arrow

8 Críticas de los usuarios

Críticas de los usuarios:
5
Crítica de Los fantasmas de Ismael por Cinemagavia
Versión Cannes/Cines y versión extendida

Lo primero de todo, decir que la versión analizada aquí es la versión extendida de Los fantasmas de Ismael, una versión que tiene veinticinco minutos más que la que se proyectó en el Festival de Cannes que es la que la que llegará a nuestros cines.

Tras ver la versión extendida tengo ganas de saber si la versión corta será mejor al prescindir de muchas escenas que a mi parecer hacen de Los fantasmas de Ismael una película demasiado larga y tediosa. Sin embargo, creo que la versión corta será difícil de seguir al presentar cinco películas dentro de una, y ser ya de por sí una película en la que el espectador pierde el interés por lo que está viendo.

Muchas películas en una y ninguna completamente satisfactoria

Los fantasmas de Ismael se presenta como un thriller con un punto inicial interesante, el del regreso de una esposa desaparecida muchos años atrás que pone en juego la relación actual de su marido, convencido de que es viudo.

Este tema podría resultar interesante si no fuera porque Arnaud Desplechin, el director de la película, se desvía de la trama principal al entregar cinco películas dentro de una.

Entre estas películas nos encontramos con una de espías, un drama, y otra sobre un director lleno de traumas que no puede acabar con la película que está realizando. Esta parte podría ser una lúcida reflexión sobre los miedos y ansiedades de un director de cine. Sin embargo, es sin duda la peor de todas las historias al presentar giros que se desmienten minutos después y ser un desvarío tras otro.

Al intentar abarcar tanto, Arnaud Desplechin pierde el foco, y con él los espectadores, que no sabemos qué película estamos viendo con tantos cambios. Y cuando por fin llega la secuencia de la película que nos interesa, en mi caso el misterio de la mujer desaparecida, hemos perdido el interés por ella.

Este problema lastra a Los fantasmas de Ismael al no centrarse en ninguna película en concreto y ser sus finales completamente insatisfactorios. El misterio de la mujer desaparecida se resuelve demasiado pronto, el resto son poco interesantes y lo único que se salva del final es la ruptura de la cuarta pared con una Charlotte Gainsbourg tremenda que pasa de una emoción a otra en un instante.

Personajes poco creíbles

La mayoría de los personajes resultan poco creíbles y faltos de interés. Ismael es un hombre insoportable que grita y zarandea a las mujeres; el personaje del padre de la desaparecida y su película tienen cierta profundidad dramática que se pierde tras la patética secuencia del avión; y Carlotta, la mujer desaparecida, interpretada por Marion Cotillard, es fría y menos profunda de lo que pretende ser. Una lástima tener a una actriz tan buena en un papel tan vacío.

Solo es rescatable el personaje de Silvia, interpretado por la magnífica Charlotte Gainsbourg y que parece ser el único que no actúa seguido por los caprichos de un director perdido en sus cavilaciones.

Muchos gritos y poca tensión

El otro problema de Los fantasmas de Ismael es basar su tensión en el aumento de los decibelios, es decir a través de los gritos de los personajes, en especial el de Ismael. Este recurso lejos de crear tensión en el espectador produce desagrado, hastío y deseos de que termine la película para que dejen de gritar.

Junto a los gritos, la película basa parte de la tensión en su banda sonora, la cual con tantos cambios estilísticos debido a la gran cantidad de películas que presenta producen confusión al pasar de una canción de suspense a una de tono cómico y volver después a la pieza musical de película de misterio.

Conclusión

La versión extendida de Los fantasmas de Ismael es una película fallida debido a su excesivo metraje y a la pretensión de ser una obra magna al incluir tantas películas dentro de una. A pesar de estos defectos, la dirección de Arnaud Desplechin y la interpretación de Charlotte Gainsbourg ofrecen ciertos momentos interesantes que gustarán a los seguidores de los festivales de cine como el de Cannes.

