4 Críticas de los usuarios

Donde el grande entre los grandes adaptó el libro de Steinbeck, "Las uvas de la ira" logrando una obra maestra, James Franco se queda a medio gas adaptando "En lucha incierta". También es verdad que esta novela es inferior a "Las uvas de la ira". Escrita tres años antes que aquella, fue para Steinbeck el ensayo general donde ya dejaba caer ideas y la construcción de unos personajes que luego alcanzarían su máximo esplendor con su mejor novela.

No es que sea mala película, eso es difícil cuando el material de partida es lo suficientemente bueno para compensar el trabajo del director, y cuando se cuenta con actores de la talla de Vincent D`Onofrio como el temporero London y de Robert Duvall como el terrateniente Chris Bolton. Pero James Franco es incapaz de lograr imágenes que se claven en la retina del espectador. Si Ford lograba que el hambre, la miseria, la pobreza y la desesperación se metieran en los ojos, aquí el director está lejos de lograrlo. Su actuación tampoco es para tirar cohetes, ni tampoco la de Nat Wolf. Ambos dan vida a un par de activistas que se infiltran en un campamento de temporeros para animarlos a iniciar una huelga contra los terratenientes que los mataban a trabajar por sueldos de hambre. Tampoco entiendo que pinta ahí la chica Disney Selena Gómez como la hija de London . en un papel dramático que le queda grande.

Quizá alguien me enmiende la plana, pero es que yo a James Franco lo tengo bastante atravesado. Me parece un actor sobrevalorado y un director del montón. Fue hace ya muchos años que leí la obra completa de Steinbeck, al menos la traducida al español, pero mis recuerdos de la novela, son bastante mejores que el sabor de boca que me ha dejado la película.

He de confesar que tengo cierta simpatía por estos experimentos de James Franco fuera de sus películas más ligeras. Me parece loable que alguien que ha hecho fortuna en el cine puramente comercial se embarque en proyectos como "el ruido y la furia" o en este caso "una lucha incierta".
Dicho esto, creo que como director aún no ha encontrado ese "algo" capaz de enganchar al espectador cuando el material de partida es una historia compleja, lenta, e indudablemente dramática. Característica principal de las novelas de Faulkner o Steinbeck por la que parece tener preferencia...
Quizá el problema es ese. Que a James Franco le apasiona la novela de la que parte y quiere contárnosla con todo detalle, aunque eso derive en una falta de ritmo narrativo y en tramas que, aunque presentan los hechos de forma clara y correcta, fallan al trasladar el dramatismo al espectador.

En cuanto al casting, es cuanto menos curioso. Quien haya seguido la carrera de Franco como director ya sabe que va a tocar verle en uno de los papeles protagonistas, sí o sí. En este caso resulta correcto como revolucionario, aunque quizá le falta explotar un poco más la faceta maquiavélica de su personaje, darle un poco de tridimensionalidad, de conflicto, en vez de casi normalizarla con esos "es que Mac es frío... Es que Mac ha visto cosas..."
Nat Wolff hace el papel coprotagonista que se espera de él, saliendo bastante airoso, y en cuanto a los secundarios destacaría a los veteranos Sam Shepard y Robert Duvall, quienes consiguen, con pocas palabras y mucha calidad actoral, transmitirnos más sobre las diferentes realidades de la Gran Depresión que los protagonistas reales de la historia.
La presencia de Selena Gómez, tan comentada, no pasa de anécdota a pesar de disfrutar de bastante tiempo en pantalla. Y sinceramente, no creo que sea culpa suya, es que sus líneas tampoco daban para más. Su personaje es puramente esquemático en mucho aspectos...
Vicent D'Onofrio lo hace bien como London, el líder de los huelguistas, pero hay algo raro en él. Quizá sea por el montaje, o no sé porqué, pero parece como si fuese casi prescindible. Es la cara visible del grupo, pero a la hora de la verdad siempre se pliega ante Mac, no hay tensión entre ellos, ni tampoco mucha entre él y el malvado terrateniente interpretado por Duvall. Es como si al entrar él en el plano a todos les entrase prisa por rodar la escena y pasar a otra cosa.

En definitiva, no creo que sea una mala película. Es una apuesta arriesgada por adaptar un material a la altura de grandes directores, y James Franco no solo acepta el reto, sino que consigue una película de aprobado. Sin enormes fallos, sin estropear la novela original y sin llegar a aburrirnos en ningún momento... ¿que la obra de Steinbeck merecía más? Sin duda, pero nadie nace sabiendo todos los secretos del séptimo arte. Llegará el día en que James Franco conseguirá hacer una película completísima y perfecta sobre uno de sus libros preferidos, que logre entretenernos y transmitirnos la profundidad de la obra al modo de John Ford en Las Uvas de la Ira, pero hasta entonces tendremos que conformarnos con magníficas video-sinopsis de novelas como esta.

Lamento haber perdido el tiempo esperando una película que nunca termina de armarse. Previsible y obvia desde el primer minuto aburre y cansa con una trama que no llega a conmover en ningún momento, actuaciones sin brillo y una estigmatización ideológica digna de rebelión en la granja.

La pelicula basa su guión en una historia de base cuyo eje es una huelga de trabajadores de un manzanal.
Si bien la historia pude decirse que es de las grandes, el guión la empequeñese y opaca entre giros, ambigüedades y discurrires que poco tienen que ver con la centralidad del acto.
Así es como en la historia de la huelga se inflintra un melodrama melindroso y algunos hechos secundarios que están de más.
Desde el lado de lo técnico, hay errores en el montaje en donde se arman conjuntos de planos que resultan confusos y desconcertantes.
Por supuesto que un espectador sagaz no podría pretender que una pelicula yankie de "cine social" sea por lo menos un buen espectáculo. ¡Hada de eso se puede esperar del cine yankie! pero de allí a producir cine social de la manera misma que un drama de conflicto -algo que están muy acostumbrados los yankies- hay un largo trecho pendiente abajo.

Una película olvidable... como casi todo el cine yanie contemporáneo.

Si desean ver cine social pues les recomendaría al irlandés Ken Loach es un buen referente y también ¿por qué no? a sarle una vista a la muy buena producción argentina "La patagonia rebelde" de Javier Olivera o para espectadores más exigentes la sublime película rusa "La huelga" de Eisentein que es toda una obra de arte.