arrow

13 Críticas de los usuarios

Críticas de los usuarios:
6
Coherente
Evidentemente alejada del sobre estimulo de las películas modernas, “El Cuestodio” es una película reflexiva, que incentiva la observación, una película que pone su acento en los detalles.

Dentro de este marco la película está bien lograda. Es un relato coherente que nos pone en la situación de un sujeto, Rubén, sin vida propia, cuyo jefe –al cual Rubén cuida todo el día, absorbido en una rutina insoportable de lo monótona que es- no le considera la opinión, no le entrega mayor afecto, en otras palabras no comparte mayormente con él. ¿Es posible casi no compartir con alguien con quien se está 16 horas diarias? La frialdad con que el Ministro toma a Rubén es repugnante. Pese a eso Rubén no sólo le cuida su integridad, también le cuida sus intimidades.
[Leer más +]
23 de 23 usuarios han encontrado esta crítica útil
7
Detrás de un vidrio opaco
Para el público acostumbrado al ritmo de las series televisivas, videoclips y demás, tan pródigos en persecuciones automovilísticas o edificios que estallan en pedazos, puede resultar una película desconcertante por su buscada morosidad que pone su acento en detalles minimalistas. Pero esto es precisamente lo que el director procura transmitir, ya que "El custodio", aunque tome elementos del género, no es una historia policial, sino un medio para provocar otro tipo de reflexiones.

Hay una coherencia rotunda en la elección del punto de vista para contar esta historia con final inesperado de un sujeto sin vida propia, cuya palabra no es tenida en cuenta y al que se trata como a un objeto que respira y ocupa un lugar en el espacio. El trabajo de Rubén, el protagonista, consiste en ser custodio permanente de un ministro. Su función es protegerlo, tanto en su ámbito laboral como privado, por lo que debe compartir, desde una distancia cercana e insalvable, la intimidad y los secretos de su jefe, de su familia y de su entorno.

Todo en "El custodio" funciona con una magnífica economía donde el mínimo detalle significa, como el rosario siempre suspendido frente al parabrisas de su auto vigilador, o las pocas frases pronunciadas; aunque las palabras no existan o se perciban distorsionadas por el ruido y la distancia, o como en la escena donde hablan en francés, en la que todo converge para sentir en carne propia cómo percibe la realidad ese custodio aparentemente impasible. Una inquieta cámara nos convierte en testigos de la jornada del aparentemente imperturbable custodio: a través de su punto de vista, somos observadores, en un permanente juego entre lo que el protagonista ve, lo que el director permite observar en medio de abundantes elipsis y lo que pertenece al fuera de campo.

"El custodio" impresiona como una obra madura de un joven director que, sin excluir una aguda crítica social, trabaja más para quedar en la historia del cine independiente creativo (valorable en festivales que premian esta característica) y no para el éxito de taquilla: una pequeña gran película que probablemente oscilará entre aplausos elogiosos y la indiferencia de quienes sólo buscan relatos convencionales.
[Leer más +]
22 de 24 usuarios han encontrado esta crítica útil
8
Las tragedias interiores
Hay veces en que el cine, afortunadamente muchas veces, narrado desde la cotidianeidad, desde el silencio, desde el gesto más insignificante y rutinario pero certero, desde las miradas más simples y llanas, desde el planteamiento más humilde, nos alcanza mucho mas allá de lo que la maquinaria cinematográfica emocional y pretenciosa más compleja, que llega tan sólo a erizarnos levemente la piel. Esto, propio para algunos ajeno para otros, forma parte de la esencia misma del cine, del concepto y del poder que cada uno quiera otorgarle a lo que hace para la pantalla o a lo que decide ver en la sala oscura. De Argentina van llegando perlas que deberían hacer palidecer de envidia a nuestro cine patrio. No lo harán porque pasarán como un susurro por las carteleras y en este caso, porque ni tan siquiera es una comedia, ni sale Ricardo Darín, ni está estructurada para funcionar como un reloj cinematográfico por donde a cada minuto hay una risa, un llanto, un diálogo fresco... "El custodio" es cine de la tristeza, cine contemplativo, reflexivo, de otra raza emocional mucho más próxima a "El viento" de Mignogna que al cine de Campanella aunque a todos les una busqueda de humanidad en sus personajes. Más cine de la incomunicación, más Antonioni, más gestual y escenificada en su sencillez "El custodio" es un puñetazo lento pero contundente a la diferencia de sociedades, a las tragedias interiores. Cine festivalero, gran Julio Chávez.
[Leer más +]
19 de 22 usuarios han encontrado esta crítica útil
6
Aquí lo importante es él
¿En cuantas ocasiones hemos podido ver el lado complejo y humano de un custodio o guardaespaldas?

