201 Críticas de los usuarios

Una de las películas que mejor sabor de boca me ha dejado ultimamente. Thriller autentico, desgarrador de principio a fin. Con una actuación antológica de Christian Bale, que te hace ponerte totalmente en la piel del personaje y sufrir su propio calvario. Me encanta el aire tenebroso, oscuro, sucio y desolador que envuelve a toda la trama. Además me río de las críticas que había leido sobre que en los momentos finales la película se volvía previsible y perdía interes, porque sobre todo el desenlace final me ha parecido buenísimo, en parte también porque el desarrollo global de la película esta lleno de escenas interesantes, que enganchan totalmente y que hacen estar totalmente metido en la película de principio a fín. En fin, que ha sido un agradable descubrimiento que seguramente no te dejará indiferente.

Después de quedar sorprendido con la extraña 'Session 9' y de sufrir el más horrible de los castigos con el mediometraje 'Sounds Like' para Masters of Horrors T2, me daba cierto reparo ponerme a ver 'El Maquinista', la última película -como tal- de Brad Anderson, un director capaz de crear atmósferas impresionantes, teniendo siempre en mente ideas bastante extrañas y surrealistas que suelen ser tildadas de estupideces, como pasó con su película anterior (Session 9) y parece que con esta misma, según leo en las numerosas críticas que tiene. De nuevo, se deja entrever que no todos los usuarios se han parado a pensar el significado de esta película -ni de la otra-, por lo que se han quedado a medias, o se han sentido engañados, o a saber qué.

No voy a ser repetitivo. Tras 46 críticas, creo que ha quedado más o menos claro cómo es "El Maquinista", algo que usuarios como scolme, Sapientia, Doctor_Alzheimer o Javi_wan han expresado con acierto. Sólo quiero destacar dos cosas de la mejor película de terror, ¿terror?, española ¿española, eing?!, de lo que llevamos de siglo.

Lo primero, reconocer la brutal, brillante labor de Christian Bale no sólo a nivel interpretativo, que está de 10, sino ya en cuanto a implicación, habiendo peligrado de muerte perdiendo 30 kilos para interpretar a su personaje, estando totalmente esquelético y dando mucho mal rollo en primeros planos.

Lo segundo, un guión de hierro, sin fisuras, que va dejando pistas hasta que eclosionan en un final sublime, magnífico, realmente sentido y a todas luces demoledor, reforzado evidentemente por el punto anterior.

Estos dos puntos, unidos a la maravillosa ambientación que Brad Anderson imprime al relato, convierten 'El Maquinista' en un punto obligado para los fans del thriller. Abrid bien los ojos, fijaos en todo, seguid a Bale, dejaros llevar... disfrutadla.

Una fabulosa película, rodeada de una atmósfera sobrecogedora, inquietante, con un halo de misterio y que invita al espectador a indagar acerca de cualquier pequeño detalle que aparece en pantalla, a dudar de todo, a plantearse si lo que está viendo será ficción, realidad, un sueño, tal vez una alucinación. La trama no decae en ningún momento, no tiene altibajos, al contrario: cada escena intriga más y llena a uno de deseos de resolver el misterio que se plantea.
Christian Bale está incomensurable, magnífico, inmejorable; su aspecto enfermizo no hace sino aumentar la extraordinaria actuación que nos ofrece y añadir inquietud y desasosiego al océano de sensaciones que ya de por sí experimenta el espectador.
¿Y qué decir del final? Un final sencillo, que explica todos y cada uno de los interrogantes que nos hayamos planteado durante el visonado de la cinta y que proporciona alivio, paz y tranquilidad. Fantástica.

La dura vida de un fresador requiere un estado mental despejado y alerta. Si andas con problemas puedes causar graves daños y llegar a un punto sin retorno.

¿Es un hombre eso que se desplaza por la casa llena de post-itt? ¿O es una mantis religiosa con esos miembros tan escuálidos y largos?

Desconcierta esas incongruencias que van sucediendo pero de una manera extraña te sumerge en la expectación. La mente de un hombre lleno de reproches y con la conciencia cargada nos acerca a la locura, siempre tan sugestiva pero temida por ser definitiva.

¿Es la nevera un electrodoméstico que pide a gritos que la laven? Que va. La nevera es el alma del hombre que chorrea sangre de una culpa que no ha expirado.

