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Oh Boy (2012)

Oh Boy
83 min.
6,8
3.630
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Disponible en:
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Tráiler HD (ALEMÁN con subtítulos en ESPAÑOL)
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Sinopsis
Niko (Tom Schilling) es un joven veinteañero que abandona la universidad y acaba vagando por las calles de Berlín. Celebrada ópera prima, en blanco y negro, que trata sobre el deseo de participar en la vida y la dificultad para encontrar un lugar en el mundo. (FILMAFFINITY)
Género
Comedia Drama Comedia dramática Drama social
Dirección
Reparto
Año / País:
/ Alemania Alemania
Título original:
Oh Boy
Duración
83 min.
Guion
Música
Fotografía
Compañías
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Premios
2012: 6 Premios del Cine Alemán: incluyendo mejor película, director y guión
2013: Festival de Sofía: Mejor película
2013: Premios del Cine Europeo: Premio Discovery. 4 nominaciones
9
Una mala vida la tiene cualquiera
'Oh Boy' es algo más que una película. Es, como 'Lost in translation' (Sofia Coppola, 2003), un estado de ánimo, un reflejo fantasmal y sincero de lo que somos o, al menos, de lo que fuimos en algún momento. Envuelta en el halo del cine mumblecore (mínimo presupuesto, diálogos de corte realista), recuerda inevitablemente a los inicios de Jim Jarmusch, pero la cinta de Gerster conquista una identidad propia y un estilo personal. Su mirada inyecta poesía al relato pero no lo sobrecarga, la banda sonora acompaña con elegancia la historia pero no la subraya. Parece que cada elemento está colocado donde debería, con esa precisión de reloj suizo impropia en un director novel.

La cinta narra 24 horas en la vida de Niko, un joven veinteañero acomodado que ha dejado sus estudios y deambula por las calles berlinesas sin rumbo, sin haber encontrado su lugar en el mundo. Irá encontrándose con diversos y pintorescos personajes, viviendo situaciones a cada cual más insólita y extraña. La interpretación del personaje principal corre a cargo de un sobresaliente Tom Schilling, cuyo compromiso con Niko es absoluto, entregando un muy sincero y realista retrato del fracaso, la derrota y la desesperanza. Su taciturno deambular recuerda a la nouvelle vague, visualizado por unas bellas imágenes en blanco y negro que confirman en buen gusto estético, ético y sonoro del cineasta. Hay estimulantes visos de debate, pero prima ante todo el melancólico cuadro que se dibuja sobre el fracaso y la soledad, sin ofrecer respuestas ni salidas aunque, y es de agradecer, el autor deje ventanas abiertas para que el relato respire, sabiamente puntuado por momentos de hilarante comicidad. No olvida en su fascinante recorrido paradas tristes (el señor borracho), y reconduce el brillante macguffin del café hacia un final abierto, quizá luminoso, pero sin duda con varias lecturas.

Logra evitar que se tilde al film de burgués, pues su discurso es universal y en ningún momento vemos a un pobre rico malcriado, sino simplemente al rostro más descarnado de la juventud desnortada de nuestra época. Duele y emociona, provoca empatía y, llegado a cierto punto, causa conmoción. Es nihilismo puro, sin disfraces ni etiquetas, pero no terminal, sino con los ojos puestos, quizá, en el camino, que sigue avanzando delante de uno mismo.

http://www.asgeeks.es/movies/fin-de-semana-europeo-criticas-de-joven-y-bonita-y-oh-boy/
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54 de 65 usuarios han encontrado esta crítica útil
7
Un día en la vida de un joven berlinés: el lento declive hacia la nada
Estamos ante el retrato de un joven abusón insignificante (ni estudia, ni trabaja) y que vive de mentir a su padre y haber recibido hasta ese momento los 1000 euros mensuales que éste le pasaba ante la creencia falaz de que estaba estudiando en la universidad. Pero un buen día el padre se entera, le cancela la cuenta bancaria y se encuentra abocado a la indefensión financiera mientras a su alrededor se va disolviendo y agotando la vida de parásito caradura que ha llevado, dando tumbos, incapaz de reconducir su existencia, ayuno de vigor y falto de objetivos y de sentido.

La inmadurez tiene muchas caras, ninguna grata ni complaciente. El fracaso se manifiesta en su inutilidad para mantener relaciones significativas o vínculos afectivos relevantes, apresado por su total falta de consistencia, su negación de cualquier meta, su ineptitud por encontrar un propósito que le lleva más allá de la mera subsistencia. Se deja llevar por los acontecimientos como una hoja al viento, dependiendo de las corrientes arbitrarias que lo llevan de un lado a otro, con ciertos encantos y nulos logros, sin más ayuda que una presencia agradable y un trato sin complicaciones aparentes. Pero hay algo roto, desarticulado, enmarañado y artero en su alma que le deja al borde del precipicio, sin capacidad de reacción, sin propósito de enmienda.

Si bien esta cinta parece posicionarse como ‘nueva comedia alemana’, la risa o la sonrisa brillan por su ausencia y nos encontramos más bien con un afligido drama sobre la incapacidad de vivir, de configurar una personalidad con un mínimo de textura o fondo. El tono moroso contribuye a transmitir el fin de una época vital pero no anuncia el comienzo de nada nuevo ni esperanzador. Es un callejón sin salida en blanco y negro donde ni el presente ni el pasado parecen guardar ningún cartucho en la recámara y todo parece abocado a perpetuarse en una grisácea cotidianidad del perdedor sin futuro.

Interesante muestra del cine alemán contemporáneo (europeo en general) que parece reflejar la pérdida de valores, interés o ilusión. Nada presagia un mañana redentor que ni se busca ni se merece. Atribulado reflejo de la falta de empuje de una generación cadavérica y adocenada que busca la mera subsistencia parásita. Buena cinta que se ve con interés pero que quizás no contribuya a darnos ni la más mínima esperanza sobre el porvenir: certera muestra de la ausencia total de vitalidad o ambición.
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49 de 69 usuarios han encontrado esta crítica útil
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