Realmente pocas. En su mayoría los guardaespaldas son parte del escenario y utilizados frecuentemente como símbolos que reafirman poder e importancia de personajes en primer cuadro. Nunca se habla de su sentir y estímulos para realizar su actividad, el saber cómo es su entorno, su familia o vecinos, sus limitaciones o talentos, incluso el conocer su equipo de trabajo con un poco de más detalle.

Rodrigo Moreno hace el análisis a través Rubén, guardaespaldas a cargo de la seguridad de un ministro en Argentina y en ocasiones de la familia de éste, la cual se muestra y le recalca su posición dentro de ese circulo en el cual se debe limitar a cumplir sus funciones y/u ordenes extras. Con la tarea de retratar la vida de un custodio, se refuerza que la actividad es muy compleja y es inexistente la libertad de movimiento; es estar al tanto de cada movimiento y lugar para mantener la seguridad del otro.

Sin muchos diálogos Rubén nos presenta a su familia (muy particular por cierto) en un día especial para él, lo que también nos ayuda a comprender el porque de su soledad e inexistente relación profunda con éstos, quienes tienen otra perspectiva de la vida, sueños ajenos al del protagonista.

En general se puede resumir que Rubén es un tipo preso de su actividad, solemne, solitario, escueto, estricto y sobre todo impredecible.

No es un trabajo lleno de balas, persecuciones y sexo al por mayor, por el contrario es más acercado a la realidad y rutina del especialista de esta actividad. No cumple con los tópicos holliwoodenses, como en aquélla cinta estelarizada por Whitney Houston y Kevin Costner y su visión rosa de la relación guardaespaldas – protegido, relegada a la cursilería e increíble historia del custodio que protege a la cantante.

Excelente la fotografía de la película y del cartel, el primer plano borroso y el segundo con la nitidez para visualizar a Rubén.
[Leer más +]
17 de 20 usuarios han encontrado esta crítica útil
6
El verdadero custodio esta aqui
Película que relata la vida de Rubén un custodio que lleva una vida rutinaria y solitaria, y que es testigo de lo que vive la familia del ministro a diario. En lo que respecta a las actuaciones es una película con muchos silencios haciéndonos sentir en la piel de nuestro personaje (Chávez prueba su calidad actoral interpretando a este personaje de pocas palabras)

Lo mejor: La actuación de Chávez y esos silencios desesperantes que tiene el film

Lo peor: Un final con muchos cabos sueltos para mi gusto
[Leer más +]
8 de 9 usuarios han encontrado esta crítica útil
7
Perla del Nuevo Cine Argentino
Es interesante los climas que logra plasmar Rodrigo Moreno en EL CUSTODIO.
No hace falta diálogos que provoquen redundancia. Los silencios de Ruben dicen mucho. El espectador se pone en la piel del custodio y nota cómo su vida va perdiendo sentido. El vacío que uno siente al ver la vida de Ruben es incómodo, pesado. Desde un primer momento se intuye que todo no puede permanecer así. Que llegará el momento en donde se produzca el hastío.
Enorme actuación de Julio Chávez, quien demuestra ser uno de los mejores intérpretes del país (sino, el mejor).
[Leer más +]
8 de 9 usuarios han encontrado esta crítica útil
7
La playa
Recuerda a aquello que dice Tony Wilson (Steve Coogan) a cámara en “24 Hour Party People” «Soy un personaje secundario en mi propia historia». Aquí el custodio cubre la espalda de alguien que hace que su vida se imponga a la suya y la acabe aplastando. Una simple sombra que arranca del paradigma de este tipo de cine cuyo acto importante suele componer un clímax heroico, como sucede en el cine clásico americano — véase en la “En la línea de fuego”. Aunque Rodrigo Moreno lo sigue de cerca, componiendo nuevas formas introspectivas, como si ese clímax de violencia subyugado fuese el giro final de la obra y acto liberador del protagonista.

