25 Críticas de los usuarios

Encomiable obra de Luc Besson, donde con su genial fotografía (excelentes planos llenan esta cinta) y esos sublimes acompañamientos musicales a los que nos tiene acostumbrados, nos introduce en una historia que, en un principio pueda no parecer demasiado original, pero otorga unos distintos y, a la vez, magníficos matices al género en que es tratada.
En sus compases iniciales, es posible que peque de ser un pelín lenta y quizá resulte algo monótona, pero a partir de ahí, Besson empieza a mostrarnos realmente su potencial como cineasta, ofreciéndonos a unos personajes que, ante todo, poseen una humanización extraña de ver en este tipo de proyectos, y haciéndonos disfrutar con una trama que va a más a medida que avanza el film y que aguanta el embiste típico de estos productos con muy buenas secuencias, a pesar de no ser una película propiamente de acción, pero en la que se trata en todo momento de modo excepcional el material con el que se trabaja, logrando así un ensayo de lo más interesante y apreciable.
Ah, y atención a la aparición de Jean Reno ejerciendo de profesional, que más tarde volvería a seguir las ordenes del director en la maestra 'Leon'.

Aunque no tan lograda como "León", "Nikita" sigue siendo otra interesante propuesta de este cineasta galo.

¿Qué es lo que más me fascina del film?

La cantidad de imitadores, copias y homenajes que se han visto años más tarde.

-Un remake norteamericano.

-Una teleserie de bastante éxito basada en la película en cuestión.

-Otra teleserie ("Alias") que roba con cierto descaro algunos elementos del film (esa organización secreta situada en un sótano, el concepto de agente femenino que se disfraza...)

-E incluso un homenaje de James Cameron (no me digan que la imagen de la protagonista con un traje de noche negro, el pelo corto y balas por doquier no se asemeja mosqueantemente a las pintas de Jamie Lee Curtis en "True Lies").

Pero claro: el cine europeo no lo ve nadie, ¿verdad?

Anda que no tienen jeta en Estados Unidos...

"Nikita" es un thriller de acción muy bueno, incluso diría que se trata de una película de culto en toda regla. Me parece una cinta sorprendente y una excelente obra maestra del cine de acción de principios de los años 90. El filme cuenta la historia de Nikita (Anne Parillaud), una drogadicta que vive en las calles y que tras un sangriento atraco a una farmacia, el gobierno le ofrece una segunda oportunidad a cambio de sellar un pacto implacable con ellos: tendrá una nueva identidad y la posibilidad de una vida relativamente en libertad si se hace una asesina a sueldo para el Estado. Este es el insólito y sugerente guión que Luc Besson nos desarrolla de forma exquisita durante el metraje. Una película muy alejada de los cánones clásicos del cine de acción de aquella época, pero que a pesar de ello nos deja escenas para el recuerdo de muchísima calidad, como el espectacular tiroteo en el restaurante o cuando Nikita debe deshacerse de uno de los cadáveres. "Nikita" es una historia de redención, del descenso a los infiernos de una mujer perdida y sin rumbo en la vida, que deberá redimirse de su violento pasado trabajando para una agencia del servicio secreto francés encargada de las tareas más sucias y oscuras. Nikita luchará por vivir una nueva vida integrada en la sociedad, a pesar de llevar una doble existencia, una vida paralela llena de brutalidad, asesinatos, desengaños, mentiras y traiciones. La atmósfera creada para la ocasión por Luc Besson es única, aparte de los personajes principales, hay secundarios que son impagables como Víctor (el "limpiador"), al que interpreta Jean Reno de forma espectacular. Todo en esta cinta es sensacional, la bella y dura Anne Parillaud, la excelente fotografía de Thierry Arbogast, la magnífica música de Eric Serra, y unas escenas de acción contundentes pero que son realistas y están al servicio de la historia que se nos cuenta. Para terminar quiero recomendar esta película a todo el mundo, "Nikita" es un clásico, un genuino filme que no te puedes perder.

