Alas de mariposa (1991)

Claustrofóbica e intimista historia acerca de la relación amor-odio de una madre y su hija, marcadas ambas por una circunstancia terrible ocurrida en la infancia de la hija.

La película denuncia el machismo predominante en una familia tradicional vasca, donde tras varias generaciones sin niños varones, nace de nuevo una niña, la protagonista, siendo ignorada por el patriarca de la familia, abuelo de la niña. Este asunto lo ejemplifica Bajo Ulloa estupendamente en el arranque de la película; el abuelo espera en un largo y oscuro pasillo, golpeando con su bastón el suelo, impaciente; la enfermera comunica al hombre que tiene una nieta; éste se levanta y, sin decir palabra, se aleja por el pasillo.

La relación madre-hija está contada magistralmente, y a ello ayuda la excelente creación de Silvia Munt (que obtuvo el Goya) y la joven actriz Susana García. También destacados en papeles secundarios Tito Valverde, Txema Blasco, y la niña Laura Vaquero, de inquietante mirada.

Y lo digo porque creo que la segunda parte de la película desmerece por completo a la primera. El inicio es magnífico y consigue atraparte gracias a su atmósfera oscura y agobiante y a una historia trabajada y de interés. Si hubiera terminado donde todos los que la hayan visto saben, el final, sin ser completamente cerrado, hubiera sido redondo, la culminación de lo que se había estado gestando hasta ese momento; todo lo que se cuenta después es redundante y accesorio.

Aparte de este problema, creo que la extensión de la película aflora defectos que habían pasado más desapercibidos. El primero es que no se sabe si se quiere presentar una película de intriga o un drama y, en este caso, la mezcla de géneros no resulta enriquecedora sino que vulgariza la película al decantarse, como en no pocas ocasiones ocurre en el cine español, por un drama social aparentemente cercano pero, en mi opinión, vacío.

El segundo problema que surge es el de las actuaciones. He leído elogios para Silvia Munt, sin duda la mejor en la película aunque quizá no como para ganar un goya, pero la actuación de Tito Valverde no es más que correcta, Txema Blasco apenas tiene papel, la niña solo funciona a ratos y, del resto, prefiero no hablar...

Por último quiero decir que discrepo de una crítica que elogia esta película frente al "engendro impresentable" que fue Airbag. Vale que Airbag no es Ciudadano Kane, pero Alas de mariposa tampoco. La primera es original y (muy) divertida, esta empieza aportando algo nuevo, pero acaba cayendo en los defectos en los que cae la mayor parte del cine español.