arrow

19 Críticas de los usuarios

Críticas de los usuarios:
7
"Este no es el Archie de tus padres"
Esta serie se ha vendido desde el primer minuto con la frase del título.
Una nueva versión, con los infaltables adjetivos "adulta" y "oscura" por bandera, que pretende desempolvar la serie de cómics de hace varias décadas.
La cosa es que aquellos cómics eran la esencia de la juventud estadounidense, repleta de batidos en diners de neón, inocentes aventuras en las que Archie y amigos lograban ser astronautas, detectives o vaqueros, y un sentido del humor blanco como la nieve, cuando no definitivamente infantil.
Bastante complicado darle la vuelta a un tópico tan gigantesco, sin cargarse lo que lo hace especial por el camino.

Y pese a todo, 'Riverdale' me ha convertido en el abogado del diablo.
"Archie se ha puesto buenorro" es una de las primeras frases del primer capítulo, y la probable primera espantada de los que recuerdan a aquel inocente pelirrojo que nunca ha sido el rompecorazones de nadie.
Pero, como cuenta la voz en off, hay bastante más bajo la superficie.
Archie sigue siendo el de siempre, solo que el último verano (ese último verano especial que todos hemos tenido) ha cambiado sus prioridades, haciéndole saber que no tiene que quedarse para siempre en Riverdale donde todas las chicas suspiran por sus abdominales desinteresadamente trabajados, sino que puede aspirar a algo más. Por primera vez, Archie tiene un secreto, sexual y prohibido, que trae la mayoría de edad a una caricatura que a lo mejor no la necesitaba, pero desde luego la hace mucho más interesante.

Betty Cooper también siente ese cambio en Archie, y le hace pensar que quizá sea el momento de lanzarse: cuando la amistad con tu mejor amigo se vuelve incómoda, sabes que quieres algo más que compartir tardes de batidos o inocentes invitaciones al inevitable baile de instituto.
Pero como un romance sería muy aburrido sin una chispa de duda, ahí llega Verónica Lodge, para poner el punto y aparte, o ser la peligrosa manzana prohibida de la clásica duda adolescente: ¿lo bueno conocido, o lo malo por conocer? (salvando las distancias, porque no creo que a Archie le amargue pasar tiempo con ninguna de ellas)
Hasta ahí bien, fidelidad a los cómics salvaguardada.

Pero sucede que, pese a "ponerse buenorro", las cosas no han cambiado para Archie: su interés no acaba de ser ni para la rubia ni para la morena, sino que se centra en conciliar sus crecientes dudas adolescentes con la resaca de un último verano donde se toman decisiones que te durarán para toda la vida.
Como dice Verónica: "ya basta de la clásica lucha entre artista torturado y jugador de fútbol. ¿No lo podemos ser todo en la era post-James Franco?"
Justamente, parece que por tenerlo todo los adolescentes no consigan centrarse en nada, y esa es una reflexión que, si bien no estaba en los cómics originales, a nadie le suena extraña aplicada a ellos en pleno S. XXI.

Pero es que encima, 'Riverdale' tiene el buen gusto de seguir las tradiciones, haciendo que la pareja de Betty y Verónica sea la más atractiva de todas (casi podrían olvidarse de Archie) al bajar la bordería de la morena y la perfección de la rubia, continuando un dilema entre las dos que ya tiene 75 años de antigüedad, y que aquí se vuelve fresco como el primer día.
Y para los que echan de menos los vampiros, las momias y los hombres lobo, aquí hay un misterio a resolver que ha dejado un cadáver con delicioso regusto a 'Twin Peaks'.
Quizá todavía podemos descubrir que sobrevivir a la adolescencia no es lo peor que puede pasar en Riverdale.

¿No trataba 'Archie y sus amigos' de retratar una juventud idealizada con un punto fantástico?
Precisamente.
Quizá de lo que no nos hemos dado cuenta es de que, en su más de medio siglo de cómics, la juventud ha cambiado, y este renovado mundo de Archie no hace un mal trabajo al reflejarla.
[Leer más +]
31 de 36 usuarios han encontrado esta crítica útil
4
Nada nuevo
Nos enfrentamos a una serie de jóvenes, Algo ha ocurrido en una pequeña ciudad (un pueblo para los Estados Unidos), y va a trastocar la vida de todos los que viven ahí.

¿Qué ofrece esta serie? Nada. Nada de nada. Nada nuevo bajo el sol (es un lema latino), pues aquí no hay nada nuevo en la televisión. El argumento no es original. Nada en esta serie es original. Y lo peor de todo, es que lo que diferencia a esta serie de las demás, el universo Archie, no aparece. No hay nada de esos tebeos o esa serie de dibujos animados.

Las actuaciones son normalitas. Nadie sobresale por encima de otros, ni por debajo. Están en su sitio para una serie juvenil.