Veo con admiración que se cataloga esta película como “Película de culto”, demuestra eso que el cine de Luc Besson palomitero tiene culto a pesar de todo. En el 90 resultó ser una película de estética avanzada que toca la fibra presentando una muchacha aparentemente frágil que cae en las garras de los servicios secretos de la Republiqué.
Cómo espectador llegarás a sentir compasión por la pobre yonqui, una okupa descerebrada raterilla grafitera chutada de tocarse el chichi todo el santo día y que encuentra su lugar en la sociedad a base de hostias que le dan hasta que entra por el aro. Tomen nota. Los servicios secretos franchutes, los del país tan admirado de libertad, igualdad y demás santos rollos y cuentos varios son los más secretos que hay. Es conocida su larga trayectoria e historia represiva y asesina y luego aparecer orgullosa delante de todo el mundo como La France, con la cara lavada de sangre.
El cine es lo que tiene, que manipula los sentimientos incluso a expertos haciéndote creer lo que puede llegar a sufrir una muchacha que se dedica a asesinar a gente, vilmente manipulada porque a la pobre no la dejan vivir tranquila con su novio. Pues que se joda y se pudra, un jefe más hijo puta le ponía yo. Buena película dramática de aires muy realistas. Te cautivará.

Me propuse hace unos meses verme todas las películas del tour de acción de filmaffinity: total, si me lo trago todo por malo que pueda parecer, ¿qué más me daba?

He quedado francamente decepcionado, con el tour en general y con "Nikita" en particular:

1º) Los que esperen una película de espías o agentes secretos se van a comer un mojón. (¡ay, qué daño han hecho las películas de Bourne en el género de espías!).
Nikita es una niñata de 19 años yonki que por cargarse a un policía en un atraco, la detienen y deciden conmutarle la condena, si se ofrece a trabajar para el gobierno francés.
Nikita parece más bien una asesina a sueldo del gobierno francés que una espía; y, además, de las malas: chillona, llorona y torpona. La película no sigue en ningún momento la estética de película de espías, pues no hay un trama, no hay un "malo", no hay contraespionaje, no hay investigaciones...

2º) Los que esperen una película de acción, se comerán otro mojonazo. Acción no tiene. Yo entiendo como película de acción "Jungla de Cristal", "Arma Letal", "El Últimatum de Bourne" (o cualquiera de la trilogía)...Incluso una película de Indiana Jones (considerado género de aventuras) tiene mil veces más acción.
En Nikita, les faltó argumento, les faltó historia: gran parte de la película es ella y su novio. Punto. La primera parte de película, aproximadamente media hora, es su entrenamiento como espía, el cual me parece igualmente patético, sin chicha y sin gracia.

3º) Los que esperen una espía que, por el hecho de ser mujer (o por malas influencias de comentarios que he recibido), va a ser sexy, se comerán otro mojón. Porque Nikita ni es sexy, ni seductora y ni siquiera me parece guapa. Recalco el detalle de que tiene 19 años (23 durante el transcurso del film). No los aparenta, ni de coña. Yo le ponía 30 y larguitos.

4º) Los que cuando empiecen a ver la película vean en los títulos de crédito a Jean Reno y digan, "¡Bien!", se comerán un mojón. Reno, el pobre hombre, sale solo en los últimos quince o veinte minutos...Y, por triste que parezca, es el mejor papel de toda la película: es el ÚNICO que refleja lo que tiene que ser un agente secreto y es el ÚNICO momento en el que la película parece que es de espías.

5º) ¡Algo tengo que salvar para no ponerle un 1!: Jean Reno, su banda sonora y que tal vez haya sido la primera vez que la haya visto y le diera una oportunidad. Seguramente, si la volviera a ver, se llevara un 2.

Sigo considerando a Nikita la mejor película de su director, Luc Besson, responsable de las conocidas (y sobrevaloradísimas) "León" (película que rescata solapadamente uno de los personajes de esta cinta) o "El quinto elemento".
Nikita inspiró además de una serie bastante decente de acción un "remake" americano llamado "la asesina" tan mediocre como innecesario, ya que "Nikita" es una película que sigue aguantando perfectamente el tipo a lo largo de los años, gracias a su buen ritmo y a tener un guión interesante donde se respetan y cuidan los personajes, algo nada frecuente por desgracia en este género.

