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El director, es el mismo que sorprendió en 2011 con la excelente “El inocente”, la cual catapultó a Matthew McConaughey en papeles serios, alejándole del papel agenciado para él en Hollywood de “cachitas” en películas románticas de dudosa gracia.

Pues bien, una vez demostrada su valía, en “Runner runner” tocaba “lavar la imagen” de dos niños mimados de la industria del cine, intentando ofrecerles un vehículo de lucimiento serio, siendo nada menos que Ben Affleck y Justin Timberlake. La fórmula no podía volver a salir, no sólo porque la historia y desarrollo no están a la altura de la anterior, sino también porque el bueno de Matthew es muchísimo mejor actor que el nuevo (y denostado) Batman y el cantante que quiere ser actor.

La historia cuenta como un universitario de Princeton, Richie Furst (Timberlake), pierde todo su dinero (destinado para pagar su matrícula) jugando al póker online. Como está convencido de que le han timado, se va a Costa Rica a pedirle que le devuelvan su dinero, acudiendo al mismísimo dueño de la página web de apuestas online, Ivan Block (Affleck).

Una vez se lo demuestra, Block le reclutará para su negocio, descubriendo el mundo de lujo que ello conlleva. Pero todo empieza a torcerse cuando un agente del FBI (Anthony Mackie) empieza a investigarles.

El argumento de “Runner runner” parece interesante, pero no lo es, puesto que se sostiene a base de incoherencias y de aglutinar tópicos y reflejar escenas típicas del género. La primera incoherencia que desbarata todo el argumento no tarda en llegar, debido a que si pierde todo su dinero (literalmente), ¿cómo paga el avión y la estancia en Costa Rica?. Porque la propia historia demuestra que no lo saca ni de sus amigos (tan pobres como él) ni de su alcohólico, jugador empedernido y adeudado padre.

Pero más allá de este error (garrafal) de argumento, salvable si la historia lo merece (que no es el caso), no hay nada que atraiga de la propuesta. No lo hacen sus protagonistas, con este trío que no tiene química ni carisma; ni tampoco atrae su desarrollo, previsible y nada novedoso o interesante. Afirmar que lo más interesante de la cinta es oír a Affleck y Timberlake chapurreando español resultaría cruel si no fuese la más pura verdad.

Definitivamente, en “Runner runner” nos encontramos ante uno de los estrenos más flojos y evitables del año, con una historia que se hace larga aún a pesar de su corta duración, y un desenlace que se intuye al mostrarse la primera duda del protagonista respecto a la actitud e intenciones de su jefe, un Ben Affleck plano, tanto en su actuación como en los matices de sus gestos faciales (inexistentes).

La gracia del reparto era ver a dos de los actores que menos saben gesticular de la actualidad (sólo faltaba que acudiera también Keanu Reeves) jugando entre ellos a las cartas y ver su “cara de póker”, pero ni eso nos han querido regalar, ya que el tema del póker es bastante secundario, y cuando aparece es online, con lo cual pierde toda la gracia.

Lo mejor: Que sólo dura 90 minutos y Anthony Mackie, que le da un poco de “vidilla” a este soso thriller.

Lo peor: Que Ben “Bruce Wayne” Affleck sigue demostrando que debería limitarse a dirigir y dejarse de actuaciones planas.

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Una auténtica pena que una película que tenía tan buena pinta (o por lo menos, interesante) como ésta haya supuesto otra gran oportunidad perdida. Ya si el argumento es prometedor, pero deriva en tópicos y clichés continuos, éste tampoco hace un esfuerzo por ser divertido siquiera. Tanto es la justita calidad del proyecto que es que ni se toma en serio a sí mismo, ni provoca un ápice de suspense o interés hacia su conclusión. Y es que esta película posee uno de los desenlaces menos interesantes y sin fuelle que he visto para una película de este calibre. Los actores se limitan a cumplir y los escenarios parecen bien montados. La película logra verse y tampoco es horrible a rabiar. Pero seguro que si la hubiese dirigido Affleck, seguro que sería otra cosa.
Una importante decepción.