¿Tienes algo que hacer? Pues hazlo en vez de ver la serie. No merece la pena.
[Leer más +]
16 de 24 usuarios han encontrado esta crítica útil
6
Por qué DEBERÍAS ver RIVERDALE
Navegando por internet iba escuchando cositas de esta serie basada en las historietas de Archie. Desconozco los cómics y solo tenía una noción de lo que era a través de referencias en otras series y películas pero, para que os hagáis una idea, narra las aventuras de instituto y conflictos amorosos entre distintos personajes bastante estereotipados.

Lo curioso es que utiliza las historietas originales para crear un producto nuevo, combinando esos personajes y con una historia noir que esconde secretos inconfesables, un asesino, femme fatales, etc.

Básicamente Riverdale convierte, a través del tono, una serie basada en el salseo en una novela negra pero con personajes incluso más cliché. Y funciona, aunque en ningún momento renuncie a frases cursis sobre la amistad y el amor.

Puede que esto último sea lo que hace que no me termine de convencer ya que pienso que la película Brick (2005) creó un mismo ambiente mucho más realista y afín a mis gustos. Sin embargo, Riverdale sigue siendo una serie recomendable debido a que sus virtudes pesan, al menos de momento, más que sus defectos.

La estética impoluta, algunos personajes que de repente adoptan actitudes inesperadas y todas las interpretaciones secundarias hacen que valga la pena ver el piloto de la serie. Aunque en mi caso no encaja con lo que más me gustaría ver, su valor creativo es apreciable y puede que se convierta en un must para muchos de vosotros si sois amantes de los enredos amorosos, las animadoras, los amigos gays y un pelirrojo buenorro.

https://cinefalos.com/2017/02/20/por-que-deberias-ver-riverdale/
[Leer más +]
8 de 10 usuarios han encontrado esta crítica útil
6
Decepcionantemente decente
Bueno, estando ya sobre el final de la segunda temporada me veo capaz de analizar de aquella manera esta serie, aunque si tengo que ser sincero, viendo como se ha desarrollado, bien la podría haber hecho al finalizar la primera temporada o los primeros capítulos de la misma.

La serie empezó en su primera temporada como un producto más de la cadena norteamericana The CW, es decir, una serie para adolescentes, con una ristra de carácteristicas que llevan prácticamente el 100% de sus series, a saber: actores superatractivos todos, amoríos gratuitos a más no poder, al mismo tiempo baile de parejas en dichos amoríos, tramas de instituto norteamericano, etc. Pero si, hay que ser honestos, la serie tiene su misterio, sus secretos y tal que la hacen amena (aunque no aguante un revisionado ni de coña).

Dicho esto la serie, analizándola, me decepciona. Si, es una serie que todo lo que hace lo hace bien, los actores, la trama, las situaciones y demás es todo cliché pero bien, la factura es buena, la ambientación es buena, la musica bien, etc, pero qué es lo que pasa cuando, aunque lo que veas sea perfecto, tengas la sensación de que no deja de ser más de lo mismo. Y no es porque yo pida que a estas alturas de la película espere que las cadenas y las productoras reinventen sus series, pero por dios, un mínimo de originalidad, algo que sirva para identificar "Riverdale", porque de momento lo único que se puede decir de la serie es que la serie tiene los personajes y demás del comic de Archie (cosa que fuera de Estados Unidos, en concreto en España, conocen 4 gatos y de oidas), que es lo mismo que decir que la serie vive de las rentas del famoso comic.

Yo me esperaba algo más original, como lo fue por ejemplo la serie animada "Los misterios de Archie" en la década de los 90, o una especie de "Pretty little liars" en sus primeras temporadas, es decir, algo que sin ser del todo nuevo no esté tan explotado.

En cualquier caso aunque no la recomiende del todo es una serie que se deja ver y, de todos modos, como ya está renovada por una tercera, siempre podrá mejorar.
[Leer más +]
6 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
3
Para que darle tantas vueltas a este culebrón adolescente.
Vale. La primera temporada tiene su cosa. Hay una trama con su exposición, nudo y desenlace. Un misterio que investigar, unos personajes que presentar, etc. 13 episodios. Correcto.

Pero nada nuevo. Una serie más de instituto americano de pueblo con muchos niños guapos, animadoras y jugadores de fútbol.

Que se base en los cómics de Archie me es indiferente. Me importa si me llena lo que veo.

Tras esa primera temporada, te meten 22 episodios de segunda temporada. Y lo que sigue igual.

Ya he pasado más de la mitad y me encuentro con tremendo aburrimiento y chicle estirado que no va a ninguna parte.