NIKITA EN ROSA

"Era una tarde maravillosa. Nikita y yo descendimos por la suave pendiente y nos detuvimos en el borde de un gran arrecife. La helada reserva de Nikita se fundió rápidamente con el sol. A mi me resultaba imposible reconocer a la fría mujer de la noche anterior en la joven que en aquel momento caminaba a mi lado, riendo alegremente ante la ignorancia que ella demostraba en todo cuanto se refería a los nombres de las numerosas flores silvestres que nos rodeaban.
La muchacha encontró una rosa y la recogió con un gesto triunfal.
-No haría usted eso si supiera que esas flores gritan cuando se les arranca -dijo ella.
Ella me miro.
-¿Acaso los de su departamento no matan por oficio? Y no solamente flores. Matan gente. -le dije con seriedad.
-Las flores no pueden responder disparando -razono “Niki”.
Ella miro la rosa que yo tome en mi mano.
-¿Y que vamos a hacer con esta rosa? Tengo la impresión de que va a sangrar entre tus manos. -le dije.
-me la quedo... -replicó Niki-. Según usted, mis manos ya gotean sangre. Un poco más no tendrá ninguna importancia.
Se la entregué a la joven y nuestras y nuestras manos se tocaron.
-Puede usted meterla en el cañón de su revolver -me dijo apresuradamente para disimular su reacción ante el contacto físico.
Ella se echo a reír.
Introdujo el tallo de la flor en un ojal de mi camisa.
Nikita sentía calor, y estaba cansada de la dura caminata entre guijarros. Pensó en lo agradable que sería bañarse... retroceder durante unos instantes a aquellos días de la infancia, junto al mar, antes de que su vida hubiera quedado atrapada por una profesión como la suya, fría y extraña, con sus tensiones y temores. Mire el rostro joven y cruel de la mujer que estaba a mi lado. ¿Habría momentos en los que ella también ansiara disfrutar de las cosas simples y prácticas que ofrece la vida? Por supuesto que no. (Pensé yo).
Nikita miro por encima de mi hombro.
Me volví. A unos 90 metros de distancia se veía la figura de un hombre joven.
Yo miro a la joven. Los ojos de Nikita se clavaron en los míos fijamente.
-Voy a matar ese hombre -dijo Nikita con calma- Y a continuación, como si no fueran precisas más explicaciones añadió-: se llama Víctor, asesino profesional... ex jefe y amante.
Nikita estaba mirando nerviosa, esperando liberarse del extraño que había intentado poner el pie en el umbral de su corazón.
Yo sonreí con calor y dije.
-Me siento terriblemente celoso. Tenía otros planes para ti, hoy en la noche.
La muchacha me miro agradecida por haber roto el silencio.
-¿Cuales eran esos planes? -preguntó.
-Pensaba llevarte a una granja, en Francia -le explique-. Y después de una maravillosa cena pensaba comprobar si es verdad que una rosa grita.... cuando se le arranca.
La joven se echo a reír.
Yo le extendí una mano.
-Adiós -dijo ella.
La toque por última vez.
Las potentes armas ladraron y patearon, se disparaban mutuamente.
Mientras sus cuerpos caían... la rosa pareció gritar".

El realizador francés Luc Besson iba a demostrar que para realizar un film de acción no era necesario ir a Hollywood. Con un planteamiento tan simple como inverosímil: una joven (interpretada Anne Parillaud) implicada en una banda de peligrosos drogadictos, es obligada a formar parte de un equipo especial, aparentemente del servicio secreto francés, y es entrenada como una máquina perfectamente engrasada para matar.

Al film le cuesta arrancar, con unos veinte minutos un tanto tesiosos y lentos. Pero una vez que empieza, el film no para de sorprendernos con escenas de acción en los más diversos lugares, como un restaurante o las cocinas del mismo. Por otro lado, el director para darnos algún descanso, nos muestra el esfuerzo por parte de la protagonista de intentar hacer una vida "normal", buscando prácticamente el primer joven con se cruza, al mismo tiempo que el mismo instructor no esconde su atracción por ella.

Pero en el fondo los detalles privados apenas importan, el director prácticamente los utiliza como breves interludios para ligar las escenas de acción. Con una estética totalmente moderna y unas excelentes escenas de acción que van en crescendo hasta la traca final (con la aparición casi estelar de Jean Reno en el memorable papel de Victor, el limpiador) , Besson rompío moldes con un film que tuvo su versión norteamericana, y su propia série.