'El inocente', un film que cosechó buenas criticas y el encanto del publico, sirvió para dos cosas, que Matthew McConaughey se tuviera en cuenta no solo para comedias románticas mediocres y que su director, Brad Furman, se abriera puertas entre esa selva llamada Hollywood. Su tercera película llegó y en ella ha contado con un reparto más de actualidad que excelente, formado por "Quiero ser actor" Timberlake y "Nadie quiere que sea Batman" Affleck, ademas de una estupenda pecosa, distando algo de la típica belleza "Me pongo de perfil y no se me ve" made in Hollywood, Gemma Arterton, chica con curvas de las que derrapan.

'Runner, Runner' es una película de casinos, con tintes de Thriller y cine criminal, pero adaptado a las nuevas tecnologías. El jugador de Poker ya no es ese elegante señor trajeado con puro y copa de coñac, en su lugar, ahora tenemos a jóvenes universitarios con sobrepeso sentados en la silla de su ordenador, el problema es que detrás de estos negocios, detrás de todo, siguen estando los mismos de siempre; Los más chulos y mafiosos de su barrio. Idea, que a priori, resulta interesante, si no fuera por que esta tercera cinta de Furman cae en lo más tópico de los tópicos del cine criminal y ademas, tan solo entretiene, a ratos.

Nada destaca cuando toda la película se desarrolla como un esquema de clase de ciencias, cuando ni técnicamente resalta en ninguno de sus aspectos; Planos fuera de foco (no sabemos si intencionados o no, pero desde luego no lo parecen), secuencias, incluso diurnas, cargadas de ruido en la imagen y actores carentes de carisma que tan si quiera se dignan a asistir a un curso acelerado de pronunciación castellana; Si, el film se desarrolla en Costa Rica y tanto Affleck como Timberlake, sobre todo este ultimo, hacen su pequeño homenaje al ridículo. Y tópico tras tópico la cinta consigue entretener bien entrado el acto final (Sobre todo un par de escenas cargadas de tensión), pero desgraciadamente la conclusión de la cinta resulta tan previsible y fría que la película vuelve a su estado inicial; Tópicos y aburrimiento.

Un producto mediocre destinado para vender, pero que tan si quiera destaca en ello, ya que tanto el reparto como sus diferentes materiales promocionales no auguran nada bueno. Es más, sorprende que aunque nada en ella destaca, uno espera menos de lo que se acaba encontrando, que no es mucho. Para publico nada exigente, para aquellas personas que disfrutan con todas y cada una de las películas criminales y una demostración más de que Affleck debería quedarse detrás de las cámaras antes de que sus películas dejen de tomarse enserio. ¿Pasar el buen rato? Es posible, pero si no eres de los que se pasan mitad de la película preguntándose; "¿Y esto, a que coño viene?".

El título de mi crítica es la definición en el argot del póker del término runner, runner. Y no va mal encaminado en cuanto a la historia que nos quieren contar.

Hace años las películas que se hacían donde alguien se quería hacer rico, tenían un gran problema, poder hacerse con el botín "físico", ósea, había que ingeniárselas para poder sacar el dinero de algún sitio y quitárselo a alguien. Hoy día ese problema ha pasado a mejor vida, ahora todo es on-line, el dinero puede este en España y diez segundo después en Honduras. La tecnología nos ha dado un mundo donde todo se logra rápidamente y esa es la premisa que pasa por la cabeza de nuestro protagonista (Timberlake), un estudiante de Princeton cuando entra en contacto con un misterioso empresario (Affleck), abonado al enriquecimiento meteórico. Coches potentes, mansiones para quitar el hipo, mujeres de infarto, lujo hasta en el sello del papel higiénico.

Pero algo que hemos aprendido la mayoría que habitamos el planeta tierra, es que nadie regala nada por nada. Y esa difícil lección la tendrá que sufrir en sus propias carnes nuestro aspirante a multimillonario. Policía comprada, palizas, disparos, ataques de cocodrilos, no todo será un camino de rosas en esta aventura.