Situaciones predecibles, estereotipos, tramas mal hilvanadas o exageradamente increíbles, acciones absurdas de determinados personajes y múltiples truquitos y Deus ex Machina para tirar palante con una supuesta intriga cuando lo único que destaca es el vestuario y las toneladas de maquillaje que usan los y las colegiales en un interminable pase de modelos que fingen actuar.

Sale Luke Perry. Ok.

No entiendo las calificaciones ni mucho menos las críticas profesionales. Es que de la primera temporada vale, pero lo siguiente me está dando miedo.

La representación de los que viven en el sur de la ciudad es simple, ridícula, clasista y torpe.

Creo que debería haberse cerrado en la primera temporada. Pero los billetes mandan.
[Leer más +]
7 de 9 usuarios han encontrado esta crítica útil
6
Opinión de un ex-adicto
No he cogido un cómic de "Archie" en mi vida pero tengo que decir que cuando se estrenó la serie (allá por enero de 2017) me convertí rápidamente en un adicto a ella. La adicción me duró exactamente hasta el capítulo 11 de la temporada 3 (empezado pero no acabado).

En mi opinión, el fallo principal de la serie es su duración tanto de capítulos como de exposición al público. La temporada 1 fue estupenda (13 episodios entre enero y mayo de 2017) pero las demás temporadas (2-3-4) se me hacen eternas: 22 capítulos (¡¡¡ 22 !!!) por temporada empezando en octubre y acabando en mayo del siguiente año. Sí, lo reconozco: me he acostumbrado al "formato Netflix" (una temporada completa emitida el mismo día pudiendo hacer maratones) pero es que en Riverdale hay parones entre capítulos que llegan a durar un mes.

A pesar de esto, seguí enganchado a la serie hasta el capítulo mencionado al inicio. ¿Por que me quedé ahí? La trama de la T3 me resultó demasiado rebuscada... surrealista... abstracta... fantasiosa... Contando además con bastante relleno con poco o nada de sentido, lo cual se evidencia también en la T2. Y es que repito: 22 capítulos cada temporada...

Con el famoso coronavirus y la cuarentena, le he decidido dar una segunda oportunidad pero no he podido. Pensé que sería fácil retomar el capítulo donde me quedé y seguir pero no me acordaba de bastantes detalles. Así que quise revisar por encima todos los capítulos de la serie pero me quedé en el último de la T2 incapaz de "meterle mano" a la T3... Algún día (probablemente cuando ya haya acabado) me decidiré a verla por completo pero por el momento nada.

A quien me lea, le destaco la T1: me parece bastante buena con un misterio/crimen inicial y su resolución por parte de los protagonistas adolescentes. Mi nota de la T1: un 8 pero la de la serie en global la bajo al 6 porque tengo que ser objetivo con la T2 y lo visto de la T3...
[Leer más +]
4 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
7
La cara más oscura de la adolescencia
El tenebrismo está de moda (exitosas producciones como las de It y American Horror Story son prueba de ello); los 80 están de moda, qué duda cabe a estas alturas, y las historias sobre asesinatos misteriosos también vuelven a ser populares, si es que alguna vez han dejado de serlo. Warner Bros Televisión aprovecha estas tendencias y las fusiona con acierto para proyectar un mundo en el que los típicos enredos de instituto, el puritanismo estadounidense y la estereotipada imagen del sueño americano reciben una radical vuelta de tuerca.

RIVERDALE es una ciudad que despunta por su tranquilidad y su civismo. La imagen inmaculada de la típica vida americana que allí transcurre entre inocentes bailes de instituto, eventos deportivos con los uniformes de los jugadores y las animadoras a juego, idas y venidas a Pop’s para tomar hamburguesas y batidos, y eventos conmemorativos en los que ciudadanos modelo se agrupan para celebrar esa calma, capitaneados por una sonriente y siempre bienintencionada alcaldesa. Pero un día aparece en el río el cuerpo flotante de Jason Blossom, el exitoso estudiante cuya familia controla la economía local gracias al negocio del sirope de arce, y la atractiva máscara que recubre a Riverdale empieza a quebrarse, sacando a la luz una realidad mucho más desagradable.

Así comienza esta historia que nos irá narrando la voz en off de Jughead Jones, una suerte de Truman Capote adolescente, decidido a llegar al fondo del asunto hasta las últimas consecuencias. Al propósito de Jones se unirán la perfeccionista y repipi Betty, la explosiva Ronnie y el deportista modelo Archie, que últimamente se encuentra en una encrucijada personal por no saber cómo afrontar su prometedor futuro.

