Royal Space Force (1987)

Quizás los 80 fueron la era dorada de la animación Japonesa donde la experimentación y la incursión en temas más serios y para otros tipos de público fueron la constante en esos años. Películas como Nausicaa o Akira son buena prueba de ello. También fué el debut de una empresa que aunque no es santa de mi devoción por sus trabajos como lo es Gainax (su preferencia por lo experimental me es demasiado saturador y monótono a ratos, sobre todo cuando Anno estaba presente) reconozco que esta vez hicieron un excelente trabajo con esta ópera prima.

Es una lástima que su debut coincidiera con el de Akira allá en el 87, y dado que aunque su argumento giraba igualmente en torno a la ciencia ficción, incitaba más a una reflexión más humanista y filosófica junto con un mayor hermetismo visual que en la modernista y cargada de densidad en lo gráfico que es la cinta de Akira (la cual considero igual un excelente trabajo) de ahí su fracaso en taquilla y tras lo cual Gainax quedó con deudas gigantescas las cuales no pagaron hasta el estreno de Gunbuster. Hoy en día es más valorada por la crítica y algunas la consideran la obra maestra del anime (tiene sus puntos a favor al fin y al cabo) Yo por mi parte la considero la mejor opera prima del anime por parte de una productora y lo mejor que ha hecho Gainax hasta ahora.

La historia aunque con un argumento más sencillo y menos complejo y ambicioso que otras producciones similares, permite mostrar un paralelismo entre la época de la guerra fría y los inicios de la carrera espacial invitando a una reflexión sobre como la admiración y el entusiasmo por los avances del ser humano se ensombrecen por su aplicación inmediata a los enfrentamientos militares y ambiciones políticas.

La Animación es típica de los 80 pero correcta sobre todo en el diseño mecánico, excelente la música de Sakamoto que esta vez si encaja con esta cinta a diferencia de Feliz Navidad Sr Lawrence donde parece algo desubicado.

Muy recomendable

9.5

No seré yo el abuelo que de la brasa contando el típico tocho. Este clásico me llamó la atención por su estética steampunk y su vistosa banda sonora electro, future jazz, y tal. Su producción cayó en manos de Bandai Visual, compañía famosa por comercializar el Tamagotchi, dar vida a la saga DB, a los Power Rangers, etc.

Es cierto que el film hace alarde de un impecable estilo visual, pero su ritmo dramático saltarín lo mata. Múltiples momentos incitan al aburrimiento; incluso puedes pegar un par de cabezadas que no pierdes el hilo.
Bastante culpa de ello tiene Shito, un personaje con menos vida que el aeropuerto de Castellón. Para colmo, cuando quiere "despertar" se convierte en un acosador enfermizo. Me impactó, y mucho (modo ironía: on), esa secuencia donde "intenta" violar a su compañera de hogar; pobre "desgraciao".

Y todo ese cuento de la Fé en un nuevo Dios ¿a qué cojones viene? ¿sufrieron los guionistas de esguinces de muñeca? o ¿acaso pretendían forjar una nueva secta?! Definitivamente, al guión le falta fuerza.

Sin embargo no es Dios todo lo que reluce.

Los españoles sabemos de Ryūichi Sakamoto sobre todo por haber sido el director de la música de los Juegos Olímpicos de Barcelona' 92. Royal Space Force cuenta con piezas maestras adelantadas a su época; "Fade" y "Muda" imprescindibles. Sólo por ese japo vale la pena ver la peli.