Ironside (Serie de TV) (1967)

La televisión estadounidense emitió a partir de 1967 hasta 1975 esta serie televisiva transmitida por la NBC con un total de 199 episodios. El principal protagonista era Raymond Burr, recién salido de otra famosa serie de TV (1957-1966), Perry Mason.

En el caso de esta serie que ahora comento, el personaje que interpreta Burr es el de Robert T. Ironside, un jefe de detectives del departamento de policía de San Francisco (California), con más de veinte años de experiencia y obligado a desplazarse en silla de ruedas.

Este drama y policial fue inicialmente dirigido con gran solvencia por su creador Collier Young, que encumbró la serie y la subió a lo más alto de la fama. A lo largo del tiempo le sucederían con fortuna equivalente otros directores, todos excelentes y sabiendo muy bien el sentido del personaje y de cada historia, en la que prevalecían los casos difíciles a modo de un equipo policial de excelencia.

Los actores, encabezados por Raymond Burr son muy eficaces y hacen, todos, trabajos de gran nivel. A ello se une el tipo de casos que aborda la película, casos y situaciones complicadas y a veces rocambolescas, con un Ironside comandando con gran inteligencia y audacia todas las operaciones. Están igualmente bien retratadas las particulares características personales de Ironside, que aun siendo una buena persona, hace igualmente gala de cierta sequedad y tosquedad.

El guión de Collier Young marcó el camino de esta serie: unos guiones que mantenían la tensión y el pulso narrativo de la mejor manera en la televisión de aquellos entonces. Un genial tema musical de Quincy Jones encuadra a la perfección esta serie policíaca, realzada por las notas del singular músico de color. Y enorme dirección de fotografía por parte de Bud Thackery.

En una sumaria comparativa entre las dos afamadas y grandes series interpretadas por Raymond Burr, yo diría que mientras el personaje de Perry Mason era el de un tipo fresco y a la vez calculador hasta que descubría el enredo de la trama oculta en cada crimen, Robert Ironside era un hombre lastrado, discapacitado, en silla de ruedas al que nada perturba.

Ambos personajes de la época, Mason y Ironside, cada cual en su estilo y con sus características, tuvieron un éxito sin precedentes, razón por la que tuvimos la suerte de tener en casa durante años a este actor al que quiero rendir un sentido y merecido homenaje con estas líneas.