos da de vez en cuando y, si bien es verdad que la película es relativamente entretenida, no lo es tanto como su predecesora y la trama es extremadamente superficial y manida.

Lo bueno es que en ningún momento se pretende nada más que el entretenimiento y en ello no fracasa. Tom Cruise está muy convincente en el papel de Ethan Hunt, como siempre, le sienta como anillo al dedo y su compañera está muy buena, eso también lo sabemos todos. Pena de esta última, con lo que promete en la primera parte del metraje, que se convierta en una comparsa.

Al no haber visto el buscavidas, debo valorar esta película de forma aislada. Haciéndolo de ese modo, debo decir que es una película bastante interesante, con momentos bastantes buenos y con unos actores que rallan a buen nivel.
La historia es simple, el viejo Eddie Felson ve a un joven Tom Cruise (Vincent Laurie) jugando al billar, se queda prendado de su talento y decide ser su mentor hasta llegar a hacerlo el mejor.
Le da consejos, entre los que destaca que hay que saber dejarse perder para poder ganar más dinero.

Me gusta más el título en inglés que en español la verdad. Una misión sucia comandado por un sucio comandante y secundada por 12 sucios soldados presidiarios.
Desde luego Lee Marvin es para mi modo de ver lo mejor de la película, sin él esta película no habría llegado al nivel de clásico ni yo le hubiera dado un 5.
Cuando sale en escena te crees lo que sucede en casi todo momento, en cambio, y por el contrario, no me sucede lo mismo con los demás.
No me creo a los dirty dozen vaya, ni me gusta como se desarrolla el asalto al castillo. Me parece todo demasiado fácil y mentiroso.
Entiendo que es una película que tiene más de 40 años, pero aún así la veo algo sobrevalorada.

No he leído el comic, no sabía la historia de la batalla de las termópilas y no me ha maravillado la película.
Sin embargo, me gusta mucho ese intento de originalidad (previamente visto en Sin City) y algunos momentos de la película son realmente emocionantes, como por ejemplo el del título de mi crítica.
El orgullo de ser un buen guerrero espartano es lo máximo para estos hombres que quisieron medirse en batalla contra un ejércido que les multiplicaba muchas veces, comandado por Jerjes. Jerjes le ofrece al rey Leónidas (Butler) un pacto para ser los amos del mundo (siempre priorizando claramente al rey Persia, y éste no quiere porque...THIS IS SPARTA!!!

No cabe duda que Superman es un clásico, y bajo mi punto de vista tampoco cabe duda de que no podemos escudarnos en que tiene 33 años (estoy escribiendo en 2011) para decir que fallan ciertas cosas.
El guión es de muy baja calidad. Las interpretaciones no están mal, pero no son buenas. Los efectos especiales muy regulares para mi gusto. La historia, en sí misma, si tiene mucho interés (como la mayoría de las de superheroes).
Lo que quiero decir es que por muy clásico que sea esta película, bajo mi humilde entender no debería pasar jamás a la historia del cine como una gran película.

Le he puesto un 4, no pienso aprobarla porque sencillamente no se lo merece por estas razones:
Jamás elegiría ver esta película si estoy aburrido.
Son películas de una cutrez aplastante.
El argumento es manido a más no poder.

Son razones más que suficientes para estar cabreado con la cinta, pero no, no es así. Hay cuatros y cuatros, y este cuatro es de los que sabe bien, porque al final terminas la película y solo te acuerdas de los mamporros a mano abierta del tito Spencer.
El secreto de estas películas era (y creo que sigue siéndolo) que nadie se espera nada de ellas, tan sólo mamporros y humor de la época (con sus bambinas y todo eso).

Por consiguiente, es un 4 que me deja una sonrisa en la boca.