10 Críticas de los usuarios

‘Les Tres Bessones’ son uno de los referentes audiovisuales que, sin duda, marcaron mi infancia. Soy consciente de que en esta crítica y en este voto hay una importante carga personal y sentimental. Pero también me gustaría destacar estos dibujos animados por aspectos más objetivos.

Es cierto que la estructuración de los capítulos era muy pobre, siempre la misma. Las tres niñas se portan mal, entonces la ‘Bruixa Avorrida’ las castiga y las mete en un cuento. Cuando ellas solucionan el entramado de dicho cuento obtienen el perdón y vuelven a casa, para alegría del niño espectador. Pero meterse con la estructura me parece irrelevante. Ya puestos, el nivel técnico del dibujo también era lamentable. Estamos hablando de un producto destinado a niños, y llamar la atención de un niño es muy fácil. Por eso lo que verdaderamente tiene peso, a mi modo de ver, es el contenido. Y en ese punto hay algo muy original.

No quiero ser carca, pero en la época que vivimos, en la sociedad de la imagen, de Internet y de la información, la comunicación interpersonal y generacional van quedando cada vez más relegadas. Lo que ésta serie consigue es coger cuentos populares y adaptarlos a la modernidad. Cuando yo terminaba el colegio y llegaba a casa, prefería enchufarme en la televisión dos o tres horas antes de sentarme en la falda de la abuelita a que me contara cuentos. Si tenía la televisión optaba por ésta, y no creo que yo sea un caso único. En nuestros tiempos, la cultura de la imagen se impone a la imaginación: tenemos más referentes visuales que conceptuales. Los dibujos de las tres mellizas no rompían esa tendencia, pero sí daban a conocer un mundo que poco a poco va quedando enterrado en el imaginario popular, y del que se puede desprender mucho. Evidentemente yo conocía algún que otro cuento, pero con ‘Les Tres Bessones’ conocí relatos como el de Hansel y Gretel, Juan sin miedo o el Gato con botas. Notabas un cierto aire de familiaridad con esas narraciones.

Después de los primeros capítulos, quizás por falta de referentes, tomaron como base otras historias no tan clásicas ni infantiles. Recuerdo a King Kong subiendo la Sagrada Familia, al Gran Hermano de Orwell, o a las mellizas ayudando a Gaudí con sus fantasmas de la Pedrera. El hecho de que sucediera en Barcelona, aún ayudaba más a enfatizar lo próximo que resultaba (para el de Barcelona y alrededores, claro está).

Con esa proximidad, aunque sin llegar a ser la abuela, te llegaban hondamente las diferentes historias, porque creías que eran de tu entorno, de tu mundo. Te pertenecían.

Qué quereis que os diga, pero no entiendo la nota de un 3,4 para esta serie. Yo de pequeña siempre lo veía, y me apasionaba.
Cada capítulo era un cuento, siempre la bruja las llevaba a uno diferente. Yo me metía en sus historias y en sus aventuras, todas las tardes lo veía, no me perdía ni uno.
Puede que a los adultos ya no nos gusten este tipo de series.
Pero está claro que esta serie es ideal para los niños.

Yo veía esta serie de pequeño, como muchos otros niños y niñas del momento.
Me gustaba, pero he vuelto a ver algunos capítulos recientemente y la verdad es que muchos de los valores que transmite han quedado algo anticuados.
La historia de la serie es sencilla, las tres mellizas (Ana, Elena y Teresa) hacen alguna gamberrada y aparecen inmediatamente la bruja aburrida y el búho para castigarlas. El castigo es enviarlas a un cuento en el que tendrán que ayudar a los protagonistas a resolver el problema que plantee la historia de turno.
El problema es que a las niñas les gustan los castigos de la bruja, y no parece que aprendan mucho de las moralejas de los cuentos.
Me parece una serie que fue bonita en su tiempo, pero a la que el tiempo ha pasado factura. Aunque la parte buena es que enseña un poco de cultura general a los más pequeños.

Valoración final: 6 sobre 10.

