Me hizo recordar mi historia personal, a través de todos esos encuentros furtivos de sexo clandestino, donde la propia sexualidad aporta una salida a través de momentos inquietos, rápidos... ocultos.

La trama mezcla dos instantes en la vida de un escritor maduro, que regresa a la ciudad donde vivió; trasladando al espectador una adolescencia diferente, cargada de incertidumbre. Han pasado 35 años desde que viviera una etapa intensa con un compañero de clase. Ahora tropieza accidentalmente con Lucas el hijo, un joven veinteañero por quien siente una extraña atracción...

La vida se compone de pequeños momentos inolvidables... de pérdidas aceptadas, de nostalgias por aquello que pudo ser, pero no pudo... ser.

Esta comedia de acción francesa, muy del estilo "Hollywood salchichero" utiliza un buen surtido de clichés, de manera divertida y original.

Nassim Lyes, compone un personaje, desenvuelto, desvergonzado... al que se les ven las costuras con facilidad; te encanta por su descarada insolencia. Manipula todo a su alrededor, y sus códigos se atienen a pocas reglas.

Zoé Marchal da réplica con una caracterización intencionadamente contradictoria, momentos desvalidos, al lado de otros donde se enfrenta con efectivos golpes a los "malos" con marcada solvencia.

Entretenida y sin pretensiones.

Me ha sucedido algo curioso. Su temática para mi intrascendente, me ha embrujado; desde esa sutileza de las imágenes amparadas por un fuerte trasfondo poético, se ofrece a través de un entramado profundamente dramático.

Leyendo algunas de las críticas profesionales, llegué a pensar que se desdibujaría en la segunda parte, no ha sido así. Muy bien interpretada.

Dudé si valorarla con un ocho, o darle ese siete que ampliamente supera. Opté por la nota más alta. Jaione Camborda, forja un guion y dirección potentes, con enorme trascendencia. Debemos permanecer atentos a sus proyectos futuros.

Nos encontramos ante una metáfora emocional que condiciona todo el metraje de la película. Sus directores, Sam H. Freeman y Ng Choon Ping, solapan al espectador, el conocimiento de las intenciones de Jules, la drag agredida, cuando inicia una relación sexual con Preston su agresor, con el que casualmente tropieza en una sauna gay.

Lo que se cuenta pudiese parecer transgresor, pero existe en ella una parte sentimental, tal vez no entendible... o sí. Debo reconocer que a mi la historia me ha llegado, y en esa violencia explícita no entendible, pudiera reconocerse un componente sadomasoquista, intemporal.

Ali es una chica que no ha sido educada correctamente por su madre... (Verónica Forqué) Nadie parece haberle puesto límites, y en el presente, gestiona de manera errónea su capacidad para asumir la frustración.

Desde el principio su descaro me pareció excesivo; rodeándose de una cierta prepotencia. Es una película ejemplarizante, que podría servir para mostrar a los padres, que evitar cuando eduquen a sus hijas.

Es entretenida, con diálogos inteligentes, bastante salvajes y chulescos en boca de Nadia de Santiago, que compone una Ali brillante, cargada de matices.

Pese a su sencillez; el manejo de sus elementos resulta eficaz, siempre avalado por la magnífica dirección de Paco R. Baños.

Durante aproximadamente hora y media que dura la película, nos convertimos en observadores y cómplices de Laura, acompañándola en cada una de sus actividades cotidianas... incluidos sus encuentros sexuales.

Con una estructura teatral, consigue trasladarnos de manera incisiva y penetrante por un trazado, donde la verdad y la mentira juegan un papel primordial, para que logremos penetrar en una realidad esquiva; magníficamente narrada por Michael Rowe, su director.

Algún dato más en spoiler.

La serie se aproxima a lo sucedido de una manera sobria, sin condescendencias; aportando un admirable respeto a lo acontecido. Cada uno de los personajes se muestra alejado de esquemas predecibles, apoyados siempre por una narrativa funcional.

Timothy Spall, brillante actor británico de reconocido talento, ejecuta aquí un sobresaliente trabajo. Sorprendentemente, me pareció superior Anne Reid, al ofrecer una interpretación cargada de complejidad, a la vez que sutiles matices.

