arrow

La novia de Glomdal (1926)

La novia de Glomdal
70 min.
6,5
191
Votar
Plugin no soportado
Añadir a listas
Película completa (subtítulos en inglés)
Sinopsis
Tore, hijo de un pobre granjero, ama a Berit, hija de un rico. Pero ella está prometida a otro hombre, a quien no ama y con el que se niega a casarse. (FILMAFFINITY)
Género
Drama Vida rural Cine mudo Bodas
Dirección
Reparto
Año / País:
/ Noruega Noruega
Título original:
Glomdalsbruden
Duración
70 min.
Guion
Fotografía
Compañías
Coproducción Noruega-Suecia;
Links
6
Glomdalsbruden
Glomdalsbruden (La novia de Glomdal, 1926) fue la película que antecedió en la carrera de Carl.T Dreyer a una de sus obras cúspides, La Passion de Jeanne D’Arc (La pasión de Juana de Arco, 1928), producida en Oslo y sin un reconocimiento excesivo por parte de la crítica. La historia, con guión de Dreyer y basada en la obra de Jaco Breda Dull es una coproducción danesa y noruega, que trata una historia romántica bastante arquetípica.

La historia gira en torno a Berit, la hija de un granjero que posee bastantes tierras en su pueblo, que en realidad desea casarse con otro aldeano, Tore. Sin embargo, su padre decide que el mejor destino para su hija es el casamiento con el hijo de un rico terrateniente. La historia, que como vemos leyendo el argumento podría quedar en una historia folletinesca, supera este tono gracias a Dreyer, que consigue imprimir a su película una sensibilidad muy diferente a la de otras películas semejantes. La película da además una gran importancia al paisaje rural en el que se desarrolla la película, tal como sucediera también en otros cineastas nórdicos del primer cine mudo, como podría ser el caso más célebre con Victor Sjöstrom, en obras como Berg-Ejvind och hans hustru (Los proscritos, 1917), que explotaba el dramatismo del paisaje, que en ese caso iba en sintonía con los sentimientos de los personajes.

Sin embargo, la Novia de Glomdal es una película ciertamente anticuada. A pesar que con The Birth of A Nation (El nacimiento de una nación, 1915) de Griffith, muchos autores consideran que el Modo de representación clásico queda ya instaurado de manera oficial en el cine, la Novia de Glomdal sigue mantiendo una puesta en escena que parece ciertamente atrasada y más cercana a los films de Mélies que a las películas coetáneas que se estaban realizando en el 1926. Realizada siempre con una gran cantidad de planos generales, no encontramos en la visión de Dreyer una fuerte personalidad artística (que si encontraríamos apenas dos años más tarde). De hecho, formalmente, otros directores podrían haber firmado perfectamente la película, sin que hubiéramos notado excesivas diferencias. Hay primeros planos y en alguna secuencia vemos un montaje inteligente, pero en general la cámara adopta una puesta en escena fría que no se implica con los protagonistas a los que está registrando, y la película se encuentra más cerca de la escenografía teatral que de la propia creación cinematográfica. Buena muestra de ello es el final de la película. Uno de los personajes protagonistas cae en un río. La cámara, en vez de captar el dramatismo de la escena mediante diferentes planos que nos muestran como el protagonista trata de escapar de los rápidos que se forman en el cauce, intenta describir la situación desde planos generales y mediante la utilización de diversos subtítulos de texto que apoyan lo que la imagen no es capaz de mostrar.

Temáticamente, la película es sin duda mucho más interesante. Uno de los temas principales es el amor, que se impone como una de las fuerzas más poderosas dentro del pueblo. A pesar de que el dinero, con un matrimonio de conveniencia, planea sobre la auténtica pareja , es el amor el que acaba imponiéndose. Pero no un amor folletinesco, sino una verdadera relación, natural y pura, que Dreyer se encarga de relacionar con la misma naturaleza donde se ambienta el relato. Dreyer descarta los gestos excesivos, e incluso la figura paterna, que en un principio rechazaba la relación entre los jóvenes, acaba aceptando su error. El propio Dreyer habla sobre la importancia de la naturaleza en la película:

“Stub Wiberg y Harald Stormoen, en los papeles del rico campesino y del campesino pobre, cuyos dos hijos se aman. Viven en las dos orillas opuestas de un torrente, el rico en el lado fértil, donde las hayas y los abedules se cargan de hojas y el pobre en el lado rocoso, donde la tierra es árida e inhóspita, e incluso los propios pinos y abetos. Hice de tal modo que, durante toda la película el hijo del campesino pobre estuviese situado en un ambiente severo, mientras la hija del campesino rico viviese rodeada de una naturaleza más clemente”[1]

Como en Getrud (Gertrud, 1964), uno de los aspectos más bien tratados es el de la psicología femenina, encarnada en La novia de Glomdal por el personaje de Berit. Además de otros aspectos, como la distinción entre las diversas clases sociales (los dos enamorados pertenecen a dos mundos diferentes) uno de los aspectos más destacables es la fotografía compuesta por Einar Olsen, con los ya comentados planos generales sobre paisajes que determinan parte de la visión de la película.

http://neokunst.wordpress.com/2014/06/01/ciclo-carl-t-dreyer-la-novia-de-glomdal-1926/


[1] Juan Antonio Gómez García, Carl Theodor Dreyer, Ed. Fundamentos, Madrid 1997, pp. 112
[Leer más +]
5 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Más información sobre La novia de Glomdal
Fichas más visitadas