En los últimos días estoy viendo bastantes películas de Besson, pero es porque me está dando por ahí, he de decir que cada vez me convence más y es porque tiene mucha personalidad, cada película es su sello.

Nikita es una película muy neutral dentro de su filmografía, es decir, no tiene ese toque de ciencia ficción y tampoco nada de "cutre", es una historia muy bien contada y narrada, engancha desde el principio y te mantiene en tensión hasta el final.

Una historia muy personal, una mujer muy peculiar y un guión que muestra el lado oscuro de nuestros gobiernos, la película no pretende mostrar mucho fondo humano, uno puede leerlo si le apetece, pero sobre todo, se cuenta una historia muy entretenida, si hay algo que he de decir de Besson, que es el director del entretenimiento, pero con clase.

Luc Besson mezcla perfectamente las dosis de acción y thriller necesarios para mantener al espectador enganchado, presentando a una joven Anne Parillaud como protagonista, que combinaba inocencia con locura, además de lo bella que era, con un rostro característico de la mujer francesa, con aquel cabello negro, ojos celestes y piel blanca.

El comienzo de la película es tremendo, es uno de los mejores que he visto en mi puta vida, mostrándonos a los miembros de la pandilla de Nikita antes del asesinato a los policías, caminando de espalda, muy rudos y con vestimenta punk, destilando elegancia, rebeldía y anarquía. Logrando una fotografía de lujo.

Es cierto que la acción se fue a otro nivel cuando apareció Jean Reno con su inolvidable personaje del limpiador, ahora con nombre Víctor en vez de León. Aunque su aparición fue corta, fue el compañero perfecto para la bella asesina, porque sin su ayuda ella hubiera fallado en la misión. Sin dudas, fue una excelente idea del director.

Lo más destacable de la película es que nunca tratan de hacer ridículo el argumento y nos sorprende con un final crudo pero necesario. En verdad no había sentido seguir con aquella vida de mierda, si de todas maneras ibas a seguir siendo un esclavo del gobierno, no tenía escapatoria, no tenía futuro, no había lugar para finales felices.

Una joven llamada Nikita es la única sobreviviente de una pandilla que fue asesinada en un asalto a una farmacia. Ella es sentenciada a cadena perpetua por la muerte de tres policías. El gobierno le da una segunda oportunidad, elegir unirse a ellos como agente secreto y para eso iba a entrenarse con ellos en todo sentido y si no hacía eso, la muerte era la otra alternativa.

Gran película de la década de los 90, donde que la protagonista de una película de acción fuese una mujer la conviertía en una rara avis. La trama - convertir a una convicta en una asesina al servicio del gobierno - no estaba vista. Hay momentos de acción, la peli es entretenida y el guión es sólido. La atmósfera, bien creada. Lamentablemente, ahora ya no se ven tan original como en su estreno.

Los americanos hicieron su propio remake de este film francés, "La asesina", copiando plano a plano las escenas de acción. Así que algo de bueno tendrá.

Decepcionado de la versión Americana-Canadiense de Nikita, decidí ir a la fuente, a la versión original y encontré con sorpresa de que esta pertenece al famoso director Luc Besson.

Para comenzar, la versión francesa es mucho mejor que la serie americana, con un inicio flojo la película va mejorando de a pocos, tal como su atormentado personaje.

Nikita pasa de ser una adolescente antisocial a una mujer fatal, capaz de sentir amor, capas de quebrarse y que rechaza su nuevo destino impuesto. Tal vez Nikita hubiese preferido morir en prisión, que sentirse atormentada y asfixiada por su nuevo rol , uno que ni ella misma comprende, sólo se limita a seguir ordenes sin saber todo lo que viene tras de ello.

Lo Peor: La primera media hora, que son los inicios de Nikita en la organización

Lo Mejor: Las otra hora y media de película

Nota: 6.6

PD: Hay una escena en la película, que Besson vuelve a utilizar en Angel-A (2004).

Nikita es una joven drogadicta que junto a sus compañeros asalta una farmacia. El dueño tiene tiempo de llamar a la policía y cuando ésta llega se produce un violento tiroteo en el que mueren varios policías y todos los asaltantes excepto Nikita que completamente colgada asesina a sangre fría a un agente. El juez la declara culpable y se la condena a morir sin embargo los servicios secretos franceses le dan otra oportunidad y le ofrecen la posibilidad de librarse de la condena si acepta trabajar para ellos.