Ejercicio de liberación cinematográfica y narrativa. Juego de miradas y silencios. “El custodio” está sujeta por hilos quebrantables e inestables pero precisamente esa es su mayor virtud. Pertenece a ese otro cine argentino más preocupado de avanzar cinematográficamente que epatar al público en taquilla. Aquí también hay drama familiar pero simplemente describe al personaje en un fallido ejercicio que quiere dotar de cierta humanidad al protagonista, como si formarse parte de otra historia, de otro mundo u otra película. Aunque esa descripción de la hermana loca y su composición con el protagonista pretende mostrar otra faceta más inestable, más psicológica.
Distancia, eso sí, para abrir heridas ya cortadas. Como esa humillación pública con los dibujos, como si ese custodio fuese el payaso o un juguete de una sociedad elitista. ¿Tendrá el filme de Rodrigo Moreno alguna metáfora política sobre el trabajo de la clase obrera, de aquellos que protegen el bienestar los adinerados y son recompensados con la burla y el desprecio?
Queda, eso sí, un ejercicio de estilismo de describir la amargura del vacío, de la nada.
[Leer más +]
7 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
10
Excelente, una joya y una lección de talento
Excelente película, la segunda, de Rodrigo Moreno, cineasta joven, de enorme talento.
Cada detalle de la trama exquisitamente propuesto. Avanza sin tropiezos y crece en intensidad. Tal vez el mejor trabajo hecho con "los silencios" dentro del cine nacional. Una mirada construida con fineza desde la retaguardia, desde lo que está oculto, atrincherado en una buena historia. Desde el punto de vista de la valoración del desenlace, me ha resultado irónica y aguda, una bocanada de aire y una risa cruel para los que en Argentina estamos ahogados de tanta política ficción. Enorme actuación de Julio Chávez, actor menos taquillero que el archiconocido Darín, pero de una altura dramática desbordante. Bien por Rodrigo, y adelante, a seguir haciendo buen cine.
[Leer más +]
5 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
1
¿Y le dieron un premio?
Puedo hablar con conocimiento de causa de como es la vida de un escolta y la verdad, esta película no sé de que va.Lo único decente son los primeros minutos, cuando se reflejan las continuas esperas. (Esperar, el verbo que más conjuga un escolta)
[Leer más +]
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
7
Podría haber sido más...
Es cierto: la película es lenta, cansina, tediosa, parca y hasta aveces aburrida...pero que nos quiere decir el director? Precisamente eso! nos muestra la vida de Rubén, un custodio de un ministro importante de Argentina, que apenas se lo escucha, que no tiene voz, en un mundo plagado de superficialidades y boludeces, donde las palabras aveces se oyen como un susurro indescifrable, pero que algo dejan entreveer, donde el paso del tiempo y de la vida se hace arrastrándose, lamiendo el suelo, siendo un objeto que ocupa un lugar en el espacio. Con imágenes detenidas como queriendo desentrañar y penetrar la esencia de las cosas, en un mundo gris, opaco, sin ritmo y con pesadumbre, cada imagen congelada nos habla de muchas realidades que nadie puede ver, que a nadie le importa...Criticando las diferencias y señalando los detalles de una Argentina oculta, por descifrar el lamento y la negrura...
Realmente una joyita difícil de disfrutar, ya que el director crea un clima sufriente, tedioso y torturante.
Gracias
[Leer más +]
Sé el primero en valorar esta crítica
6
Cuando el secundario se vuelve protagonista
Quien esté familiarizado con el estilo cinematográfico argentino y se siente a ver El Custodio, se dará cuenta de que se encuentran ausentes la gran mayoría de los elementos que lo caracterizan. Los diálogos rápidos, dotados de labia, se han substituido por silencios sepulcrales. El humor de la miseria y de lo ridículo queda relegado a servir como detalle de fondo en escenas contadas. Y no hay rastro de ese tono jovial y vivaracho.

Todos estos cambios puestos a nuestra disposición para narrar la historia de Rubén. Una historia sin trama, ni rumbo definido. Que lleva una vida asfixiante y pesada. Pues Rubén no es más que un figurante dentro de las acciones que realizan otros. Quien es protagonista porque tiene la suerte de que la cámara le sigue a él.

Así es cómo logramos conocer el trasfondo de Rubén, siguiéndole por dos facetas de su vida marcadamente diferenciadas. Buscando un evidente y necesario contraste.

Por un lado, su entorno laboral, compuesto por escenas simples y pausadas. En ellas Rubén espera, sigue y obedece al ministro argentino a quien tiene el deber de custodiar. En ellas Rubén apenas habla. Y en el resto de la cinta, tampoco se muestra mucho más elocuente. Está interpretado formidablemente por Julio Chávez, quien consigue darle vida haciendo uso de una interpretación contenida. A través de las miradas, respiración, y detalles sutiles de su gesticulación corporal dota a Rubén de un carácter fuerte e inquieto pese a su falta de voz. Y de esta forma, aun si la acción avanza a paso de tortuga, Chávez consigue mantener un cierto interés. Su participación en la cinta es el mayor acierto.