Aparentemente, esta es una historia que ya nos han contado de muchas formas. Pero el mérito de la serie consiste precisamente en mostrarnos lo que ya conocemos (y sabemos que funciona) de un modo que nos parezca sorprendente y cotidiano al mismo tiempo; sobrenatural, pero común; ajeno y cercano; como lo es el mal que, por mucho que siempre intentemos dirigirlo a una sola dirección, en el mayor número de casos todos solemos participar de él, ya sea directa o indirectamente. Más aun en este tiempo de relativismo en el que vivimos, que los guionistas han sabido captar a la perfección sin menospreciar ese regusto retro del que bebe Riverdale, con paisajes al más puro estilo Twin Peaks y unos personajes basados en los célebres cómics de las aventuras de Archie.

Hablando de personajes, resulta refrescante ver caras nuevas en la ficción americana. Lili Reinhart (Betty Cooper), K. J Apa (Archie Andrews) y Camila Mendes (Verónica Lodge) debutan cumpliendo sobradamente con la complejidad de interpretación exigida por sus papeles. Mención especial para el regreso a la ficción de Cole Sprouse, el que será siempre uno de los gemelos rubios de la serie de Disney Channel Hotel dulce hotel, que da al controvertido Jughead Jones una buena dosis de carisma, dejando entreabiertas las puertas de una carrera que se avecina exitosa.

Y sí, esta es una serie fundamentalmente de personajes, del tipo del que el espectador termina odiando al que fuera su predilecto desde el primer capítulo, o todo lo contrario. Porque, ya sea por necesidad o pura naturaleza, estos terminan revelando su lado oscuro o desprendiéndose de la coraza para dejar aflorar una gran sensibilidad. En la ciudad de Riverdale nunca se sabe. La corrupción y la mentira siempre están acechando entre sus calles y cuando salen a la luz en forma de desgracia podemos estar seguros de que nadie está exento de culpa, pero tampoco nadie es totalmente culpable. Se agradece esa difuminación de la frontera entre el bien y el mal, sin moralinas que nos aleccionen sobre el saber estar y las buenas intenciones.

El creador de la serie, Roberto Aguirre Sacasa, parece haber cogido esa teoría propia del sueño americano como base para mostrarnos una visión propia de su manifestación, en la práctica. Y la práctica se compone de familias disfuncionales, adultos que no son capaces de controlar su propia vida pero que exigen ese control por duplicado a sus hijos, y adolescentes que han crecido con el imaginario del éxito, de la vida perfecta que para ellos han fabricado sus progenitores, pero que realmente no saben como alcanzar, ni si están realmente dispuestos a hacerlo. ¿A qué nos puede sonar esto? sí, a la generación millenial y sus conflictos identitarios.

(CONTINÚO EN SPOILER)
[Leer más +]
5 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
4
"Archie" oscuro
Empecé a ver Riverdale al comienzo de los confinamientos por el COVID, porque tenía buenas críticas en Amazon.
La trama es muy del estilo de series tipo "Twin Peaks". En un pueblo ha habido un supuesto asesinato y hay varias familías diferentes con oscuros pasados que tratan de esconder, mientras una pandilla de jóvenes y atractivos universitarios van descubriendo sus secretos.
Me quedé enganchado hasta el capítulo 6 o 7 , y a partir de ahí la dejé de ver.
Los personajes y las tramas son muy típicos y están llenos de clichés y de estereotipos. En general ofrece pocas sorpresas, al menos hasta donde yo vi.
No digo que la serie sea mala, simplemente que no es de mi estilo.
[Leer más +]
3 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
7
Extrañamente adictiva
Aunque no era seguidor de los comics de Archie me puse a ver la serie tras la muerte de Luke Perry.
Y aunque no tenia muchas esperanzas la verdad que me tiene bastante intrigado, ya que aparte de los tópicos de instituto ( los deportistas, el raro, la buena, la chunga etc) tiene de fondo asesinatos y diferentes pistas que mas bien van descubriendo los protagonistas en vez la policía.
El reparto creo que es bastante acertado y aunque es interesante a ver por quien tira Archie , la amistad entre Betty y Verónica es lo que mas me parece importante. Es curioso como casi todo el mundo es atractivo...en eso por ejemplo la inglesa Skins hay como mas variedad y son gente mas peculiar pero resumiendo Riverdale cuanto menos es entretenida y los capítulos no suelen pasar de los cuarenta minutos lo cual no se hacen pesados.
[Leer más +]
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
1
Adolescentes y padres en la edad del pavo a los 40 en una Marbella estadounidense
No nos engañemos: en cada capítulo, ¿una puñetera fiesta de baile en el instituto? ¿eventos a tutiplén? ¿un tío cachas legal y su amiga del alma que está enamoradísima de la muerte-te-lo-juro-por-Lauren-Postigo? ¿el tío outsider, o pasadete, del que todos pasan, por otra parte, y que es escritor? ¿una tipa rica que te cagas, forrada hasta las encías, subida al billetaje, guapa y tal, pero que es más mala y caprichosa que Cruella De Vil?... O sea, ¿todo este tinglado oxidado de dónde se lo han sacado? ¿Dónde está el guionista? Que comparezca y declare... y que se le exija responsabilidad civil en todo este asunto: que no vuelva a escribir ni su nombre y que se le obligue a pasear con un disfraz de gomaespuma de dedo gordo del pie por Sunset Boulevard mañana, tarde y noche durante un tiempo equivalente a lo que ha durado esta bazofia de serie, o sea, 5 años, y tal...