¿Es ese enorme atún que hay en la nevera un pescado podrido para tirar a la basura? No está podrido, está fresco, muy fresco, fresco por vivir. Ese atún que muestra en fotos una y otra vez el hombre con dedos de los pies en las manos no es más que el niño muerto, un pez gigante como la culpa. Y no te puedes deshacer de él tan fácilmente; y si no te lo crees ahí tienes al calvo, el de los dedos de los pies, que es tu impía conciencia. Por supuesto, el culpable no puede quitárselo de encima por mucho que le corte el cuello una y otra vez.

No des generosas propinas que así no se logra limpiar el sentimiento de culpa.

Sólo hay una salida. Confesar.

El maquinista es un escalofriante drama de un hombre atormentado. Una película española que se sale de las rutinarias, un film psicológico de pesadilla bastante bien llevado con un final convincente. Sin dudar, adentrémonos en los miedos de cómo con ellos se puede llegar a la locura.

Sin ser un experto en cine, me parece una más que buena película, en líneas generales, tanto por la fotografía como por la trama. Por otro lado, el que Christian Bale esté tan extremadamente delgado no me parece un mérito de interpretación, aunque ayude a dotar de mayor crudeza y credibilidad al personaje (para nada quiero decir que la interpretación no sea buena). Todo el conjunto de ambientación y fotografía resulta muy efectivo. Tampoco estoy de acuerdo con que el final sea decepcionante. Para mí ese final no hace perder ningún valor a lo que se ve antes, y resulta, si no algo espectacular, sí algo que enlaza de manera coherente y sin sobresaltos artificiales con todo lo anterior, que lo explica, y que acentúa el realismo y el efecto psicológico, al menos en mi caso.

El thriller psicológico de las características de El maquinista presenta un inconveniente y es que hay muchos precedentes en el género y a estas alturas es difícil sorprender y ser totalmente original.
Sin embargo, pese a que los ingredientes no sean nuevos y a nuestra mente acuda en algunos momentos tal o cual película, es innegable que están muy bien manejados y logran crear tensión y un interés creciente al espectador hasta un final que, al menos, no estropea las cosas, como muchas veces ocurre.
Christian Bale está excelente, no ya por la apariencia, sino porque logra dar la carga dramática y humana que requiere a ese hombre que se ve inmerso en una sucesión de extrañas situaciones y que presenta un progresivo detereioro físico, aunque, como él dice, no está enfermo, ni bebe habitualmente, ni consume drogas.

Tras un segundo visionado de esta película, ya no me quedan dudas acerca de lo buena que es, si es que acaso en algún momento las tuve…

Hay varios elementos a destacar positivamente.

Empezamos con la actuación de Christian Bale. Está claro que la preparación física previa del actor impresiona sobremanera, lo que unido a un excelente trabajo interpretativo dota al personaje de credibilidad y facilita la identificación del espectador con su estado de demencia y decrepitud. Probablemente, no hubiese sido necesario que el actor apareciera tan famélico y debilitado, sin embargo, que suceda así nos ayuda a conectar con el infierno de incomprensión y paranoia en el que se aloja su existencia. Trevor Reznik se nos antoja muy vulnerable, física y anímicamente. Es un hombre perdido no sólo entre sus ropas, sino especialmente en los recovecos de su mente, acuciada ésta por las consecuencias de la falta de sueño, es un ser frágil que acaso encuentra un mínimo de amparo en los brazos del personaje de la prostituta. Su día a día es confuso, como nuestra percepción de la historia durante la mayor parte del metraje.

La atmósfera de confusión, así, está muy lograda. Sabemos que todo lo que parece estar sucediendo, probablemente no está sucediendo y que, por el contrario, hay una realidad que, a merced de dicha confusión, se nos escapa, aunque intuimos que está ahí, y no cabe duda de que desde el paulatino desarrollo del guión, se nos invita a intentar desvelarla mientras acompañamos a Trevor en su descenso al averno. Para ello contamos con algunas pistas, algunas muy evidentes (la presencia de Iván, un personaje cuya existencia es negada por el resto y tan sólo percibida por Trevor); otras, un tanto más sutiles (que aparezca “El Idiota” de Dostoievski no es casual).

Aunque algunos afirmen que es previsible, yo no creo que sea así. Las pistas son dosificadas y su inclusión en la película va acercando al espectador a la clarificación de muchos aspectos de ésta. Con ellas, vamos deshaciendo los nudos de la madeja hasta llegar a un desenlace explicativo que, al menos yo, no esperaba.

Grandísima película, con una capacidad para crear angustia en el espectador que es poco frecuente de ver últimamente.