En el ámbito personal, nuestro protagonista se rodea de secundarios extrovertidos que logran aportar más dinamismo a la acción. La familia de Rubén desborda carisma y están presentes en las mejores escenas. Donde el humor de situación está servido con la sobriedad que caracteriza al conjunto de la cinta. *(añado una observación en el spoiler).
La brillantez de este segmento pone sobre la mesa el verdadero potencial del film. Lo que termina por dejar una sensación un tanto decepcionante a la hora de valorarla en conjunto. A la película de Rodrigo Moreno se le podría haber sacado mucho más partido.

Pues sus problemas más graves están presentes en el resto del metraje. El intento por plasmar el tedio del propio protagonista en su trabajo de manera “fidedigna” no justifica que, en el proceso, se deteriore de una manera tan desorbitada el ritmo de la cinta. No se puede justificar un fallo de técnica cinematográfica apelando a la presencia de un supuesto significado profundo o de una metáfora, los cuales se amparan en criterios puramente subjetivos.

Lo claustrofóbico y opresivo que es el empleo de Rubén, como concepto, queda expuesto, como mucho, tras los primeros 10 minutos de la cinta. A esto se añaden a mayores, posteriormente, otras ideas que complementan a la original y nos aportan más información: las miradas lujuriosas a la hija de su protegido o la humillación que sufre Rubén por parte del círculo social de su protegido debido al escaso talento pictórico que posee.

Todas las demás escenas en las que Rubén permanece en su trabajo se reiteran, pues a diferencia de las anteriormente citadas, no aportan información adicional. Además de esto, algunos planos se sienten innecesariamente ampliados.

El clímax violento se justifica por tratar de romper con la tensión acumulada del protagonista a lo largo del film. Abre las puertas a un nuevo capítulo de la historia que plantea muchas incógnitas e interés. Desgraciadamente, la película termina a escasos minutos después, sin desarrollo, y dejando un montón de cabos sin atar. Un final fácil y que resulta altamente inconcluso.

En resumen, El Custodio es una película que, lejos de avanzar, se mantiene acomodada estirando y sobreexplicando la premisa básica de la misma. Dando vueltas constantemente para terminar conduciendo a un final abrupto que acentúa significativamente los fallos.

Es una verdadera lástima, pues Rubén se trata de un personaje que inquieta por mantener su conflicto interno presente de manera constante gracias al talento interpretativo de Chávez. E interesa por los matices que le son otorgados a través del guión.

Rubén no cambia, pero su entorno sí. La película brilla con mayor intensidad cuando la solemnidad de Rubén se ve complementada por personajes más activos. Y lamentablemente, esto sólo supone un 15% del metraje total.

Tras verla uno se pregunta si no será mejor que los personajes secundarios permanezcan en su lugar y no se vuelvan protagonistas. O puede que haya que esperar otra ocasión en la que se desarrolle esta idea con mayor provecho.
[Leer más +]
Sé el primero en valorar esta crítica
2
Tedio. Oportunidad perdida
No hacía falta contar con el sobresaliente Julio Chávez para el papel protagónico: hasta yo soy capaz de interpretar hora y media de película llena de nada, de vacío, de espera. No sé qué sería comercialmente de esta película si los espectadores no tuviésemos al menos este aliciente.
A los espectadores españoles les digo que me recordó al sketch de "Faemino y Cansado" en el que hacen "famosos en acción", donde, por ejemplo, interpretan a Manuel Campo Vidal esperando el ascensor.
[Leer más +]
0 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
1
¿El Custodio? porque no mejor ¡El Tedio!
Me parece estupendo que el autor trate de mostrarnos lo aburrida y tediosa que puede ser la vida de un custodio. También me parece bien que muestre la nula importancia de un custodio (aquí llamado guardaespaldas) en la vida de su protegido. Pero... ¿Tiene que ser de una manera tan sumamente aburrida? ¿Porque hora y media de sufrimiento infernal? ¿No podía haber echo un corto? ¿o directamente haber echo otra cosa?

Sinceramente. La película es extremadamente lenta. Vacía. Para mi ha carecido totalmente de sentido. He salido del cine una hora y media más viejo. Y nada más sabio. La fotografía no era gran cosa. En mi vida he visto tantos planos centrados, árboles agitándose... en fin. Creo que hay muchas maneras de mostrar aislamiento, de mostrar monotonía y una vida rutinaria mucho más rápidas, sin aburrir al espectador.
[Leer más +]
5 de 14 usuarios han encontrado esta crítica útil
Ver críticas con texto completo
Más información sobre
Fichas más visitadas