Así que nos encontramos ante un producto relativamente curioso sin grandes expectativas, con un reparto de caras conocidas donde la incertidumbre y el giro argumental es lo más relevante en la producción.

No podíamos ni debíamos esperar demasiado de un thriller protagonizado por Timberlake y Affleck, y no porque sean malos actores, que no lo son, sino porque viendo el guión sobre el que se construye la película, era difícil que dieran más de sí.

Que Timberlake es un actor normal ya lo sabíamos desde hace tiempo. Un actor disciplinado y correcto, que aporta lo justo para ser un secundario aceptable pero al que le falta mucho para ser un respetable cabeza de cartel. sus anteriores trabajos como protagonista ("In time", "Con derecho a roce") no destacaban precisamente por su trabajo a pesar de ser medianamente entretenidos, y chocan con la calidad de los trabajos en los que aparece como secundario ("La red social" o la próxima "A propósito de Llewyn Davis").

Y que Affleck se siente mucho más seguro cuando se dirige a sí mismo ("Argo", "The town") que cuando es dirigido y no lo controla todo. No es capaz de imprimir suficiente personalidad a pesar de que su papel de fraudulento empresario diese mucho más juego, un papel que necesitaba de alguien duro y tenaz, eso sí, construido con la ayuda de un guión a la altura.

Pero ellos no tienen la culpa de encontrarse un guión que profundice menos en las situaciones y en los personajes. Un guión que se queda en lo superficial y que no vale para crear un verdadero thriller de apuestas. Su punto de partida es convincente, pero a partir de ahí se derrumba y pasa por todas las situaciones que plantea como de puntillas. No se involucra en lo que cuenta y deja vendidos a actores y director, que no pueden levantar el proyecto. Ni siquiera la (breve y poco importante) aparición de Arterton merece la pena.

Un thriller más que el espectador verá y olvidará prácticamente al mismo tiempo. Y no es un halago.

La trama es muy entretenida, la mayoría la acusan de utilizar clichés recurrentes. Yo cuestiono: A estas alturas, cuando lo hemos visto todo y lo que más apetece, si no existe eso tan difícil llamado originalidad, es una historia bien contada.

Ben Affleck se mueve por un filo dual, necesario para aportar cierta confusión imprescindible. No creo que su papel sea simple, ni tampoco que le venga grande. Justin Timberlak cumple aunque no pueda decirse de él que es un gran actor.
En definitiva, agradable, bien resuelta, sin escenas de acción potentes, que tal vez sea lo que ha podido restar puntuaciones más altas.

Es como una especie de moraleja inmersa en la trama la que parecen querer transmitirnos. Cualquiera que no la haya visto debe saber que los temas principales sobre los que se basa dicha película son el juego (ya sea normal u online), los negocios, los engaños y el crimen encubierto. Sabiendo esto es bastante fácil saber por donde irán los tiros y el tipo de cinta que tenemos delante. Hay muchas cintas con estas características y, de un modo u otro, todas siguen un mismo patrón.
La historia que nos ofrece tiene algo que la hace interesante y entretenida, pero también tiene algo que la vuelve a ratos un poco lenta y con secuencias hasta aburridas. Se podría decir que estamos entre la espada y la pared pero como conjunto creo que se deja ver. Desde que empieza intenta ir, más o menos, al grano y aunque lo consigue tampoco nos atrapa del todo. No es hasta pasada la mitad del metraje cuando nos ha enganchado casi por completo, aunque como os decía, tiene partes bastante pesadas. Mejora a medida que avanza, pero solo hasta poco más de la mitad. De ahí en adelante se mantiene y no muestra nada novedoso, original o que nos haga interesarnos más por la cinta. Lo que tiene es lo que hemos visto hasta dicho lapso de tiempo. Y el desenlace, obviamente sin contar ni destripar nada, lo he notado un poco forzado, como con ganas por terminar, a la par que previsible. Dudo mucho que sorprenda a alguien todo lo que vamos viendo en su último acto.
Interpretativamente hablando me ha convencido bastante, aunque lejos de gustarme. Cuenta con Justin Timberlake y Ben Affleck como los protagonista absolutos de la función. El primero no suele gustarle a mucha gente y la mayoría le quita valor a lo que hace. Personalmente le veo un actor del montón y en algunas películas bastante soso, pero hay veces que cumple con lo que pide su personaje, como en este caso. Affleck me gusta un poco más, pero con sus limitaciones. Tiene películas en su haber que me han gustado pero en roles como el que desempeña aquí no me convence del todo. No obstante ambos son los que tiran del carro y exceptuando algunos momentos que le dedican a la guapísima Gemma Arterton o a Anthony Mackie son a los que veremos durante el 90% del metraje total. Aun así todos son olvidadizos.
Un aspecto que yo personalmente habría dado más hincapié y bastantes más minutos es el tema del juego, las partidas de póker, el dinero que ello conlleva y demás. Algunas personas, entre las que me incluyo, les gustan las cintas que se basan en ese mundillo y por desgracia aquí apenas se toca de un modo muy superfluo. Una lástima, ya que le habría dado mucho juego, valga la redundancia.
En resumen ''Runner, runner'' es una película del montón, de usar y tirar y que gira entorno a los negocios. Técnicamente no es demasiado entretenida ya que apenas pasan cosas y solo vemos gente hablando, aunque esto será cuestión de gustos. Solo os la recomendaría si os gusta este tipo de cine, este género, ya que sino os aburrirá bastante. Si no le pongo el aprobado es porque considero que aburre más que entretiene, pero las he visto peores.