Nikita fue una exitosa película de acción francesa que no sólo triunfó en su país de origen sino que también tuvo cierta repercusión en Estados Unidos, de hecho, Hollywood realizó un remake y una serie de televisión inspirándose en ella. Anne Parillaud es una joven alocada que acaba convirtiéndose en una fría asesina al servicio del estado. Tcheky Karyo es su mentor y decide adiestrarla porque ve en ella aptitudes para convertirla en una espía con licencia para matar. Una vez completado su entrenamiento y demostrar su valía, Nikita lleva una vida normal y conoce a un dependiente de un supermercado con el que entabla una relación. Sin embargo ella debe estar disponible todo el tiempo para cumplir cualquier misión. Su nombre en clave es Josephine y sus jefes no dejan de utilizarla para realizar cualquier cometido. Incluso le organizan una luna de miel a Venecia aprovechando que tiene que liquidar a un objetivo allí. Sin embargo, un buen día durante una misión en una embajada las cosas no saldrán como esperan.

El personaje de Nikita no me gustó, la considero demasiado estrambótica y no se que se puede ver de particular en una yonki para convertirla en una agente. Por lo demás me encantaron las actuaciones de Tcheky Karyo y sobre todo la de Jean Reno, que interpreta a un despiadado asesino llamado Viktor y que recuerda mucho al papel que después interpretaría en El profesional también de Luc Besson. Destacaría además la potente banda sonora de Eric Serra y las vistosas escenas de acción.

Peliculón el que nos regala en el año 90 el francés Luc Bresson acompañado de la que sería por un tiempo su pareja en la vida real, una maravillosa Anne Parillaud a la que recordaré siempre por este maravilloso papel. La Parillaud se hace dueña del personaje de asesina a sueldo y se come la pantalla cada vez que sale. Entretenidísima película de acción con un estupendo, como en él es habitual, Tcheky Karyo, el hombre de la mirada de hielo, que tiene gran química en pantalla con la Parillaud. En un papel mucho más secundario, un Jean Reno que saca brillo a su pequeño papel como pocos saben. La elegante Jeanne Moreau, quién sería la narradora de una de mis películas favoritas como es "El amante", tiene un pequeño papel como asesora estética de la asesina Nikita. Para mí ha sido todo un disfrute, tengo curiosidad por ver qué hicieron los americanos con Bridget Fonda como Nikita unos años más tardes en la película "La asesina". Pienso comprobarlo pronto.

"Hey, Nikita, hace frío
en tu pequeño rincón del mundo?
Puedes vagar por toda la tierra
y no encontrar nunca un alma más cálida a la que conocer.

Oh, te vi al lado del muro
con diez de tus soldados de hojalata puestos en fila,
con ojos que parecían hielo sobre fuego.
Un corazón cautivo en la nieve.

Oh, Nikita, nunca sabrás nada sobre mi hogar.
Nunca sabré lo bien que se siente al abrazarte,
¡Nikita, te necesito tanto!
¿Oh, Nikita, eres el vívido rostro de un tiempo eterno?
Contando diez soldados de hojalata en fila.
Oh, no, Nikita, nunca sabrás...

¿Alguna vez sueñas conmigo?
¿Alguna vez viste las cartas que escribí?
Cuando miras hacia arriba, a través del alambre de espino,
Nikita, ¿cuentas las estrellas en la noche?

"Y si llega un día
en el que puertas y pistolas ya no te retengan más,
y eres libre de elegir.
Mira hacia el oeste, y encuentra a un amigo.

Oh, Nikita, nunca sabrás nada sobre mi hogar.
Nunca sabré lo bien que se siente al abrazarte,
¡Nikita, te necesito tanto!
¿Oh, Nikita, eres el vívido rostro de un tiempo eterno?
Contando diez soldados de hojalata en fila.
Oh, no, Nikita, nunca sabrás..."

Letra: Elton John

Si en 1990 no había nadie que no conocía a Luc Besson ni a Anne Parillaud desde luego que los conocerían por esta película. Una obra que parece, en principio, que no tiene mucho más allá de ser una cinta de acción para pasar el rato; mas nada de eso.