Escrito por Otto Buendía
https://cinemagavia.es/los-fantasmas-de-ismael-pelicula-critica/
[Leer más +]
6 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
6
Cuando perdemos el hilo de una azarosa vida imaginada...
Cuando el guion se pierde por el camino de la autenticidad el espectador se diluye entre las arenas de su granular intencionalidad. Partiendo de una buena idea, con personajes e intérpretes grandiosos, la planificación y la distribución holística de las escenas y las tramas hacen que más que un puzzle el resultado sea un laberinto sin salida de ahogamiento disfuncional... cuando la idea empieza a forjarse, los hierros que la aguantan empiezan a debilitarse en atemporalidades y abruptos giros que liman con asperezas y sin vida. La naturalidad de ciertos personajes quedan distorsionados por una insignificante explicación y explicitación de sus actuaciones. No es que sea misterioso, es que no condensa las personalidades en sus apariciones. Pérdida de interés con un resultado divergente, a pesar de su calidad visual y sus intérpretes, que no viven su mejor momento en esta cinta.
[Leer más +]
4 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
6
¿Qué película quieres ser?
Los fantasmas de Ismael tiene un problema, y es el siguiente: tal como indicaron algunas críticas en su momento, no sabe en absoluto qué película quiere ser, o qué historia quiere contar.
No podemos entrar en detalle sin irnos al spoiler, por supuesto, pero Arnaud Desplechin pierde totalmente el paso en el momento en que el foco pasa de estar en la historia de la extraña vuelta de Marion Cotillard a la vida de Mathieu Amalric (y Charlotte Gainsbourg también, por supuesto; y ojo, porque los tres están excelentes y son sin duda lo mejor de la película) a la trama secundaria que protagoniza Louis Garrel. Que por mucho que nos guste Garrel, visto recientemente en las Mujercitas de Greta Gerwig, en El oficial y el espía y, en su momento, como parte del trío de Soñadores de Bernandro Bertolucci, no termina de encajar su trama con lo demás y con ese final tan extraño que tiene la película, volviendo todo un poco ¿al inicio? ¿Tanta gaita para eso? En fin.
Una película bastante confusa, aunque bien dirigida y bien actuada, y con suficientes elementos interesantes como para recomendarla, pero no hubiera estado de más que focalizara un poquito.
[Leer más +]
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
3
Hoy de menú tenemos empanada... mental.
Un cineasta (Mathieu Amalric) vive atormentado por el recuerdo de su esposa (Marion Cotillard), que desapareció sin dejar rastro décadas atrás. Cuando por fin empieza a rehacer su vida con otra mujer (Charlotte Gainsbourg) la esposa reaparece, poniendo su existencia patas arriba de nuevo.

He aquí una película que es como tres o cuatro películas en una sola. Una auténtica ida de olla sin orden ni concierto, puro capricho y ausencia de rigor por parte del tal Desplechin, que mediante el personaje (probable alter-ego) de un cineasta parece querer plasmar a lo bruto sus neuras personales... semejante caos narrativo, cual reflejo del caos creativo y personal del protagonista, no estoy seguro de que funcione en absoluto. O cuanto menos he esperado “algo” que diera sentido (no necesariamente lógico) al percal, pero ese algo nunca ha llegado.

Creo que la idea central es la pérdida, la ausencia, conjurar los fantasmas del título, una especie de terapia personal hecha cine, aunque ni de eso estoy seguro. Más parece un ejercicio de onanismo mental, con saltos muy gratuitos de unos personajes y situaciones a otros, por no hablar de unos recursos visuales utilizados aparentemente sin rigor; unos fundidos circulares (menuda cursilería) que representan ¿puntos de vista?... una música de violines cuando le sale del orto (que esa es otra, un concepto de drama consistente en gente chillando y rompiendo muebles), unos fundidos en mitad de una conversación... incluso momentos de aparente ruptura de la cuarta pared.