Lo mejor: A niveles muy generales se deja ver.
Lo peor: No llega a enganchar del todo, tiene varias secuencias lentas y aburridas y le faltan más minutos de póker y de juego.

* Floja *

Es una especie de lección para adolescentes listillos y traviesos que les enseña que, si se salen del buen camino y quieren ganar pasta gansa se acaban metiendo en cositas malas y, luego no pueden escaquearse. Algo ya visto cien veces y, mejor contado. No me convence ni el malo ni el bueno ni, la chica ni, el típico narco de cliché ni nada de nada. Es un continuo verlas venir y acertar. No sorprende, no emociona y, lo peor que le puede pasar a una peli....es muy aburrida. Sin pena ni gloria. No merece la pena. Decepcionante y simplona. Es como una nueva versión modernizada (o adaptada) a estos tiempos de lo que nos contaba La tapadera, sacándole aquella como estrellas a esta cosita sin gracia. Aquella por lo menos, tenía su intriguilla.

Película totalmente prescindible que perfectamente te puedes perder, pero bueno...al fin y al cabo las hay mucho peores.
El guión parece entretenido al principio, después pierde fuelle.
Las actuaciones discretas, destacando la de Justin Timberlake, en cuanto a Ben Affleck pues con cara de inexpresión, no transmite mucho la verdad.
Vamos, que es la típica película para echar el rato, nada del otro mundo.
Pero bueno, estaba entre el 4,5 y el 5 y me decanto por el 5 porque al menos no me he aburrido (también es verdad que la película tiene poca duración).
La película te puede hacer reflexionar en el mundillo de las apuestas on line...¿de verdad en necesario jugártela por dinero?

A pesar de la atractiva idea de hacer dinero rápido y fácil , y sobre todo del glamuroso triángulo compuesto por Affleck,Timberlake y la espectacular Gemma Arterton, todas las estrategias utilizadas por los protagonistas conculca un montón de leyes, aunque para ello se busquen paraísos fiscales y países sin derecho a extradición.

Es un negocio que se viene realizando asiduamente el de los casinos virtuales aprovechando la manga ancha y la corrupción política, pero Brad Furman, partiendo de la idea que era muy buena, se pierde en escarceos amorosos que dejan la trama principal en un segundo plano que baja la calidad de la cinta.

Actuaciones correctas de los protagonistas y de un Anthony Mackie desaprovechado totalmente en el curso de la trama. Correcta pero olvidable.

Interesante, 6.