Buenas noches, Maricarmen!
[Leer más +]
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
8
Muy buenos personajes e intrigante historia
Un gran acierto! Le tenía muchas ganas a esta serie por mis recuerdos de la infancia de Archie. Recuerdos simplemente de algún personaje de los dibujos que veía allá por los 80 y que es todo un clásico de los cómics americanos de décadas pasadas. La serie sin centrarse mucho en los clásicos cómics consigue crear unos personajes y una historia que me han hecho tragarme capítulo tras capítulo con ganas de más. Recalco mucho el tema de los personajes porque me parecen muy buenos! Es una historia de adolescentes de instituto sin más, pero muy intrigante.
Muy muy recomendable!
[Leer más +]
7 de 13 usuarios han encontrado esta crítica útil
6
Un producto norteamericano destinado al publico norteamericano
Seré breve, Gustarme, me gusta, es interesante y tiene una estetica "New 50's" bastante linda. Ahora no termino de engancharme con la historia, ni con los personajes que aparecen y desaparecen según conveniencias del guion
[Leer más +]
3 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
8
Crítica de Riverdale por Cinemagavia
*Luke Perry, ídolo juvenil noventero

A Perry lo hemos podido ver recientemente interviniendo de manera breve en Érase una vez… en Hollywood (Once Upon a Time… in Hollywood), la alabada película de Quentin Tarantino. Ha sido su último papel. El actor ya había fallecido cuando la cinta se estrenó.

Pero él siempre será, para toda una generación, esa especie de James Dean catódico, rico, y un poco torturado (a recordar esa mítica escena en la que se derrumba estrepitosamente tras ver cómo explota el coche en el que se halla su padre), llamado Dylan McKay.

Su papel en la popular serie Sensación de vivir (Beverly Hills, 90210) le granjeó una popularidad que muy pocos serán capaces de conocer. Y eso que en principio solo iba a aparecer de manera puntual, pero Aaron Spelling, que tenía buen ojo para descubrir talentos carismáticos, decidió que tenía que quedarse, aunque fuese él mismo quien tuviera que pagar su nómina (como así fue durante varias temporadas, sic).

Su participación en la misma fue, llegados a cierto punto, intermitente (la abandonó para volver durante su último tramo), dejando para el recuerdo uno de los triángulos amorosos más memorables vistos jamás en la pequeña pantalla, el que protagonizaba su personaje y los de Shannen Doherty y Jennie Garth.

*Regreso televisivo

Pero Perry también trabajó en superproducciones como El quinto elemento (The Fifth Element), le podemos ver en los primeros minutos de la misma, e incluso trató de cambiar su imagen dejándose caer en varios capítulos del durísimo drama carcelario Oz, de HBO, o en películas independientes como Normal Life, de John McNaughton.

Nota: era de dominio público que se sentía especialmente orgulloso de haber dado vida a Lane Frost, campeón mundial de rodeo, en 8 segundos (8 Seconds).

En 2017 volvió a la televisión para dar vida al padre del protagonista de esa intriga juvenil del canal The CW llamada Riverdale. Serie que podemos disfrutar por estos lares gracias a Movistar. Ficción televisiva que le iba a impedir unirse totalmente (aunque se dice que quería participar aunque fuese de manera ocasional) a esa curiosa continuación de la serie que le hizo mundialmente famoso; titulada BH90210 y cuyo rodaje se anunció poco antes de que el actor muriese.

*Riverdale, un Twin Peaks light para ‘millenials’

Como decía, Perry ha estado ocupado, de un tiempo a esta parte, trabajando en Riverdale. Una serie que tiene como protagonistas a un nutrido grupo de jóvenes que han de enfrentarse a toda suerte de misterios; misterios que incluyen a distintos asesinos (y/o justicieros de dudosísima moralidad) decididos a complicar la existencia de estos y de sus seres queridos; una serie que, como buen culebrón juvenil, mezcla toda suerte de romances; una serie que llegó para cubrir el hueco dejado por la finiquitada Pequeñas mentirosas (Pretty Little Liars) como gran ‘guilty pleasure teen’.

La muerte del actor tuvo lugar en mitad de la tercera temporada, pero el creador de la misma, Roberto Aguirre-Sacasa (‘showrunner’ de la nueva serie de la bruja Sabrina), creyó conveniente esperar y realizarle un homenaje en condiciones y sin las interrupciones de unas historias a medio desarrollar.