Total, que esto no es para mí y no he entendido un carajo... aunque eso sí, me iba a tomar unas copas con el Arnaud éste sin dudarlo un segundo.
[Leer más +]
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
2
Infumable
Una muestra más del muy sobrevalorado cine francés y de ese tipo de peliculas que pretenden ser buenas solo por ser complicadas, por no tener ni pies ni cabeza, por posiblemente reflejar los fantasmas de su director. Los que peinamos canas pensábamos que ya se había acabado la estafa que sufrimos en los 60 ( ya se sabe: cine de arte y ensayo, Bergman, La genou de Claire...) pero veo que no. Encima ,con guiños politicamente correctos a la, por desgracia, inevitable islamizacion de Francia. Lástima de dos horas perdidas en las que sólo me ha reconfortado ver a la siempre deliciosa Marion Cotillard.
[Leer más +]
3 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
6
Y en esas llegó Marion Cotillard
No se si alguna vez habéis experimentado esa sensación de "Por que carajo me ha tocado a mi la versión extendida del director?" Pues eso me ha pasado a mi en la 55 Edición del FICX, donde competía en la Sección Oficial, y es que el director presentó una versión de 140 minutos que se hizo eterna. Por que la historia -con un relato que logra enganchar e introducirte en el convulso y atormentado mundo interior de su protagonista masculino, un director de cine con una vida sentimental caótica- termina haciendo aguas por alargarse más de la cuenta y por la carga excesiva de dramatismo hiperbólico y teatral de muchas secuencias y personajes. Y como no Marion Cotillard lo vuelve a bordar.
[Leer más +]
1 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
5
Locura
Crítica originalmente escrita por mí en https://destinoorphanikiv.wordpress.com/2019/01/17/los-fantasmas-de-ismael/

Ahondando en las tribulaciones psicológicas que padece un director de cine debido a su pasado, Los Fantasmas de Ismael comienza con inusitada potencia, mostrándonos una situación que no se corresponde con la sinopsis, al atraparnos en una, en teoría, película de espionajes que nuestro protagonista está rodando. Con una dirección alegre y ágil, así como sobria en los momentos adecuados, el director Arnaud Desplechin firma en esta obra una primera hora muy sólida, con un buen desarrollo de la trama y presentación de personajes, así como la interacción entre estos. Juega muy bien con el pasado y el presente en un aparente galimatías narrativo para definir mejor a sus personajes, consiguiendo cerrar el arco correspondiente al trío protagonista y sus situaciones sentimentales en un punto alto.

Sin embargo, al culminar el arco central de la película en la primera hora, la obra parece quedarse sin fuelle en la siguiente hora y cuarto de metraje, al poner su foco en numerosas tramas tildadas de secundarias desde el principio de la película. Si bien es cierto que los fantasmas de Ismaël no son sólo los referentes a su mujer desaparecida 20 años atrás, si no también los relacionados con su hermano y su familia, mezcla conflictos amorosos, existenciales y familiares, la película dentro de la película (una visión que el protagonista tiene acerca de la vida que lleva su hermano), así como la trama de la mujer y su padre, en un popurrí de nadería. De por sí son buenos ingredientes, con algunas escenas realmente buenas para cada subtrama, pero la sensación de falta de rumbo tras el primer tercio de película es notable. A esto se le suma su final basado en mera exposición, que parece ciertamente apresurado.

Pese a todo, durante toda la película Desplechin consigue mostrar la desazón, confusión y progresiva locura a la que se está arrastrando el protagonista debido a todos sus fantasmas, traumas y últimas vivencias. Muestra al público un hombre roto, tóxico y que se siente culpable debido a su confusión amorosa, para reforzar al final el mensaje del amor como cura del tormento. De esta manera, pese a lo irregular de su narrativa y propuesta múltiple, consigue llevar sus temas a buen puerto. Todo esto es ayudado enormemente por las interpretaciones de Charlotte Gainsbourg y la conocida Marion Cotillard.
[Leer más +]
0 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
5
Ah, esos tríos franceses
Desde los tiempos de la Nouvelle Vague, e incluso antes con Becker, Carné y Renoir, el cine francés ha tenido una sentida predilección por los tríos, normalmente formados por dos jóvenes bellas enamoradas de un poderoso macho muy creativo (poeta, artista, director de cine....) con algunas bienvenidas excepciones. Pues bien, la película de Desplechin es una especie de homenaje a este cine, pero cambiando los bailes en los bares o las carreras por el Louvre por muchos gritos y algún desnudo integral. El macho alfa es, de nuevo, Mathieu Amalric, y nadie entiende que una mujer pueda perder 5 minutos de su tiempo con semejante sujeto, y mucho menos con su amigo el viejo pedante. Y más o menos eso es lo que pasa al espectador, que sufre por la pérdida de tiempo.
[Leer más +]
2 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Ver críticas con texto completo
Más información sobre
Fichas más visitadas