Una historia que se jacta de oscura y extrema pero que está lejos de 'sacarse los guantes' es "Apuesta Máxima" -"Runner, runner" (2013)- con el regreso al primer plano de la actuación de Ben Affleck luego de galardonada "Argo" (2012).

Como siempre sin pretender contar la trama como las nefastas sinopsis, este film de Brad Furman intenta adentrarnos en el mundo de las apuestas y su vínculo con los lujos e intrigas, pero tanta diversión al filo y margen de la ley no queda plasmada en su cara más salvaje y descarnada, lo cual se echa de menos y luce poco verosímil a los ojos del público.

Sin considerar a la exquisa Gemma Arterton, tanto Timberlake como Affleck encajan con el perfil del maleante con clase, estilo y lo demás, pero ese bienestar tiene sin dudas un costo sucio, un lado oscuro que apenas es mencionado y se sitúa como la gran deuda de esta película que insinúa mucho pero profundiza y se escandaliza poco.

Una lástima por una cinta que podría haberse tomado el tiempo de conseguir algo más en torno a construcción general, de historia, personajes y sobretodo, de relaciones. Porque si bien se destaca la presencia de tres actores protagónicos, el rol femenino es casi decorativo y en la participación de Antonie Mackie se puede ver prácticamente una sosa caricatura.

Para mayores de 7 años en Chile, "Apuesta Máxima" es otra película de la temporada condenada a deambular en el cable, como programación de relleno, con lindos rostros pero sin ninguna sustancia para quedarse en el inconsciente del público.

Lo rescatable, al menos tiene consideración con el espectador; dura apenas una hora y media.

Recomendación:
Floja. No explota ni se ensucia las manos. Un tímido flirteo con la intriga

Una buena cinta sobre el mundillo de las apuestas online que me hace aún dudar más de la credibilidad de ellas. Y es que, si uno ya duda de todo tipo de compras online, más aún de las apuestas. ¿Cómo uno puede confiar en que no tengan truquillos para que todo el tinglado esté amañado?

El guión es bueno aunque nada del otro mundo, ya que tiene mogollón de clichés por todas partes, pero ésto no quiere decir que no sea entretenida ni mucho menos. El personaje de Affleck está bien, pero le falda frialdad, hubiera escogido a otro. Arterton está de lujo (en todos los aspectos), aunque en mi opinión no le queda muy bien ese tono de piel tan caribeño, parece demasiado artificial, como si fuera maquillaje y no por vivir en el Caribe. Quien mejor está en su papel es nuestro protagonista Timberlake, quien parece que olvidó desde hace tiempo su pasado como cantante en el grupo N-Sync, protagonizando desde entonces multitud de películas: Alpha Dog, Black Snake Moan, La Red Social, Bad Teacher, In Time...

Pues eso, que aunque de nuevo solo nos trae las apuestas online, merece la pena verla, la trama es más que interesante.

Personalmente no me ha gustado la película ya que no me ha intrigado la historia, es como si antes de que fueran sucediendo los hechos los hubiera visto, una película simple de Hollywood, monótona para mi gusto.
Esta crítica la voy a remitir en base al tipo de película supuestamente nos ha filmado el director. Es decir que vamos a identificar el genero de película que es; y según el director es: Thriller. Intriga. Drama | Crimen. Póker (copiado de la pagina oficial de FilmAffinity).
Thriller: muy poco de "Thriller" tiene.
Intriga: por mi parte la intriga en esta película es inexistente.
Drama: no he visto reflejado mucho drama en ningún momento en la película.
Crimen: típicos matones a los que estamos acostumbrados, tanto "polis" como "cacos".
Póker: si cuando dicen "Póker" se refieren a que salen un par de barajas...efectivamente esta película va sobre "Póker".
Daré mas detalles en la critica con spoiler!