Parillaud interpreta a Nikita, un joven delincuente a la que se le presupone problemas de drogadicción al principio del filme. El personaje interpretado por la actriz francesa tocará su momento más bajo en un robo frustrado y su captura supondrá su renacer: un nuevo yo haciendo el bien en lugar de ser un desecho de la sociedad y juntarse con personas de nulo futuro, salvo quizás uno en prisión.

Durante el principio que viene a funcionar como prólogo, vemos las dotes de pelea de Nikita gracias a todo el tiempo que ha estado viviendo en la calle y que le perfeccionarán en la organización; además, gracias a su nueva vida conocemos otras facetas de ella y se verá que no siempre es una mujer bruta de modales y mal genio gracias a su historia amorosa. Una historia de amor preciosa que funciona tan bien como sus partes con la acción de protagonista.

Buena parte del mérito de que el filme sea mucho más que entretenida reside en la propia Parillaud, una actriz que puede dar vida con total verosimilitud a una Nikita dura y letal y a otra más dulce y cariñosa; del resto del reparto destacar especialmente el papel breve e intenso de Jean Reno, antiguo compinche de Luc Besson del que ha pasado demasiado tiempo desde 'Léon, el profesional', su último trabajo juntos; la dirección del propio Besson y la partitura electrónica de Eric Serra ponen el resto para que la experiencia no sea solo un entretenimiento, sino un producto por encima de la media. Cine de acción de gran calidad.

Fiel exponente de NUVELLE IMAGES (Movimiento manierista francés que abarca las décadas 80 y 90 y representado por: Jean Jaques Beineir, Luc Besson y Leos Carax).

"Nikita: dura de matar" es una película de acción, historia de una hermosa asesina, que dio comienzo a la carrera del retorcido y grandilocuente Besson.

La película expresa una pasión por el cine real, dando mayor importancia a la forma y al estilo que a la intriga, reivindicando la imagen por si misma.

Magnifica actuación de Anne Parillaud. Soberbio Jean Reno y aunque breve, la actuación de Jeanne Moreau, siempre deleita a los que la admiramos.

Muy recomendable.

Es como la antesala de El Profesional pero contada de una manera más pausada. Todo es un proceso lento pero creativo a la hora de crear a una asesina como Nikita. Es un tipo de cine muy inteligente y entretenido donde cada escena te imprima una buena dosis letal de furia y curiosidad a partes iguales. Lástima que peque de demasiada lentitud a veces pero es muy buena película y la simpleza de Anne Parillaud es lo mejor si entrar en tantos estereotipos.

Buena película de acción, por fin (para la época) protagonizada por una mujer.
Es bonito ver de dónde salieron todas las posteriores versiones de TV y cine.

Parecerá vulnerable, con ese cuerpo escuálido que se podría quebrar cual ramita. Es quien esté frente a ella y no sepa tratarla bien el que puede resultar quebrado.
Una "femme" dura de matar, de acero azul como sus brillantes ojos, que puede ser lo último que veas antes de palmarla...

Los ojos, el cuerpo, el rostro, la voz, la manera, Anne Parillaud ya lo tenía todo para transformarse en uno de esos personajes que marcan una época en la Historia del cine, quieran o no; llegó a él con treinta años y una carrera que iba a caer en desgracia después de algunas comedias y buenas colaboraciones con su pareja, el gran Alain Delon. Hasta la mitad de los '80. Entonces se la encuentra el peculiar, irregular y aplaudido a partes iguales Luc Paul Besson, que venía de enfrentar la masacrada por la mitad de los críticos y amada por la mitad del público "El Gran Azul", extraño paréntesis entre los dos títulos que definirían su estilo único.
El presente (aun diciendo que le inspiró una canción de Elton John) nace directamente de su amante Parillaud, mujer callada, reticente a mostrarse, tan misteriosa que cualquiera podría sospechar que ocultaba oscuros secretos (¿una doble vida quizás?). Y empleó esto para crear a Nikita. A partir de aquí hubo de ser moldeada a su imagen y semejanza, cual figura de barro; la de París pasó por un durísimo, extenuante y no poco cruel entrenamiento, tanto físico como emocional, para entender a su álter-ego y el increíble proceso de evolución que iba a sufrir en la historia, provocando un rodaje en orden cronológico y así evitar romper esa simbiosis mágica.