Como resalta ukiyo_e, el contar cuentos es la trama principal de la serie y lo que le da valor en la sociedad actual que se está perdiendo la tradición de contar cuentos a los peques. ¿Cómo puede tener una media tan baja de nota? ¿Con qué ojos se critica esta serie? ¿Con los racionales o con los del corazón? Sin duda, ha de hacerse del corazón, con el corazón de la infancia, el que nos hacía soñar y sonreir después de ver la serie. Esta serie tiene un valor mucho mayor, cuando eramos infantiles, que Dragon Ball (que yo la veía y me gustaba) o series parecidas donde indirectamente se ensalza la violencia como método de entendimiento con el otro.

Si hay una serie que he visto más de cien capítulos, que me ha perseguido durante mi infáncia y que ha hecho que llegue a odiar la muerte de una persona sin duda es esta. Recuerdos me llegan de tardes de infancia en las que llegaba a casa tras un día de guardería, me sentaba en el sofá con el mando y ponía Las tres mellizas. Nunca he sufrido tanto las aventuras de unas niñas que eran castigadas por una puta amargada, bruja, guarra y cerda que incita a practicar la cropofília en su cara. Tras estos insultos diré, obviedad clara, que la bruja me cae bastante mal.
Por lo demás, las tres mellizas no es más que una serie más que intenta educar a una juventud bastante belicista, a la que apruebo porque, vale, es mala, pero el otro día haciendo zapping ví tres minutos de Sin Tetas No Hay Paraíso, cinco de HKM y seis de otra serie más de este tipo y pensé: Si la bruja esta levantara la cabeza...

Sin duda la serie de mi infancia, 104 capítulos de puro entretenimiento. Adaptaciones y versiones para niños de los cuentos clásicos e historias universales.

A eso se le puede añadir la serie de la Bruja aburrida que sacaron más tarde

La verdad es que no estoy de acuerdo con ese tipo de críticas que atacan la "estructura simploide o inexistente" de algunas series para niños. Sobre todo porque si productos como "Las tres mellizas", "Teo" o "Doraemon" están dirigidos a un público infantil (a veces directamente a preescolares y otras a niños de, digamos, entre 3 y 10 años) me parece evidente que no van tener la estructura de los animes -destinados principalmente a adultos y adolescentes aunque también los vean muchos niños- ni de las series para adultos. En lo personal pues, no puedo juzgar un producto como "Las tres mellizas" de la misma manera que juzgaría "Shin chan", "Ranma" o "Candy Candy" o alguna obra similar, las cuales a pesar a ser muy distintas entre sí no están pensadas para ser vista por chiquillos de parvulario. Y si les pongo notas similares a ambos tipos de productos se las pondré teniendo en cuenta aspectos distintos.

También es cierto por otro lado que existen animes como por ejemplo "Heidi", "Marco" o las películas de Hayao Miyazaki que en principio son aptas para todos los públicos y tienen un argumento bastante más complejo que "Las tres mellizas" pero creo que aún así se trata de productos distintos. Hay dibujos animados, como las mismas obras de Miyazaki, que están pensados para todos los públicos y que pueden gustar lo mismo a una persona de 5 años, a una de 9 y a otra de 12 o de 14. Y hay otros que están enfocados de manera distinta, como pienso que es el caso que nos ocupa.

Yendo ya a la serie me parece que es un producto adecuado para el público al que va dirigido, ni más ni menos. Divierte, entretiene a los niños y, además, les cuenta a través de las tres mellizas no uno sino infinidad de cuentos para todos los gustos. Historias como Los tres cerditos, Blancanieves, Caperucita Roja o similares y otras que van más allá, puesto que en no pocos capítulos las hermanas se relacionan con Ulises de la Odisea, Romeo y Julieta de Shakespeare, Don Quijote de la Mancha, Oliver Twist, Frankenstein, Moby Dick, Cyrano de Bergerac, El Rey Arturo, Mozart, Guillaume Tell, Marco Polo, Antoni Gaudí, Agatha Christie, Velázquez, Vincent Van Gogh, Buffalo Bill... incluso recuerdo un capítulo en el que se adentraban en el mundo del cine.