La diferencia con otras series de crímenes reales, se encuentra en el tratamiento que hace del asesino, al que frecuentemente se engrandece debido a la fascinación que produce.

Hubiera podido cerrarse en hora y media, haciendo ajustes al eliminar secuencias poco trascendentes... Es una buena película, sorprendente, canalla; en algunos momentos cómica, en otros... un paseo infeliz. El arte de curar corazones rotos.

En los últimos minutos se regodea en si misma, dejando un saborcillo mustio, tampoco inocente... Ya todo está contado.

Existe una profunda correlación, cargada de fluidez y elegancia en su desarrollo. No teme tomarse su tiempo para que nos hagamos con los protagonistas y sus contradicciones.

Una trama urdida en función de las necesidades de los personajes, siempre al servicio de la historia; manteniendo una mirada cuidadosa y precisa en la composición de cada fragmento.

Amparada por una sutileza narrativa, que desmenuza los detalles, en comportamientos rigurosos y acciones calculadas.

Muestra la complejidad y las turbulencias de la vida interior y profesional, del diseñador y sombrerero Halston. La historia quizá resulte un tanto convencional y típica, pero esta bien modulada, a través de una caracterización de Ewan McGregor, brillante y ajustada a lo que el personaje precisa.

Pese a los clichés que la bordean, es una serie capaz de entretener. La hemos visto antes, pero aquí está contada de otra manera. Incluso en sus escenas más escabrosas, todo se resuelve de manera exquisita, con delicadeza y buen gusto.

El título de mi comentario, lo he sacado de una frase que el propio Halston utiliza en el contexto de una secuencia.

Roza el 7.

Diana la inesperada sirvienta filipina que aparece inexplicablemente en la vida de Cristina, tiene un objetivo, que se solapa, aunque el espectador cómplice, lo irá conociendo:

"Es como si la niebla se hubiera disipado... Estaré contigo siempre, aunque en ocasiones vayamos por el mal camino. Necesito que confíes en mi. Si los problemas están en su cabeza, los encontraré y los expulsaré fuera"

Existe en "NOCEBO" un entramado inquietante, tal vez terrorífico por la incertidumbre que provoca. Una película que me recomendaron y que me entretuvo hasta su resolución, de la que... evidentemente, no contaré nada.

Interesante.

Anclada en un montón de tópicos, la parte de seducción entre la periodista casada y su ex novio, ahora becario, está muy bien construida, aunque sin profundidad... tampoco se espera de un producto "fast food" de estas características.

La relación entre los esposos no es entendible, resulta totalmente impostada, artificial, sin la más mínima coherencia. El guion es como si hubiera sido escrito con ideas que luego se modifican, pero no lo hacen con lo que plantearon al principio. ¡¡Una locura!!

Y ahora si digo que me ha entretenido, tampoco se entenderá. Está lloviendo, no tengo mucho que hacer, y me apetecía ver buenos cuerpos, aunque sea algo recurrente en días como este.

En mi constante búsqueda por encontrar algo diferente que me inquiete, me he metido en esta producción danesa, perteneciente al género de desequilibrado insano... con o sin causa... da igual. Todas aportan lo mismo.

La película a medida que avanza, parece que no encontrara una salida o más bien un destino, después de conocerse las causas del comportamiento de Mike.

Abarrotada de secuencias que fueron creadas para rellenar... algunas rozan la absoluta degeneración descontrolada, en el comportamiento del paciente.

Considero que un 4 en mi valoración, ha sido generosa.

Con esta sublime película, Socorsese demuestra que no son demasiados los elementos a utilizar bien mezclados, para asombrar a público y crítica, en el año 2.023.

Sencilla, con una combinación de personajes y argumento, mil veces empleados por el cine... amparada por la maestría de un genio, que da cabida a la magia que todavía podemos hallar en el séptimo arte.