Y es que de sus anteriores papeles al que nos ofrece aquí hay un mundo. Con una potente secuencia de apertura que evoca el más excesivo "look" de los '80, y regresando inevitablemente a su propia "Subway", Besson no se demora en volver a poner de manifiesto sus alardes tras la cámara estableciendo el tono del film desde el primer minuto; en un robo nocturno a una farmacia por un grupo de yonquis pirados, éste nos asalta los sentidos con sus formas estilizadas, colores intensos, trepidantes y elaborados movimientos de cámara, energía física y pura violencia. Todo al servicio del impacto visual.
Tampoco cuenta aquí los ejercicios de lógica. "Nikita" se guía por el camino de la inverosimilitud más ruidosa y brutal, del mismo modo que su protagonista, por ahora sólo una colocada "punky" más de los peores barrios parisinos. Las imágenes y el ritmo se contagian de su fuerza, la fotografía de Thierry Arbogast de su oscura rugosidad, sin embargo, condenada de por vida por sus crímenes, y siguiendo en la primera parte de la trama, el guión se decanta por ponerla en una situación harto conocida: la del indulto a cambio de ciertos servicios especiales prestados al organismo de turno (en este caso una agencia secreta). El concepto de "Doce del Patíbulo", no hace falta ir más lejos...

Lo que procede es una fase de transformación vital, hallando su espejo cinematográfico en la realidad de la actriz; de hecho Tchéky Karyo no es sino una imagen poco disimulada del propio Besson, quien la prepara y moldea duramente para llegar a ser una asesina implacable, pero elegante a la vez. De lujo la participación de Jeanne Moreau (nada mejor que la que una vez fue Margaretha Geertruida Zelle) para instruirla en la búsqueda de su feminidad perdida...y usarla de arma en este universo masculino de duros agentes y gángsters. "Usted pasó por lo mismo", acierta a decir, pero Amande no contesta.
Y esto es un acierto. Mientras otros hubiesen escudriñado en busca de un trauma, Besson rechaza el pasado de la chica y se conforma con saber que venía de la calle sin ni siquiera recordar cómo se sonreía; también, pese al ritmo ágil, el paso de los años se conoce en boca de los personajes, haciéndolos indispensables en el avance de la historia, y no por la simple acción. La segunda parte marca una importante distancia con la primera. Tiempo después, Nikita es una bella, sofisticada y más que entrenada agente, pero, al volver a salir a la sociedad, su único deseo es una vida normal, sin violencia y, a ser posible, romántica.

Poco a poco el caos inicial, si bien la inverosimilitud se mantiene por el absurdo de la premisa, ha ido diluyéndose. Pues lo que le sucede no es creíble, pero ella sí, y eso lo consigue la actriz casi sin esfuerzo. El director entonces nos acerca al sufrimiento de esta chica aislada de sí misma y los demás para evitar que su poco habitual trabajo se interponga. La única conexión con la realidad es un galán atípico (Marco), dándose un drama de doble vida y secretos que puede poner en peligro su estabilidad. En un submundo de marionetas de cuyos hilos tiran altos cargos de rostros invisibles, la "femme" Nikita llora por vivir en un mundo normal.
Y no obstante, al privarnos de la justificación que podría dar un pasado, no tenemos por qué sentir compasión por ella (al fin y al cabo ya asesinaba antes de verse implicada en esta intriga); por eso su jefe (gran instante con una actuación magistral de Karyo) le inventa el mejor pasado con el que ella jamás podría haber soñado. Y cuando el argumento parecía estancarse en una fase de repetición, entra Jean Reno cual huracán y lo eleva a los cielos, regalándonos, en su impagable rol de Victor, momentos que serían difíciles de asimilar y digerir salvo por la gracia de una puesta en escena tan excesiva como surrealista.

Así que el parisino fundamenta las acciones de la historia gracias a las decisiones de los personajes pero, quizás en mayor medida, en el estilo que imprime, que reúne en un explosivo cóctel visual y sonoro lo mejor del "polar" clásico (viniéndole de herencia directa), de la estética del videoclip ochentero y de los "thrillers" hongkoneses (más que apreciable la influencia de la estrenada al año anterior "The Killer").
Todo magnificado por la estimulante, a ratos conmovedora música de Éric Serra...