Sí, está claro que los niños de 4, 6 o 8 años no se convertirán en expertos de la pintura o la literatura, ni se harán fans de Homero, Dickens, Shelley, Shakespeare o Cervantes, ni se volverán unos entendidos en la música de Mozart, en la arquitectura de Gaudí o en la vida y obras de Christie tras ver esta serie. Pero los capítulos pueden ser para ellos un primer acercamiento a estas figuras, y también a la cultura universal (pues en algunos capítulos Ana, Teresa y Helena nos hablaron de la leyenda de Sant Jordi y el dragón, de Robin Hood, del tamborilero del Bruc, de Tristán e Isolda, etc.) aunque lógicamente las tramas estaban adaptadas al público infantil. Por otro lado la serie aproxima a los niños a los cuentos clásicos de toda la vida, esos que quizás conocen o quizás no, pero que formarán parte de su universo toda la vida y que, si en el futuro tienen hijos, los transmitirán seguramente a las nuevas generaciones.

¿Que la estructura es repetitiva? Sí, resulta innegable. Pero está bien para lo que quiere ser. Porque a un niño de 6 años desde luego no le vas a poner "Ciudadano Kane" ni la versión del 68 de "Romeo y Julieta" probablemente. Igual que a unos amigos que vengan a comer a tu casa no los enchufarás a ver "Las tres mellizas" durante la sobremesa, a no ser que os apetezca a todos juntos recordar viejos tiempos. Por tanto no podemos en mi opinión comparar "Las tres mellizas" con una producción más adulta o juvenil, ya que no está pensada para eso sino para divertir a los niños y acercarlos a las principales referencias de la cultura de una manera didáctica. A todas esas figuras históricas, legendarias o artísticas de las que no oirían hablar hasta muchos años después en caso de no seguir esta la serie. Repito, no se trata de convertirlos en expertos eruditos sino de darles una primera referencia que más tarde ampliarán notablemente. Si eso lo cumple ¿Para qué pedir más?

No me puedo creer que esta serie tenga una nota tan baja, cuando me parece una de las más recomendables para niños, y se pueden aprender bastantes cosas sin tener que recurrir a libros de texto. Y las tres hermanas son divertidas, igual que la bruja aburrida.

Aunque esté muy lejos de ser lo mejor que he visto tiene un tono muy optimista, desenfadado, entrañable que a mí me gusta, y sin caer en infantilismos como Dora la Exploradora o Caillou.

No sé, quizá me sabe mal porque le tengo mucho cariño al haberme criado con ella y llevo muchos años sin verla, a saber...

Muy orgulloso estoy de que esta serie pertenezca a nuestra patria, que sea española, porque su calidad es altísima a mi parecer. Es creativa, original, entretenida, y entrañable. No voy a entrar en si es educativa o no, más bien es puro entretenimiento con ficción, perfecta para los peques por su tono ameno y ausencia de contenidos impactantes. Me gustaba mucho esta serie, la verdad, nada tiene que envidiar de otras series infantiles. Satisfecho estoy con mi generación.

Aunque es una serie animada destinada principalmente a un público joven, también ha cautivado a personas de todas las edades con su historia divertida y encantadora.

Una de las fortalezas de Las tres mellizas es su estilo de animación. El diseño de los personajes es atractivo y colorido, lo cual es agradable a la vista y atrae la atención de los espectadores más jóvenes. Además, la animación es fluida y bien realizada, lo cual contribuye a una experiencia visual agradable.

En cuanto a la historia, Las tres mellizas sigue las aventuras de las hermanas Ana, Teresa y Elena en un mundo lleno de fantasía y diversión. Cada episodio presenta una trama diferente que enseña lecciones valiosas sobre valores como la amistad, la cooperación y la honestidad. Esto convierte a la serie en una opción educativa y entretenida para los niños.

Sin embargo, cabe señalar que Las tres mellizas puede carecer de profundidad en su argumento. Si bien el enfoque principal es la diversión y la imaginación, algunos espectadores pueden encontrar que la serie se repite en términos de tramas y estructura de episodios. Esto puede hacer que los episodios se vuelvan predecibles y menos emocionantes a medida que avanza la serie.

En cuanto a las actuaciones de voz, el doblaje en Las tres mellizas es impecable. Los actores de voz brindan interpretaciones convincentes y carismáticas que ayudan a dar vida a los personajes. Esto también contribuye al atractivo general de la serie.

En general, Las tres mellizas es una serie de televisión encantadora y educativa que ha dejado una huella positiva en la audiencia a lo largo de los años. Aunque podría haberse beneficiado de una mayor diversidad en las tramas y una mayor profundidad en el argumento, sigue siendo una opción sólida para los niños y un refrescante viaje a un mundo lleno de fantasía y diversión.