No te olvides de mí (2016)

Una historia simple, magistralmente contada y con 0 clichés. Magnífica actuación de Sbaraglia que a ésta altura intuyo que no tiene nada que envidiarle a Darín.
Puro sentimiento en una película melancólica y muy real con un estupendo final.
Altamente recomendable, pochocleros abstenerse.

El cine argentino tiene algunas películas dramáticas que son “meh”, este término lo usé varias veces. El uso que yo le doy es simplemente eso una película que, si la ves está bien, y si no la ves también. Es el caso de este drama ambientado en 1934, una historia que no suma nada, pero tampoco está mal. Con actuaciones aceptables y una duración de 88 minutos.

Lo que siempre me atrae y me fascina de este tipo de películas ambientadas hace muchos años atrás es lo bien que logran hacer de cuenta que estamos en 1934. Tengamos en cuenta que es un film independiente, por ende, no debe haber tenido mucho presupuesto, si tuvo el apoyo del INCAA (ojalá no lo cierren). Tiene muchos puntos a favor con lo bien ambientada que está. Es cierto que no desconozco cómo es la ambientación de esa época, pero yo les creí.

En cuanto a la historia, no es muy atractivo lo que sucede. Es una road movie (lo cual hace más valioso el logro en la ambientación) en el cuál seguimos a este inmigrante italiano, quién no parece serlo porque de chico vive en Argentina, y a dos hermanos que van en busca de su padre. En este viaje se van conociendo y va creciendo un vínculo entre ellos. Está bueno el desarrollo de ese vínculo, vemos lo bien desarrollado que está sobre todo por parte de la hermana, quién desconfía mucho de Mateo.

Actoralmente está bien. Leonardo Sbaraglia hace tiempo ya es considerado uno de los grandes actores nacionales, en este film está bien, cumple con el rol. Cumelen Sanz está bien también, es la primera vez que la veía en pantalla y me gustaron mucho sus caras, sus expresiones. Al pequeño Santiago Saranite lo había visto antes en “La fragilidad de los cuerpos” y me había gustado, acá también hace una gran labor. Sandra Criolani aparece un poco, pero lo hace bien.

En resumidas cuentas, un film para ver una ambientación bien lograda de los años 30, una historia de amistad, de conocerse a través de un viaje en la ruta. Un film que no te va a dejar ningún mensaje en particular, pero tiene algunos mensajes sutiles cerca del final que están interesantes. La historia está bien contada, no le sobra nada y es llevadera.

Mi recomendación: Pasable película nacional, una de esas para ver y luego olvidar.

Mi puntuación: 5/10

Donde Verla: Star+