Técnicamente me parece sobresaliente, con una fotografía muy convincente en todo momento que, en conjunción con la soberbia interpretación de Bale (cada día me gusta más este tío), le dan ese toque desolador y opresivo que acompaña a toda la cinta. Las actuaciones del resto de personajes están también a la altura, y resultan igual de convincentes en todo momento. Su ritmo me ha parecido estupendo, con el reposo necesario que necesita la trama (alguno pensará que es lenta, pero yo al menos, cuando me meto en una película, no mido el tiempo ni tengo prisa por deshacer el nudo... incluso diré que me apasionó Solaris jejeje).

Con respecto al argumento en sí, comentaré antes que nada que ya vi los comentarios de otros usuarios de Filmaffinity, así que tenía un pie en tierra por si resultaba ser una castaña, lo cual, conjuntado con que la primera media hora es tal vez la parte más tibia de la película, me hizo temer lo peor... pero nada más lejos de la realidad. Sinceramente, no entiendo las críticas de aquellos que dicen que tiene un argumento previsible y muy trillado.... y paso a explicarme en spoiler, para los que aún no han visto la película:

La pesadilla de El maquinista se despliega en la pantalla mostrándonos diferentes grados; diferentes realidades rodeando la trama que no parecen tener una conexión directa pero que mediante el uso de pistas aisladas ubicadas EN EL MOMENTO JUSTO logra dar un sentido único a una obra que parecía bifurcarse nuevamente en cualquier momento.

Cristian Bale se ha consagrado, este papel podrá no ser premiado, pero jamás podrá olvidarse. Participa como el personaje principal de una pélicula armada cual una red, y si deja cabos sueltos son lo suficientemente intrascendentes como para no disminuir su valor. Lo cierto es que el espectador debe estar muy atento, porque si deja escapar una pista es muy posible que pierda el centro principal de la película.

La locura aparece de nuevo como el centro de atención. Pero a diferencia de, por ejemplo, Naboer (otra obra muy recomendable si gustan de este tipo de géneros), en este caso el reconocimiento que establece el personaje en relación a su propia culpa en cierto modo lo aleja del camino sin salida y lo acerca un poco más a ese camino de redescubrimiento que exige la locura para escapar de la trampa.

"No se quién soy", afirma el personaje y varios sujetos secundarios lo van ayudando a modo simbólico para resolver el conflicto. Una obra muy, pero muy buena y en su contra solo puede argumentarse cierta frialdad en la puesta en escena, cierto esfuerzo métodico en vano que solo atenta con el profundo sentimiento que acompaña a la historia. De todas maneras, creo que el punto supremo, la mayor virtud de esta obra radica en la mirada desde una primera persona obligada: salvo excepciones (ej. toma aérea de la camioneta del prota estacionada en medio de una avenida transitada), el espectador vé las cosas conforme las percibe la psiquis fragmentada del personaje. Esto contribuye a generar esa atmósfera desasosegada, paranoide y borrosa que tiñen a la peli de un color alucinatorio constante.
Salvo detalles, notable, recomendable.

Resulta complicado, a veces, justificar por qué extraña razón una peli aparentemente bien construida, bien interpretada y bien desarrollada no acaba de convencerte. Supongo que el cine, tanto en su faceta discursiva como en su rol de objeto de fascinación artística no siempre es susceptible de ser analizado empíricamente y, por consiguiente, trabajos de incuestionable manufactura no trascienden mientras que otros de menor envergadura funcionan a la perfección.

A priori eso mismo me sucede con “El maquinista”. A pesar de sus buenas hechuras, la peli de Anderson no me atrapa del todo y cuando eso sucede en un thriller, malo. Yo me aventuraría a sostener que esa falta de punch viene determinada por el hecho de que el espectador espera encontrarse con una peli de terror, o con un thriller como poco, y lo que se le sirve en bandeja es una peli de intriga moderadamente pretenciosa que pierde fuelle a medida que va avanzando y cuyo estandarizado desenlace desbarata cualquier esperanza de remontada ‘in extremis’.

Lo siento. La faena de Anderson es más que correcta, pero creo sinceramente que ha pinchado hueso en la estocada final. Ya sé que una mala tarde la tiene cualquiera pero como aborrezco los toros, no voy a concederle a este maquinista más que un estricto ‘interesante’. Por más que la producción sea española y por más que la interpretación de Christian Bale sea soberbia. Es lo que hay.

He tenido la oportunidad de ver esta película en DVD dejándome llevar por las buenas críticas a las que ahora yo también me sumo. Se trata de una película diferente, que te mantiene en todo momento en vilo, intentando desenmarañar esa oscura trama del personaje.. Bale excelente en su papel y asombra su increíble cambio físico en pos de hacer más creíble un personaje que borda... Quien no la haya visto aún se está perdiendo algo realmente bueno...