Así, y tras cerrar varios de los distintos misterios que centraban las tramas de dicha tercera entrega, se inicia una nueva etapa, ya sí, con el necesario adiós a Perry y a su personaje.

*Doherty llora a Perry

Ya antes del estreno se dieron a conocer varios detalles (pocos, eso sí) acerca de dicho capítulo, como, por ejemplo, que en el mismo iba a participar la amiga, y excompañera, del intérprete: Shannen Doherty.

Poco se dijo del papel que iba a jugar la actriz, pero Aguirre-Sacasa aprovechó la ocasión para confesar que Perry había querido, desde el minuto uno, que la serie (Riverdale, claro) contara con la participación de Doherty, pero que nunca se había dado el momento (y/o el papel) adecuado.

*Doloroso punto y seguido

Así, la serie deja un poco de lado (no al 100%, pero casi) sus múltiples intrigas para explicar la futura ausencia de Fred (Perry) en el que es, de lejos, el capítulo mejor resuelto de Riverdale.

Porque sí, estamos ante una serie a la que no hay que pedirle veracidad o diálogos de premio, Riverdale es lo que es, un puro divertimento sin pies ni cabeza pero terriblemente adictivo (eso sí, servidor cree que mejora con temporadas más cortas, como la primera; la segunda y tercera se me atragantaron un poquito, la verdad), pero a la que hay que aplaudir cuando acierta con capítulos como el que nos ocupa.

El tempo no puede ser más acertado, los actores (especialmente Doherty, cuyo ‘cameo’, durante el acto central, emana emotividad y verdad) logran ponernos la piel de gallina y el capítulo, en definitiva, se convierte en el más acertado de los homenajes, despidiéndose del actor con sentido afecto y convirtiendo a su personaje en merecido héroe (y hasta aquí puedo leer).

*Conclusión

Riverdale se despide de uno de sus actores con sensibilidad y tino, paralizando la acción para centrarse en lo que realmente importa: honrar su memoria y su labor, durante casi tres temporadas, en esta serie.

Lo mejor: La escena de Doherty. Imposible que no te vengan a la mente alguna de las muchísimas escenas que la actriz compartió con Perry en Sensación de vivir.

Lo peor: Sinceramente, no me apetece ponerle demasiadas pegas a un capítulo que, está claro, ha sido realizado desde el mayor de los respetos (curiosidad: Doherty reconoció haber pedido permiso a familiares cercanos de Perry antes de decir que sí a su participación aquí).

Escrito por Javier Mazo
[Leer más +]
3 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
7
Un Twin Peaks teen
Esta curiosa mezcla de los cómics de Archie con la estética vintage es una especie de American Graffitti cruzado con Twin Peaks, con un ambiente a la vez oldie y oscuro, estética de thriller y aventuras de instituto. Lo que la devalúa un poco es esa constante búsqueda de cliffhangers de un episodio a otro y algunas tramas que parecen metidas con calzador. Aún así, resulta original y tiene personalidad.
[Leer más +]
1 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
7
De lo mejor en su subgénero.
Voy a confesar algo: en el último tiempo me he puesto masoquista, y me he clavado tres series de dramas de escuelas secundarias, la primera, 13 razones porque en su olvidable tercera temporada, la segunda Elite, una plana y deslucida obra española, y finalmente, como si no hubiera sido poco, terminé por ver la serie que aquí estoy criticando, y, francamente, me ha parecido mucho mejor que las bazofias que he comentado con anterioridad. Riverdale es un cabal ejemplo de que no se necesita el exceso para poder hacer una serie potable, de buena calidad y con personajes interesantes. Es una serie de combustión lenta y con algunos capítulos realmente olvidables (el de los musicales, o el de los actores haciendo de sus mismos padres en su pasado), pero todos los capítulos tienen un sentido revelador e intrigante que suma a una sólida trama.

Lo que aquí más me llamó la atención es que la serie está basada en los personajes de los cómics de Archie, muy populares en norteamérica desde la década del 40, y con un relativo éxito en hispanoamérica en la década del 60. Sinceramente jamás en mi vida he leído un cómic de Archie y simplemente he visto resúmenes en internet, pero según lo que he podido leer, ha sido una serie de cómics bastante infantil. Pero, en este caso el creador ha tomado solamente los personajes, dándole carácteres propios. Sumado a eso, es una concepción mucho más oscura que los cómics originales. Aquí el pueblo de Riverdale está plagado de drogas, asesinos y bandas narco, que le dan a la trama ese toque distintivo.