Lily Gladstone y Robert de Niro merecen el Oscar. Leonardo DiCaprio a la altura del elenco, consolidando una caracterización compleja en su incertidumbre. Ambientación, guion, diálogos, giros y trama. Todo al servicio de una historia real, a la que Martin Scorsese, da la vuelta para ofrecer, tal vez, la mejor película del año.

Tres horas que no se hacen largas, aunque si densas y abarrotadas en un entramado sólido y solvente. Tal vez el ocho como valoración le quede grande, según mi exigente perspectiva, eso si, supera ampliamente el 7.

Matt Bomer, y Jonathan Bailey, me parecen un acierto de casting. Conectas con esa forma canalla e inocente de relacionarse... Personajes con más aristas de las mostradas, pero que con la brillante exposición de la serie, las intuyes.

La era McCarthy es la justificación a lo que allí se cuenta y lo hace a través de escenas sobrecargadas por procesos judiciales, más necesitados de sublimar lo trascendente, que el conflicto se tradujese en el eje conductor.

Habría sido brillante, si se hubieran eliminado dos o tres capítulos de la historia, suprimiendo sub tramas innecesarias, lo que hubiese aportado un ritmo fluido.

Me ha entretenido, que ya es bastante.. pero apasionar... No.

Todos los actores contribuyen a hacer creíble la historia, con interpretaciones alejadas del piloto automático. Debo destacar el protagonismo de Fernando Tejero, al acometer ese papel de cine negro, desde una oscuridad necesaria, transmitida con solvencia.
Es un actor que se proyecta desde las entrañas, y eso llega. Considero que profesionalmente está desaprovechado; encajaría magistralmente, como lo hace aquí, en interpretaciones de una lateralidad que siempre consigue resolver con maestría.

También destacar el buen hacer de Óscar Casas, que está consiguiendo hacerse un hueco como joven actor muy resolutivo, quizá orientado por su hermano Mario.

El último tramo logra que conectemos por fin, tras inicios titubeantes. Creo que es una película para ver dos veces por el entramado y las lecturas paralelas.

Laura Galán aporta solvencia al papel de una macarrilla, tal vez psicópata, que según deducimos por lo que ella misma cuenta, ha sido vejada y humillada a lo largo de los años.

Con una brillante idea inicial, la película se desdibuja a medida que avanza. Considero que hubiera sido perfecta para un corto. Faltan ideas, desarrollo, concreción y objetivos. Se pierde en escenas vacías, que no aportan nada más que alargar los tiempos para lograr una duración convencional cercana a la hora y media.

De las películas más desaprovechadas que he visto en los últimos meses.

Todas las porquerías que venden en ciertas galerías de arte, son flores medio hippies, cuadrados psicodélicos, o bien circulitos de colores, borrajetones emborronados...

Algunas obras se compran no solo por el acto de poseerlas, si no por como te hacen sentir... Todo eso asusta, y también excita.

"La complejidad de la identidad urbana" "Cuando haces arte desde un lugar sincero, la gente descubre cosas sobre tí" Palabras que Uma Thurman emplea como marchante de arte, para convencer.

Por supuesto no es nada extraordinario, pero James Hawes, su director construye un relato en imágenes de Enid Blayton, retorcido y complejo; con la textura emocional de un personaje sumido en evidentes contradiciones, tal vez por la vida que vivió en su infancia, y por supuesto... las circunstancias posteriores.

El biopic no desfallece en ningún momento... no es generoso con su protagonista, tal vez la imagen que nos vende, aunque cercana a la realidad, sitúa el foco en un arco de mirada única.

Trata sobre la vida profesional de la actriz británica secundaria, Noele Gordon, que consiguió gran éxito interpretando una telenovela desde los años sesenta hasta principios de los ochenta.

Aporta cierta sensibilidad, mostrando en el primer episodio la fuerza de Nolly, como era conocida entre quienes disfrutaban de Crossroads.

Las plataformas streaming fabrican productos de consumo, con producciones esmeradas en su mayoría, pero carentes de alma. Considero que los buenos guiones son los que consiguen salvar gran parte de proyectos; aunque la necesidad de rodar ajustándose a plazos, provoca que muchas series y películas no consigan aprobar, al ser valoradas por los usuarios en esta página. No es el caso.