El maquinista nos transporta a la torturada mente de un ciudadano americano de clase obrera. Constituye una gran propuesta acerca del poder de las acciones y el daño psicológico que la culpabilidad puede causar en nuestra psique.

Brad Anderson realiza un notable trabajo, haciéndonos partícipes de todo cuanto le sucede a Trevor Reznik durante su despertar existencial. Resulta magnífica la alegoría de la autopista al infierno/salvación que representa la distancia existente entre olvido/recuerdo y cordura/locura. Ésta se manifiesta como percepción subjetiva, e incentiva al protagonista a elegir entre proseguir con su búsqueda hacia la verdad (Recuerdo, cordura = Salvación) o resignarse al abandono y la paranoia (Olvido, locura = Infierno). La película representa un intenso, interesante y aleccionador viaje en este sentido.

El maquinista, resulta de gran utilidad para hacernos entender la vulnerabilidad de nuestra estabilidad mental y cuan ligada se encuentra ésta con nuestra conciencia. El film profundiza en las consecuencias que un comportamiento marginal puede desatar y los beneficios que se obtienen practicando una conducta civilizada. Nos enseña que una simple acción no aceptable según lo establecido en nuestra sociedad, puede fomentar el nacimiento de una reacción en cadena que promueva la activación de nuestro lado más oscuro. Habla de la confesión como medio de redención y del castigo como terapia o curación. Todo ello lo envuelve con una atmósfera que nos sumerge en el tortuoso abismo por el que está pasando Trevor Reznik, sin necesidad de tratar de volvernos locos con fórmulas a lo David lynch, Terry Gilliam o Wes Anderson.

No quisiera olvidarme del gran trabajo realizado por Christian Bale. Este joven treintañero, fomenta la credibilidad de cada uno de los personajes que protagoniza, convirtiéndose en ellos y dotándolos de sentido y profundidad. No cabe duda que su presencia aumenta la calidad de la película.

En definitiva: Una cinta muy bien interpretada, compleja pero accesible, que cuenta con una convincente banda sonora, una espléndida fotografía y que retrata muy bien el daño que una persona puede llegar a hacerse a si misma.

Esta es de esas películas que encontré sin querer, sin buscarla y sin que nadie me la recomendara, pero que después de verla quede maravillado y cada que la vuelvo a ver, me gusta un poco mas.
La ambientación es extraordinaria, la actuación de Bale es para enmarcar (Solo verlo ya es un espectáculo), el guión es buenísimo y el final impactante.
El sentimiento de tranquilidad que siente el protagonista cuando la película esta a punto de terminar es inversamente proporcional a la satisfacción que sentí después de haberla visto.

Es muy difícil lograr un guión tan preciso para una atmósfera tan angustiosa: y ahí está el sorprendente logro de un periplo alucinatorio que se cierra con un final espléndido, redondo, clave para que no se desmorone lo tan bien conseguido.

En esta coproducción UK, USA y España, destaca el alto nivel del equipo técnico casi totalmente hispano. La música de Roque Bañas acentúa el dramatismo con un cierto toque de homenaje a los maestros de los años 40-50.

Admirable trabajo de Christian Bale en todos los aspectos, incluido su impresionante adelgazamiento. Jennifer Jason Leigh está muy bien, como siempre, y nuestra Aitana brilla en su breve colaboración.

Interesante aunque finalmente decepcionante segunda incursión de Anderson en el terreno del fantástico y el terror tras la escalofriante e irregular Session 9. Aquí un refinado y algo relamido ejercicio de género encubre una parábola (más moralista de lo que debiera) sobre la culpa y cómo esta nos consume hasta niveles inimaginables. El director dosifica bien el suspense y logra secuencias realmente inquietantes (pienso en ese perverso trayecto por la Ruta 666), pero a veces descubre demasiado las cartas, consiguiendo en último término rebajar el impacto de la sorpresa final, que ya no es tal, sino un previsible (y lógico) giro dramático que dota de sentido a la historia. Su mejor baza está en la asombrosa y acojonante interpretación del esquelético Christian Bale, creíble en su desesperada búsqueda de respuestas. Pero claro, Anderson no es Polanski, y, pese a las similitudes, El maquinista dista mucho de ese clásico paranoico que es El quimérico inquilino.

Lo mejor: un asombroso Christian Bale.
Lo peor: mucha moralina.