Pero, si por algo es que me gusta Riverdale, es porque sus personajes principales (y secundarios) son realmente interesantes y bien actuados. el Archie de J. K. Apa es un adolescente conflictuado, correcto y algo crédulo, que pelea contra las injusticias desatadas en el propio pueblo, Betty es una insistente y recta investigadora dispuesta a todo por desentrañar los misterios del pueblo y con un pequeño lado oscuro, Jughead es un adolescente correcto, dispuesto a todo por hacer justicia y la Verónica Lodge de Camila Mendes es un personaje realmente interesante, que sufre las desventuras de su mafioso padre y su sumisa madre. Sumado a ello, los secundarios están realmente bien escritos, como los padres de los principales, o la impredecible Cheryl Blossom, esta última no es una simple rica y bella que se convierte en villana, sino una adolescente conflictuada que vive en una familia siniestra y que al final termina por redimirse, amén de estar interpretada por una actriz jóven, Madelaine Petsch, que es una ladrona compulsiva de escenas. No obsante, todos tienen algunas chispas provenientes de los cómics de Archie, pero no se les dan una desmesurada importancia. Es más, cuando los personajes tocan el cliché, la serie se encarga de hacértelo saber con algunos finos pases de comedia (como el chiste de Verónica sobre Kevin, el amigo Gay de Betty, diciendo ¿todavía existe eso?).

Además, los valores que la serie trata son más simples. No absurdas protecciones al suicido o ensaladas de enfermedades sin resolución alguna. Riverdale trata sobre el amor, la amistad y la justicia, y es ahí cuando termina triunfando. Es por ello, que los mejores momentos de la serie se dan cuando Archie sale a combatir a mano propia a los villanos del pueblo, descubriendo en el camino que ello solo trae aparejada más violencia, o cuando Archie y Jughead salen a salvar la ciudad del caos reinante y la anarquía. Existen momentos de real tensión y, momentos en donde los personajes pueden redimirse, dando lugar a algunas de la escenas más emotivas.

Es tal vez anecdótico, que la primer temporada, cuyo nudo argumental sea la muerte de Jason Blossom, sea la menos interesante de todas, pero esto se redime en la segunda temporada en base a dos factores. El primero, es la aparición del misterioso enmascarado, que da lugar a la anarquía en el pueblo y algunos de los mejores momentos de la serie, con algunas interesantes revelaciones, y el segundo es la inclusión de Hiram Lodge, un villano realmente competente que pretende adueñarse de todo el pueblo. No obstate, es cierto que en el acto III, la explicaciones del libreto no resultan del todo certeras (si el enmascarado asesinaba a todos los pecadores, ¿por que no decidió asesinar a Lodge, que era el peor mafioso que la ciudad había conocido?). Me gustaría ver la termporada definitiva, en donde de una vez por todas se ponga a Hiram Lodge como el único villano de la serie, y así decidir de una vez el destino final del pueblo, tarea que tal vez sea encomendada a la temporada 4, a estrenarse en octubre de 2019.

RIVERDALE, es la prueba cabal de lo que he venido pensando sobre los damas de escuelas secundarias. Es una serie que trata sobre temas más simples como la amistad o la justicia, pero cuyos personajes intentan salir del cliche y están bien interpretados, sumado a que las revelaciones y los villanos que existen, son competentes y le interesan al espectador. Es cierto, que en el medio de todo esto hay algunos absurdos y decisiones discutibles en la trama, además de ser algo larga, pero eso se compensa con algunos momentos realmente bien concebidos y finales que respetan las reglas internas del relato. Es por eso, que es la única serie de este subgénero que desearía seguir viendo capítulos, además de que todavía tiene potencial de sobra para seguir llenando capítulos, y algunos actores que uno desearía ver por mucho tiempo más.
[Leer más +]
1 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
8
Giro radical desde una gran serie hacia un sinsentido
Habré visto la serie cuatro veces y no creo que nunca me canse de verla, aunque la siguiente vez que la vea probablemente solo lo haga hasta que se acaba el misterio de capucha negra y los productores se empiezan a inventar nuevos misterios que no son de la misma calidad que los dos primeros.

De manera que la razón por la que sigo viéndola es por el juego de celos y relaciones amorosas entre los cuatro protagonistas y porque transporta al típico ambiente adolescente y de instituto americano de hace unas décadas, tan idealizado por los europeos que se creen que allí la vida estudiantil es mucho más entretenida y juvenil que aquí, con lo típico de las animadoras y los partidos de rugby.

Pero por si fuera poco, en las dos últimas temporadas la serie se aleja tanto del tópico de las complicaciones amorosas como del de ambiente de instituto, cambiándole por el de un Riverdale penoso. Además se mezclan muchos misterios a la vez, a los que después de dárseles más vueltas de las necesarias, acaban resolviéndose de una manera bastante cutre que me deja decepcionada y me hace plantearme dejar de ver los nuevos episodios, que aunque están bastante mejor que los de la parte media de la serie, siguen sin ser iguales que los primeros.
[Leer más +]
Sé el primero en valorar esta crítica
6
¿Y NUESTRO VERDADERO RIVERDALE?
Riverdale es una serie creada a partir de unos famosos comics bastante conocidos en la literatura estadounidense. Tiempo después, estos comics fueron pasados a la pantalla.

