El desierto viviente (1953)

Se me puso delante mío porque el azar lo quiso, pero es cierto que una vez al alcance de un solo click del mando de la televisión no supe decir que no porque su atractivo es enorme. El anzuelo no es poca cosa, un documental de los años 50 con la fotografía en color y que dura poco más de sesenta minutos, era a priori perfecto incluso a las malas para echar una cabezada. Y el caso es que "El desierto viviente" no defraudará a los espectadores de documentales de animales a la hora de la siesta, tanto para los que busquen conciliar el sueño como para los que busquen información. De hecho, estoy por afirmar que debe de ser una de las primeras realizaciones con el objetivo de explicar con imágenes la vida de los animales libres, en su medio original, tal y como nacen y tal y como mueren (en color, por supuesto).

Ahora bien, lo que me parecía un encantador descubrimiento al principio, repleto de aciertos, se ha ido transformando en otra cosa a partir de ciertas dudas cada vez mayores. No soy escéptico en cuanto a la información, no tengo ganas de ir a comprobar si la lechuza vive así en el desierto de Arizona, si esos roedores sólo salen de sus madrigueras por las noches o si una avispa es capaz de matar a una tarántula. El mayor interrogante aparece cuando pienso que detrás de este documental está la Disney y que la iluminación en según qué momentos es sospechosa, ¿de qué?, lo mismo que dudan algunos de que la NASA llegó a la luna y creen que aquello era un montaje, hay algo que me dice que lo que vemos en "El desierto viviente" está filmado en un zoo, en el terráqueo de algún millonario o directamente en un plató de Hollywood con cactus de cartón piedra y todo. No me baso en nada más que en la intuición y no tengo ganas de investigar si es así o no. Pero dudo, dudo mucho que un biólogo se tire días, semanas o meses esperando a grabar a la avispa y a la tarántula, o a la familia de ratoncillos...

Aún así, aunque fuera todo mentira, qué leches, yo he disfrutado. Además, llegar a FA y comprobar que existe la reseña del documental y que soy el primero en escribir algo es un placer enorme...

Posiblemente el documental más famoso producido por la factoría Disney, galardonado con el Oscar y otros premios. La fauna de las zonas desérticas americanas es captada con notable sentido de la observación, siendo especialmente destacable el apartado dedicado a los insectos.

El conjunto es aparente y revelador, pero no consigue evitar que en algunos momentos haga aparición el fantasma del tedio. De hecho es lo que me ha ocurrido a mí, que me va mucho más la fauna salvaje, que os insectos y los pájaros. Se ha quedado un poco bastante obsoleto, aunque en su día puedo entender su éxito. Un 6.