Una auténtica cinta de suspense, de las que salen de vez en cuando. Chistrian Bale desde luego borda el papel, y Aitana tampoco está nada mal. Yo por mi parte le hubiera dado un Oscar a la película, pero claro contra gustos no hay disputa. La recomiendo, porque te dejará pegado al asiento.
Me llevé una agradable sorpresa al ver que gran parte del equipo es español, y me suena que está rodada en Badalona y Barcelona.
En fin, un peliculon para mi gusto.

Tal vez sea el cuarto de hora en la fama de Christian Bale, pero sin ser prejuicioso, este actor da la impresión de saber escoger que películas encarnar.
EL maquinista es una de ellas, es un film que nos muestra como los seres humanos al no poder superar la culpa por las cosas que hacemos, podemos llegar a desarrollar patologías psicológicas, que reflejan el karma de nuestras acciones.
La trama y desarrollo de la historia es excelente, pues no se antepone un final predecible, si se sigue la trama, el argumento es envolvente, llevando a sacar conclusiones y enseñanza de vida.

Bueno, está claro cual es una de mis películas favoritas al ver mi nick. Y además, ¡¡es española!! Increible. Me quedé boquiabierto al ver a mi ídolo platónico, Mr. Bale, convertido en un amasijo de carne y huesos, sobre todo huesos. La atmósfera desasosegadora y opresiva que te atrapa como en pocos films me hizo temblar de miedo, sí, en algunos momentos sentí miedo, y a la vez emoción por ver, una vez más, una película en condiciones. ¿El final es previsible? Much@s dirán que sí pero también lo son las pelis de la 2ª Guerra Mundial y de la vida de Jesús y nadie dice nada al respecto. Totalmente recomendable para ver en soledad, con el volumen medio y la luz apagada (ésto último para l@s más valientes).

Creo que no se ha votado suficientemente bien este film de Bran Anderson. Tal vez porque no se ha entendido el argumento o porque no se ha prestado mucha atención durante la película pero a mi parecer esta película es bastante buena. Esta es la intriga que se busca en un thriller como este. Fabulosa. El final es lo mejor.

Muy buenos días a todos. "El maquinista" es un drama psicológico considerado "película de culto" sobre un "hombre" (más bien un cuerpoescombro extremo) que padece un grave caso de insomnio, y se mueve en un mundo onírico de pesadilla en el que no se sabe que es real y que no lo es. Posee una poderosa ambientación tétrica y un guión cuidadosamente construido que engancha al espectador y oculta una interesante reflexión sobre la culpa y la redención. No es del todo original pues el espectador experimentado podrá percibir en la película ecos de otros films como "Memento" pero el director consigue dotar a su obra de personalidad propia aunque algunas cosas se vean venir de lejos.

"El maquinista" es un thriller perturbador y absorbente que cala hondo en el espectador y que sólo pierde puntos por la floja interpretación de Christian Bale y lo grotesco que resulta su aspecto físico en pantalla (poco después recuperaría 20 kilos de masa muscular en pocos meses gracias a los ESTEROIDES) . Buena película de todos modos y recomendable.

P.D.: La verdad es que cuando el mensaje intrínseco de la cinta salió a relucir adquirió verdadero valor emocional para mí y me sentí realmente identificado con el protagonista, de ahí mi alta valoración.

Muchos en algún momento de nuestra vida hemos hecho cosas de las que no nos sentimos orgullosos y esos remordimientos pueden machacar nuestras conciencias. En mi caso aún me desvelo por las noches recordando aquella calurosa tarde de abril en la que iba corriendo sin camiseta por las calles de mi ciudad tras una sesión de gym, en principio no me la quería quitar porque es algo que está muy mal visto pero el calor comenzó a asfixiarme y al final me acabé quitando la camiseta. Entonces ya de lejos la vi venir, una muchacha que iba en un Fiat 500 me empezó a mirar de reojo desde lejos y no me quitó el ojo en ningún momento, la cosa es que había un semáforo en rojo y al frenar tarde le dio un pequeño golpe por detrás al coche de delante, la verdad me supo mal, porque también yo fui culpable de ese accidente, y no me paré a ayudar a la joven con el papeleo y demás. Ahora se que un físico IMPACTANTE como el mío conlleva una responsabilidad y un cuidado especial, y desde entonces aunque ya no puedo hacer nada por aquella muchacha en cuestión intento redimirme siendo amable y atento día a día con el prójimo y la gente de a pie.

Sin embargo esa experiencia aún me persigue y perturba en ocasiones mi descanso.