Como todos los que hemos visto esta serie, sabemos que la historia parte de un grupo de amigos de distinto poder adquisitivo y con metas y formas de vida totalmente opuestas. Hablamos de Betty, Archie, Verónica y Jughed.



Me acuerdo de la primera vez que empecé esta serie, es de las típicas series que te enganchan desde un principio, los misterios, los casos por resolver, las injusticias en el pueblo, los asesinatos, los suicidios, las pasiones, los sueños, la envidia, la amistad, y sobre todo la venganza. Me acuerdo de que incluso mis padres se engancharon conmigo en la primera temporada, cada pequeño detalle te enganchaba porque se trataba de dramas que aun que duelan, pueden existir en el día a día.



Las primeras temporadas fueron una bomba, lo reconozco. Pero ¿qué narices pasó después? Todas las temporadas se convirtieron en pura monotonía, siempre era lo mismo, estaba todo bien uno de los personajes detectaba algo raro y pum, misterio nuevo. Pero, lo malo no fue eso, lo que hizo que la serie te hacía que perdieras el enganche era el paso de los verdaderos misterios que podemos encontrar en las noticias, como los asesinatos durante las primeras temporadas, a misterios ficticios como la aparición de monstruos durante las últimas.



Riverdale paso a ser una serie de pura ficción y de puros misterios sin sentido. En mi opinión, perdió toda la chicha por decirlo de alguna manera. Algún día esa serie volverá a tener el enganche y la dura realidad que hicieron que las primeras temporadas nos revolvieran por dentro, pero que nos hacían ver que no podíamos vivir sin ver mínimo uno de sus extravagantes capítulos al día. Ese es el verdadero Riverdale que todos necesitamos.
[Leer más +]
Sé el primero en valorar esta crítica
3
Políticamente correcto elevado al cubo.
Vi hace tiempo la primera temporada y me gustó bastante. En la segunda temporada, aunque el interés decayó algo, pero todavía había cosas interesantes y la cosa no aburría. Pero lo de la tercera temporada ya es de juzgado de guardia. Los guionistas han renunciado a cualquier atisbo mínimo de verosimilitud y es un disparate detrás de otro sin la mínima credibilidad por parte de los actores en sus disparatadas tomas de decisiones. La verdad es que al final me importa un pito lo que pase en la serie (digo esto viendo el capítulo 13 de la temporada 3), es todo un auténtico disparate y no hay el menor atisbo de situación o personaje interesante.
Los personajes no existen y todo es un cúmulo de despropósitos, a ver quién la lía más gorda. Las situaciones son absurdas, como ese intento de asesinato en un hospital, con pacientes, pero sin personal que los atienda, o esa prisión dirigida por un psicópata que no rinde cuentas a nadie y que ordena ilegalidades constantes a los guardas de la prisión (incluido asesinatos), sin que nadie cuestione nada.
Pero lo peor de todo es esa propaganda constante, en la tercera temporada, del colectivo LGTBIHZ, de la ideología de género, del Me Too y demás bobadas progres, claro, es una serie para jóvenes adolescentes y es lo que se lleva, lo políticamente correcto elevado al cubo, una serie en la que el 80% de los personajes son sociópatas descerebrados, pero eso sí, cuando se asesina se hace sin ofender a las minorías de ofendiditos que pueblan la sociedad actual. No nos vaya a pasar como con "Lo que el viento se llevó", y esos colectivos de ofendiditos exijan que se retire la serie y la boicoteen en las redes sociales. Vamos, la nueva inquisición progre es la que decide los contenidos de las series.
Me voy a pasar a algún canal que sólo programe películas de cine clásico.
[Leer más +]
5 de 11 usuarios han encontrado esta crítica útil
7
Un cuento para mayores.
'Riverdale' es una serie atormentada de estereotipos, clichés y sinsentidos que, llamadme loca, pero la hacen demasiado encantadora. Su elenco de jóvenes promesas y su fantasiosa ambientación al estilo de los años 60 es irresistible. Y aunque cuenta con las ideas más surrealistas que ha dado la historia de la televisión, con cada capítulo, hago el esfuerzo por recordar que el argumento procede de una colección de cómics y, si me centro en eso, creo firmemente que no es otra tontada de instituto americano. Además, te mantiene en vilo durante todo su transcurso... Un pueblo imaginario, villanos, héroes, príncipes y princesas: aquí están los dibujos -no- animados para aquellos que se niegan a crecer.
[Leer más +]
1 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Ver críticas con texto completo
Más información sobre
Fichas más visitadas