Bastante mal. Las películas de casinos y juegos, cuando no hay robos o mafia de por medio, suelen ser bastante aburridas. Pero es que en este caso el casino es virtual y el desarrollo del argumento tedioso hasta el extremo.
Porque no me creo que a Ivan (Ben Affleck) le eche el otro en cara que le ha timado dinero, y lo único que se le ocurre es ficharlo. Y una Gemma Arterton muy maquillada (como si le hiciera falta) está por ahí en medio sin hacer absolutamente nada.
La historia transcurre lenta. Da la sensación de que parece que va a tardar en arrancar la parte interesante, pero lo cierto es que nunca llega.
No emociona ni siquiera cuando lo intenta. Pues cuando parece que va a pasar algo, pasa rápido y otra vez vuelve a la tónica aburrida.
Lo cierto es que es muy corta pero se hace larga y muy pesada.
Da la sensación de que los productores dijeron: Vámonos de vacaciones a Costa Rica, que hay buenas playas y fiestas. Pongamos la excusa de una película, rodamos cuatro chorradas y por las noches lo pasaremos bien. Y algo de eso se refleja, pues los personajes no paran de estar en fiestas donde se oye la música más que sus conversaciones, aunque para lo que hablan nos da igual.
Una película de las que si no se hubieran hecho no habría pasado nada en absoluta. Su existencia es absolutamente inútil y el tiempo que se emplea en verla está desperdiciado.

Decir que a la tercera va la vencida a Brad no le tiene que hacer mucha gracia, aunque con el inocente salio airoso en este caso, se cae con todo el equipo.

Runner nos trae una trama algo vista ya,y la forma de contarla y los actores no han ayudado mucho como para salvarla de la quema. La historia se vuelve pesada y lenta casi desde el inicio, no aportando mucho y esto hace que la perdida de interés desde el comienzo se agudice, carece del ritmo necesario y del carisma de sus actores, que resultan en su mayoría inexpresivos y poco convencidos del trabajo que están realizando; con todo esto en contra la verdad es que la cinta se vuelve monótona aunque soportable por lo que por lo menos no resulta una gran pérdida de tiempo.

Como conclusión, se puede decir que se trata de una nueva intentona de hacer un género ya muy trabajado algo novedoso, pero que en este caso el éxito radicaba en el dinamismo y al carecer de ello, se puede decir que resulta una cinta para ser vista y comentada una sola vez.

Antes de empezar con el puro análisis de la trama, las actuaciones y demás cuestiones comentar que es una película amena, con ritmo, de las que tras acabarse tienes la sensación de no haber perdido hora y media de tu vida (aunque tampoco signifique nada relevante dentro de ella) pero se agradece que se condense la historia en lo que debe de durar una película que no ha nacido con interese de obra de arte.

A este tipo de películas las catalogo como "A todo gas".

Película donde no hay interpretación, se cuenta una historia que a nadie le importa, se mete acción por acción, se enseñan chicas semi-desnudas y aunque todo comienza de modo muy oscuro, de manera irremediable e imposible de solucionar.

Una película sin inteligencia que resulta previsible, aburrida, típica y que maneja los elementos básicos del thriller sin suspense, pericia o toque personal. Algo comercial que no merece la pena ni para dormirse.

No aporta nada al género de acción o de intriga. Desperdicia el atractivo que puede suponer Costa Rica. Affleck, en su línea, no está a la altura como actor, menos aún cuando hace de megavillano, se queda debajo del papel. Y Timberlake es soso para este papel. Se ve, no obstante, con agrado y tiene la ventaja, dentro de su mediocridad, de ir de menos a más. El final, previsible y demasiado edulcorado. Si no la ves, no te pierdes nada.

Se trata de una película de estas que se hacen en Hollywood para consumo y olvido. Más bien dirigida a un público adolescente, un ritmo vertiginoso y con un guión amable donde no hay demasiada violencia. Y esto es lo mejor que se puede decir de este film, porque darle más vueltas, entrar a criticar las interpretaciones o hacernos preguntas sobre el guión sólo llevaría a hablar mal de la película. Así que lo dicho, una película que no se toma demasiado en serio a si misma, con un par de actores guapetes, un poco de lujo y un guión superficial para no pensar nada. Para un rato tontorrón en el que uno no tenga nada mejor que hacer. Al menos, cumple su finalidad y no se hace aburrida.